Renunció Chuck Hagel como secretario de Defensa de EEUU

The New York Times aseguró citando a altos funcionarios de la Casa Blanca, que la sorpresiva renuncia de Hagel llega por petición del propio Obama.

24 NOV 2014 - 13:17 | Actualizado

En una aparición conjunta ante la prensa en la Casa Blanca, el presidente Barack Obama elogió el desempeño en su cargo de Hagel, el único miembro republicano de su gobierno, y dijo que ambos habían acordado que era "el momento apropiado para que completara su servicio".

Hagel, de 68 años, es el primer miembro del gabinete de Obama que deja su puesto desde la debacle electoral del gobernante Partido Demócrata en las elecciones legislativas del 4 de noviembre pasado, en las que los republicanos se hicieron con el control total del Congreso.

Su renuncia llega, además, en momentos en que el equipo de seguridad nacional de Obama lidia con múltiples crisis internacionales, incluyendo la lucha contra el Estado Islámico (EI) en Siria e Irak y las tensiones con Rusia por el conflicto separatista en el este de Ucrania.

En el acto en la Casa Blanca, el presidente dijo que Hagel, con quien integró una comisión del Congreso cuando ambos eran senadores, fue un "secretario de defensa ejemplar" que forjó un vínculo intenso con las tropas estadounidenses estacionadas en distintas partes del planeta.

"Chuck Hagel se entregó a nuestra seguridad nacional y a nuestros hombres y mujeres de uniforme a lo largo de seis décadas", señaló Obama sobre el renunciante jefe del Pentágono, quien peleó en Vietnam y fue el primer veterano que llegó a titular del Departamento de Defensa.

Incluso después de los elogios y palabras del mandatario, la prensa norteamericana afirmó que Hagel se fue bajo presión, sobre todo del selecto círculo de altos asesores en seguridad de Obama, al que el mandatario había dado casi plenos poderes para delinear la estrategia en seguridad y política exterior.

Según The Washington Post, The New Yor Times y CNN, entre otros medios, los asesores de la Casa Blanca no confiaban en la capacidad de Hagel para comunicar las posiciones del gobierno y hasta se habían quejado de no verlo muy activo o involucrado en las reuniones de gabinete y otras discusiones de seguridad.

En lo que pareció un esfuerzo de Obama por refutar esas críticas, el presidente dijo hoy que Hagel "siempre me fue de frente" durante sus conversaciones privadas en el Salón Oval.

Hagel también expresó, en privado, sus frustraciones con la Casa Blanca.

Hace unas pocas semanas, envió una carta a la asesora de seguridad nacional, Susan Rice, en la que dijo que Obama necesitaba articular una visión más clara del enfoque de su gobierno respecto a cómo tratar con el presidente sirio, Bashar Al Assad.

La carta, que se filtró a la prensa, indignó a funcionarios de la Casa Blanca, informó CNN.

Ante la prensa, Obama dijo que Hagel aceptó permanecer en el cargo hasta que nomine a un sucesor y sea ratificado por el Senado.

El nombre que más fuerte sonaba para reemplazar a Hagel es el de Michele Flournoy, quien fue jefa de política del Pentágono durante los tres primeros años del primer mandato de Obama.

Flournoy, quien sería la primera mujer secretaria de Defensa, es actualmente directora ejecutiva del Center for a New American Security (Centro para una Nueva Seguridad Estadounidense), un instituto académico del cual es fundadora.

El momento elegido por Hagel para su partida podría derivar en una tormentosa audiencia de confirmación de su sucesor en el Senado. Los republicanos, que a partir del 1 de diciembre asumirán la mayoría en la cámara, han sido muy críticos de la política exterior de Obama.

El ex senador por Nebraska se había puesto al frente del Pentágono en febrero de 2013 en sustitución de Leon Panetta.

Sus principales misiones fueron recortar el presupuesto militar estadounidense, que todavía sigue en niveles altísimos como consecuencia de los atentados del 11-S, hace 13 años, y planificar la retirada de Afganistán.

Su renuncia llega, además, cuando acaba de conocerse que Obama firmó recientemente una orden autorizando la extensión del papel de las tropas estadounidenses en Afganistán en 2015 y por la que podrían involucrarse en operaciones de combate, informó la agencia de noticias EFE.

Hagel fue un gran crítico de George W. Bush durante su presidencia y de la guerra de Irak, que en un principio aprobó pero que posteriormente consideró "la metida de pata más peligrosa en la política exterior de este país desde Vietnam".

Hoy, durante su comparecencia para anunciar su renuncia, Hagel dijo que haber sido jefe del Pentágono fue "el mayor privilegio" de su vida.

