Prisión para la esposa del ex alcalde de Iguala por los 43 desaparecidos
María de los Ángeles Pineda Villa, la esposa del ex alcalde de Iguala Jose Luis Abarca, fue enviada anoche a prisión por su presunta participación como autora intelectual, junto a su marido, en la desaparición de los 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa, ocurrida hace 100 días.
Pineda y su esposo, a quienes se vincula con la organización criminal Guerreros Unidos, fueron detenidos el 4 de noviembre pasado en un barrio popular de la ciudad de México, después de estar más de un mes prófugos.
Según las investigaciones, fue Abarca el que ordenó a policías municipales enfrentar a los estudiantes de la combativa escuela rural para maestros "Raúl Isidro Burgos", en Ayotzinapa, para evitar que sabotearan un acto de su esposa, quien se perfilaba como su sucesora en el gobierno de Iguala.
Los policías de Iguala primero los persiguieron y les dispararon con el resultado de seis muertos y 25 heridos. Luego se llevaron a 43 y, según testimonios de varios detenidos, los entregaron al cártel Guerreros Unidos que presuntamente los asesinó, según informó la agencia DPA.
No obstante esta hipótesis oficial, investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y de la Universidad Autónoma de México (UAM) investigan una segunda hipótesis que indica que los cuerpos de los estudiantes habrían sido cremados en hornos del Ejército.
Pineda y su esposo, a quienes se vincula con la organización criminal Guerreros Unidos, fueron detenidos el 4 de noviembre pasado en un barrio popular de la ciudad de México, después de estar más de un mes prófugos.
Según las investigaciones, fue Abarca el que ordenó a policías municipales enfrentar a los estudiantes de la combativa escuela rural para maestros "Raúl Isidro Burgos", en Ayotzinapa, para evitar que sabotearan un acto de su esposa, quien se perfilaba como su sucesora en el gobierno de Iguala.
Los policías de Iguala primero los persiguieron y les dispararon con el resultado de seis muertos y 25 heridos. Luego se llevaron a 43 y, según testimonios de varios detenidos, los entregaron al cártel Guerreros Unidos que presuntamente los asesinó, según informó la agencia DPA.
No obstante esta hipótesis oficial, investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y de la Universidad Autónoma de México (UAM) investigan una segunda hipótesis que indica que los cuerpos de los estudiantes habrían sido cremados en hornos del Ejército.