Vuelve el “Tigre” Saldivia

El sábado 20 volverá enfrentando a Juan José Días en el Socios Fundadores. “Al boxeo argentino lo encontré igual que cuando me fui”, resume.

03 DIC 2014 - 21:23 | Actualizado

Camina de nuevo las calles de la ciudad, siente el viento en la cara e inevitablemente, eso lo hace feliz. A Héctor David Saldivia parece, la lejanía, le ayudó a mirar su vida con otro sentido. Los miles de kilómetros que lo separaron de afectos y amigos le dieron al “Tigre” una clase de madurez. Y regresado de los Estados Unidos, ya se prepara para desempolvar el bucal y las botitas. El próximo 20 de diciembre reaparecerá en el “Socios Fundadores” combatiendo ante el bonaerense Juan José Dias, dejando atrás casi dos años de inactividad y seis meses en entrenamiento en las Ligas mayores del boxeo.

Sin barreras

“El idioma nunca fue una barrera porque estaba lleno de latinos”. La vida americana de Héctor Saldivia fue de aprendizaje; codearse con primeras figuras y guantear con estrellas como Shane Mosley y Paulie Malignaggi. Aunque el objetivo deportivo –el de pelear y reposicionarse- no se cumplió, el “Tigre” dejó de ser un desconocido o un excampeón argentino en retirada. “No pelear en este tiempo me complicó, allá pensaban que ya no boxeaba más. Rescato los contactos y haber entrenado en el máximo nivel”.

El 2015 será un año de definiciones. Pelear en Argentina, volver al ring y gestionar en territorio americano serán partes determinantes para su futuro deportivo. “Quiero darme la oportunidad y no quedarme en que pude y no me animé. Es como un desafío personal. Antes a los 30 te consideraban grande, ahora la mayoría de los campeones explotan a los 34 o 35”, dice Saldivia quien observa sin cambios al boxeo argentino. “Está siempre igual. Para hacer algo y buscar el dinero grande hay que ir a EEUU como hicieron Maidana, Matthysse, “Maravilla”, Cuellar o ahora Abregú”.

Reaparición

En su reaparición Saldivia cargará kilaje adicional ya que se instalará en 154 libras (superwelter), un peso más acorde a su evolución física y que dará en la balanza sin padecimientos. El “Tigre” tuvo dos contras en este proceso en el exterior: su falta de actividad en los últimos años y su renuncia a los títulos que poseía, circunstancias que lo excluyeron del gran negocio. Si embargo un par de peleas en Argentina podrían proyectarlo a una nueva oportunidad internacional a través de Sebastián Contursi, el periodista y asesor de Marcos “Chino” Maidana. Y eso llevaría a Saldivia nuevamente a USA; al campamento de Oxnard, California y quizás hasta el mismísimo Robert García.

“Le pido al público que me ayude en esta etapa. No puedo decir cómo me verán porque quizás no haya peleado pero nunca salí de la actividad y entrené como lo hice siempre. Me siento fuerte y en plenitud”, cuenta sobre su vuelta a dos años de haber evaluado su adiós. “Claro que lo pensé. Pasó por mi cabeza dejar de pelear pero hay tiempo y voy a aprovecharlo. Si las cosas no se dan, el próximo podría ser el último”. Y por último agradeció al acompañamiento familiar que le permitió vivir en el exterior, el intendente Néstor Di Pierro, Pablo Pires y demás colaboradores que a la distancia, siguieron cada instancia de su estadía en Norteamérica. Ahí dónde todos quieren llegar y él ya estuvo.#

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03 DIC 2014 - 21:23

Camina de nuevo las calles de la ciudad, siente el viento en la cara e inevitablemente, eso lo hace feliz. A Héctor David Saldivia parece, la lejanía, le ayudó a mirar su vida con otro sentido. Los miles de kilómetros que lo separaron de afectos y amigos le dieron al “Tigre” una clase de madurez. Y regresado de los Estados Unidos, ya se prepara para desempolvar el bucal y las botitas. El próximo 20 de diciembre reaparecerá en el “Socios Fundadores” combatiendo ante el bonaerense Juan José Dias, dejando atrás casi dos años de inactividad y seis meses en entrenamiento en las Ligas mayores del boxeo.

Sin barreras

“El idioma nunca fue una barrera porque estaba lleno de latinos”. La vida americana de Héctor Saldivia fue de aprendizaje; codearse con primeras figuras y guantear con estrellas como Shane Mosley y Paulie Malignaggi. Aunque el objetivo deportivo –el de pelear y reposicionarse- no se cumplió, el “Tigre” dejó de ser un desconocido o un excampeón argentino en retirada. “No pelear en este tiempo me complicó, allá pensaban que ya no boxeaba más. Rescato los contactos y haber entrenado en el máximo nivel”.

El 2015 será un año de definiciones. Pelear en Argentina, volver al ring y gestionar en territorio americano serán partes determinantes para su futuro deportivo. “Quiero darme la oportunidad y no quedarme en que pude y no me animé. Es como un desafío personal. Antes a los 30 te consideraban grande, ahora la mayoría de los campeones explotan a los 34 o 35”, dice Saldivia quien observa sin cambios al boxeo argentino. “Está siempre igual. Para hacer algo y buscar el dinero grande hay que ir a EEUU como hicieron Maidana, Matthysse, “Maravilla”, Cuellar o ahora Abregú”.

Reaparición

En su reaparición Saldivia cargará kilaje adicional ya que se instalará en 154 libras (superwelter), un peso más acorde a su evolución física y que dará en la balanza sin padecimientos. El “Tigre” tuvo dos contras en este proceso en el exterior: su falta de actividad en los últimos años y su renuncia a los títulos que poseía, circunstancias que lo excluyeron del gran negocio. Si embargo un par de peleas en Argentina podrían proyectarlo a una nueva oportunidad internacional a través de Sebastián Contursi, el periodista y asesor de Marcos “Chino” Maidana. Y eso llevaría a Saldivia nuevamente a USA; al campamento de Oxnard, California y quizás hasta el mismísimo Robert García.

“Le pido al público que me ayude en esta etapa. No puedo decir cómo me verán porque quizás no haya peleado pero nunca salí de la actividad y entrené como lo hice siempre. Me siento fuerte y en plenitud”, cuenta sobre su vuelta a dos años de haber evaluado su adiós. “Claro que lo pensé. Pasó por mi cabeza dejar de pelear pero hay tiempo y voy a aprovecharlo. Si las cosas no se dan, el próximo podría ser el último”. Y por último agradeció al acompañamiento familiar que le permitió vivir en el exterior, el intendente Néstor Di Pierro, Pablo Pires y demás colaboradores que a la distancia, siguieron cada instancia de su estadía en Norteamérica. Ahí dónde todos quieren llegar y él ya estuvo.#


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