"Continuaré apoyándolo, señor presidente", dijo a Obama al destacar, además, el "extraordinario liderazgo" del mandatario y del vicepresidente Biden, quien también participó de la ceremonia.

24 NOV 2014 - 13:17

En una aparición conjunta ante la prensa en la Casa Blanca, el presidente Barack Obama elogió el desempeño en su cargo de Hagel, el único miembro republicano de su gobierno, y dijo que ambos habían acordado que era "el momento apropiado para que completara su servicio".

Hagel, de 68 años, es el primer miembro del gabinete de Obama que deja su puesto desde la debacle electoral del gobernante Partido Demócrata en las elecciones legislativas del 4 de noviembre pasado, en las que los republicanos se hicieron con el control total del Congreso.

Su renuncia llega, además, en momentos en que el equipo de seguridad nacional de Obama lidia con múltiples crisis internacionales, incluyendo la lucha contra el Estado Islámico (EI) en Siria e Irak y las tensiones con Rusia por el conflicto separatista en el este de Ucrania.

En el acto en la Casa Blanca, el presidente dijo que Hagel, con quien integró una comisión del Congreso cuando ambos eran senadores, fue un "secretario de defensa ejemplar" que forjó un vínculo intenso con las tropas estadounidenses estacionadas en distintas partes del planeta.

"Chuck Hagel se entregó a nuestra seguridad nacional y a nuestros hombres y mujeres de uniforme a lo largo de seis décadas", señaló Obama sobre el renunciante jefe del Pentágono, quien peleó en Vietnam y fue el primer veterano que llegó a titular del Departamento de Defensa.

Incluso después de los elogios y palabras del mandatario, la prensa norteamericana afirmó que Hagel se fue bajo presión, sobre todo del selecto círculo de altos asesores en seguridad de Obama, al que el mandatario había dado casi plenos poderes para delinear la estrategia en seguridad y política exterior.

Según The Washington Post, The New Yor Times y CNN, entre otros medios, los asesores de la Casa Blanca no confiaban en la capacidad de Hagel para comunicar las posiciones del gobierno y hasta se habían quejado de no verlo muy activo o involucrado en las reuniones de gabinete y otras discusiones de seguridad.

En lo que pareció un esfuerzo de Obama por refutar esas críticas, el presidente dijo hoy que Hagel "siempre me fue de frente" durante sus conversaciones privadas en el Salón Oval.

Hagel también expresó, en privado, sus frustraciones con la Casa Blanca.

Hace unas pocas semanas, envió una carta a la asesora de seguridad nacional, Susan Rice, en la que dijo que Obama necesitaba articular una visión más clara del enfoque de su gobierno respecto a cómo tratar con el presidente sirio, Bashar Al Assad.

La carta, que se filtró a la prensa, indignó a funcionarios de la Casa Blanca, informó CNN.

Ante la prensa, Obama dijo que Hagel aceptó permanecer en el cargo hasta que nomine a un sucesor y sea ratificado por el Senado.

El nombre que más fuerte sonaba para reemplazar a Hagel es el de Michele Flournoy, quien fue jefa de política del Pentágono durante los tres primeros años del primer mandato de Obama.

Flournoy, quien sería la primera mujer secretaria de Defensa, es actualmente directora ejecutiva del Center for a New American Security (Centro para una Nueva Seguridad Estadounidense), un instituto académico del cual es fundadora.

El momento elegido por Hagel para su partida podría derivar en una tormentosa audiencia de confirmación de su sucesor en el Senado. Los republicanos, que a partir del 1 de diciembre asumirán la mayoría en la cámara, han sido muy críticos de la política exterior de Obama.

El ex senador por Nebraska se había puesto al frente del Pentágono en febrero de 2013 en sustitución de Leon Panetta.

Sus principales misiones fueron recortar el presupuesto militar estadounidense, que todavía sigue en niveles altísimos como consecuencia de los atentados del 11-S, hace 13 años, y planificar la retirada de Afganistán.

Su renuncia llega, además, cuando acaba de conocerse que Obama firmó recientemente una orden autorizando la extensión del papel de las tropas estadounidenses en Afganistán en 2015 y por la que podrían involucrarse en operaciones de combate, informó la agencia de noticias EFE.

Hagel fue un gran crítico de George W. Bush durante su presidencia y de la guerra de Irak, que en un principio aprobó pero que posteriormente consideró "la metida de pata más peligrosa en la política exterior de este país desde Vietnam".

Hoy, durante su comparecencia para anunciar su renuncia, Hagel dijo que haber sido jefe del Pentágono fue "el mayor privilegio" de su vida.

"Continuaré apoyándolo, señor presidente", dijo a Obama al destacar, además, el "extraordinario liderazgo" del mandatario y del vicepresidente Biden, quien también participó de la ceremonia.


NOTICIAS RELACIONADAS