US Open: Djokovic sacó a Murray en cuartos y espera por Nishikori

En un partido de alto vuelo, "Nole" superó al británico por 7-6 (1), 6-7 (1), 6-2 y 6-4 y avanzó a las semifinales. Allí se verá con el japonés, que bajó a Wawrinka en cinco sets y está entre los últimos cuatro de un Grand Slam por primera vez en su carrera.

04 SEP 2014 - 11:56 | Actualizado

Djokovic sacó adelante un encuentro durísimo, ante una de las mejores versiones de Murray en este 2014. El duelo se resolvió en los detalles y el escocés terminó pagando, también, su inestable condición física, castigada en el arranque del torneo y con un arrastre previo superior al de su rival en casi tres horas y media.

En la primera manga, Djokovic recuperó un quiebre tempranero de Murray y se adelantó por 4-1, pero el británico de a poco fue imponiendo su juego y emparejó el marcador al punto de contar con una chance de quiebre para quedar 5-4. Desarticulada esa posibilidad, el serbio se llevó el game con un grito furioso que levantó a todo el Arthur Ashe. Y las cosas se fueron a un primer tiebreak.

En ese desempate, nuevamente rápida ventaja de Djokovic, que con dos miniquiebres se escapó por 4-0. Y aquí no habría reacción posible para Murray, que en una hora y 13 minutos le cedía la primera diferencia al número uno del mundo.

El segundo set tuvo un recorrido parecido, con Djokovic al frente por 3-1 y la recuperación de Murray hasta 3-3, dando inicio a una serie de tres quiebres consecutivos y rallies de altísimo nivel. En un nuevo tiebreak, reinó la derecha del escocés (que ya había tenido un set point en 6-5) y, con idéntico marcador (7-1), el trámite quedó igualado.

El poderío de Murray abría otro partido, pero Djokovic repitió patrones: presión sobre el servicio del rival y rápido premio. Nueva ventaja de 4-1 para el serbio, que salvó dos break points decisivos en ese quinto game y desde allí encaminó la manga, quebrando nuevamente al escocés en el octavo juego (6-2).

En el cuarto, entre cansancio y cartas conocidas, ambos llegaron sin quiebres al tramo final, pero en Murray emergó su agotamiento físico como signo de cierre. El escocés pidió trainer tras el séptimo game (antes de sacar 3-4) y cuando sirvió para permanecer en partido (4-5) Djokovic lo aprovechó. Dos pelotas sin fuerza en la red y un 0-30 que pronto derivó en bolas de partido para el serbio. No habría más remontadas.

De esta forma, Djokovic se convierte, además, en el séptimo jugador de la Era Abierta con al menos 50 victorias en el US Open. Y se una a Federer y Lendl con ocho semifinales consecutivas en el US Open, tan solo detrás del récord de Connors en la Era Abierta (12).

Pero mientras todas las mirabas se las llevaba el duelo entre los campeones, en la sesión diurna Nishikori y Wawrinka protagonizaron otra batalla en el Arthur Ashe, con nuevo festejo del japonés, que solo 32 horas atrás había estelarizado, ante Milos Raonic, el partido de más tardía definición en la historia del US Open, cerca de las 02:30 de la mañana.

Nishikori prevaleció en un duelo cerradísimo, donde de hecho terminó llevándose cuatro puntos menos que su rival (177 contra 181). Ambos estuvieron parejos al servicio, firmes con el primero y correctos desde el segundo. Además, cedieron la misma cantidad de break points (10), con dos concreciones del japonés y tres del suizo.

En los intercambios, Wawrinka fue más agresivo (68 winners -18 aces- contra 41), pero en esa búsqueda falló mucho (78 errores no forzados). Esa irregularidad se evidenció en el tercer parcial, donde el suizo levantó una desventaja de 2-5 para forzar el primer desempate del encuentro y luego desperdició un set point en 6-5 para perder la manga minutos después.

Tras un cuarto set sin quiebres, donde Wawrinka consiguió nivelar la historia en un nuevo tiebreak, parecía que el suizo finalmente lograría desequilibrar a Nishikori. Pero el asiático resistió los embates de su rival, levantó un 15-40 de arranque y se mantuvo en partido.

Así, cuando todo hacía prever una nueva y decisiva muerte súbita, las dudas de Wawrinka se conjugaron en un último game para el olvido, concediéndole a Nishikori sus primeros break points desde el tercer set. El japonés arriesgó con la devolución en el primero, pero en el segundo manejó el punto con inteligencia y una derecha a la carrera en defensa de Wawrinka hizo el resto.

Primera semifinal, entonces, para Nishikori en torneos de Grand Slam y nueva marca para el tenis japonés, que no tenía representantes en estas instancias a nivel Major desde 1933 (Jiro Satoh, en Wimbledon). A su vez, para encontrar un antecedente de este calibre en el torneo estadounidense hay que remontarse a 1918, tras lo hecho por Ichiya Kumagae.

Fuente: ESPN.

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04 SEP 2014 - 11:56

Djokovic sacó adelante un encuentro durísimo, ante una de las mejores versiones de Murray en este 2014. El duelo se resolvió en los detalles y el escocés terminó pagando, también, su inestable condición física, castigada en el arranque del torneo y con un arrastre previo superior al de su rival en casi tres horas y media.

En la primera manga, Djokovic recuperó un quiebre tempranero de Murray y se adelantó por 4-1, pero el británico de a poco fue imponiendo su juego y emparejó el marcador al punto de contar con una chance de quiebre para quedar 5-4. Desarticulada esa posibilidad, el serbio se llevó el game con un grito furioso que levantó a todo el Arthur Ashe. Y las cosas se fueron a un primer tiebreak.

En ese desempate, nuevamente rápida ventaja de Djokovic, que con dos miniquiebres se escapó por 4-0. Y aquí no habría reacción posible para Murray, que en una hora y 13 minutos le cedía la primera diferencia al número uno del mundo.

El segundo set tuvo un recorrido parecido, con Djokovic al frente por 3-1 y la recuperación de Murray hasta 3-3, dando inicio a una serie de tres quiebres consecutivos y rallies de altísimo nivel. En un nuevo tiebreak, reinó la derecha del escocés (que ya había tenido un set point en 6-5) y, con idéntico marcador (7-1), el trámite quedó igualado.

El poderío de Murray abría otro partido, pero Djokovic repitió patrones: presión sobre el servicio del rival y rápido premio. Nueva ventaja de 4-1 para el serbio, que salvó dos break points decisivos en ese quinto game y desde allí encaminó la manga, quebrando nuevamente al escocés en el octavo juego (6-2).

En el cuarto, entre cansancio y cartas conocidas, ambos llegaron sin quiebres al tramo final, pero en Murray emergó su agotamiento físico como signo de cierre. El escocés pidió trainer tras el séptimo game (antes de sacar 3-4) y cuando sirvió para permanecer en partido (4-5) Djokovic lo aprovechó. Dos pelotas sin fuerza en la red y un 0-30 que pronto derivó en bolas de partido para el serbio. No habría más remontadas.

De esta forma, Djokovic se convierte, además, en el séptimo jugador de la Era Abierta con al menos 50 victorias en el US Open. Y se una a Federer y Lendl con ocho semifinales consecutivas en el US Open, tan solo detrás del récord de Connors en la Era Abierta (12).

Pero mientras todas las mirabas se las llevaba el duelo entre los campeones, en la sesión diurna Nishikori y Wawrinka protagonizaron otra batalla en el Arthur Ashe, con nuevo festejo del japonés, que solo 32 horas atrás había estelarizado, ante Milos Raonic, el partido de más tardía definición en la historia del US Open, cerca de las 02:30 de la mañana.

Nishikori prevaleció en un duelo cerradísimo, donde de hecho terminó llevándose cuatro puntos menos que su rival (177 contra 181). Ambos estuvieron parejos al servicio, firmes con el primero y correctos desde el segundo. Además, cedieron la misma cantidad de break points (10), con dos concreciones del japonés y tres del suizo.

En los intercambios, Wawrinka fue más agresivo (68 winners -18 aces- contra 41), pero en esa búsqueda falló mucho (78 errores no forzados). Esa irregularidad se evidenció en el tercer parcial, donde el suizo levantó una desventaja de 2-5 para forzar el primer desempate del encuentro y luego desperdició un set point en 6-5 para perder la manga minutos después.

Tras un cuarto set sin quiebres, donde Wawrinka consiguió nivelar la historia en un nuevo tiebreak, parecía que el suizo finalmente lograría desequilibrar a Nishikori. Pero el asiático resistió los embates de su rival, levantó un 15-40 de arranque y se mantuvo en partido.

Así, cuando todo hacía prever una nueva y decisiva muerte súbita, las dudas de Wawrinka se conjugaron en un último game para el olvido, concediéndole a Nishikori sus primeros break points desde el tercer set. El japonés arriesgó con la devolución en el primero, pero en el segundo manejó el punto con inteligencia y una derecha a la carrera en defensa de Wawrinka hizo el resto.

Primera semifinal, entonces, para Nishikori en torneos de Grand Slam y nueva marca para el tenis japonés, que no tenía representantes en estas instancias a nivel Major desde 1933 (Jiro Satoh, en Wimbledon). A su vez, para encontrar un antecedente de este calibre en el torneo estadounidense hay que remontarse a 1918, tras lo hecho por Ichiya Kumagae.

Fuente: ESPN.


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