Netanyahu comienza una controvertida visita a EEUU

El primer ministro israelí viaja hoy a Estados Unidos donde "alertará" ante el Congreso sobre un posible acuerdo entre Occidente e Irán para que este país no tenga trabas para enriquecer uranio, en la visita a Washington más controvertida de su mandato.

01 MAR 2015 - 16:45 | Actualizado

Horas antes de partir para su estadía de dos días en EEUU, el jefe del estado israelí visitó el Muro de los Lamentos de Jerusalén, donde defendió la fortaleza de las relaciones bilaterales con el país del norte, oportunidad en que subrayó su posición respecto a las actuales negociaciones con Teherán.

Político al fin, Netanyahu señaló que "en la víspera de mi viaje (...) me gustaría aprovechar la oportunidad para decir que respeto al presidente de EEUU, Barack Obama", según un comunicado de su oficina de prensa.

"Creo en la relación entre Israel y EEUU y en su fortaleza para superar las diferencias de opinión, aquellas que han surgido y aquellas que surgirán", añadió.

En ese terreno, el primer ministro israelí reiteró que, como dirigente de su país, tiene la "obligación de velar por la seguridad de Israel".

Y para que no quedaran dudas sobre su punto de vista, puntualizó que "por ello nos oponemos firmemente al acuerdo que está siendo formulado con Irán y las potencias mundiales, que puede amenazar nuestra propia existencia".

Sobre el discurso que tiene previsto pronunciar mañana en el Capitolio, Netanyahu dijo que "a la luz de este peligro debemos unirnos y también explicar los peligros que se derivan de este acuerdo para Israel, para la región y el mundo".

En un episodio insólito, y que no tiene antecedentes, la invitación al mandatario israelí fue motorizada por el Partido Republicano sin previa coordinación con la Casa Blanca. De hecho, Obama se negó a recibirlo mientras permanezca en territorio estadounidense.

La movida de la oposición conservadora, que intenta jaquear en todos los frentes al mandatario de EEUU en el último tramo de su presidencia, provocó un terremoto en las relaciones entre ambos países, habituales aliados en la arena internacional.

Las autoridades de Washington entienden que el hecho provocó un distanciamiento por considerar que trata de torpedear los esfuerzos de Obama en la cuestión nuclear iraní, recordó la agencia de noticias EFE.

En la crítica más fuerte vertida hasta ahora por la Casa Blanca contra la invitación, la asesora de Seguridad Nacional estadounidense, Susan Rice, dijo que la iniciativa de los republicanos y la aceptación de Netanyahu "inyectaron un grado de partidismo" en una relación que debería estar por encima de la política.

"Es destructivo para el entramado de la relación", señaló Rice, citada por la agencia de noticias EFE.

Sus comentarios siguieron a las duras palabras del secretario de Estado, John Kerry, quien durante una audiencia bajo juramento ante el Congreso dijo que, en lo que toca a las negociaciones nucleares con Irán, el jefe de gobierno israelí "puede tener un juicio que simplemente puede no ser correcto".

Antes de su alocución en el Capitolio, Netanyahu se dirigirá a los delegados del Comité americano-israelí de actividades políticas, un grupo de gran influencia de la colectividad judía en Washington a favor de Israel.

La visita a EEUU se produce a poco más de dos semanas de que tengan lugar las elecciones generales en Israel, algo que es interpretado por dirigentes locales opositores como una oportunidad meramente electoralista por parte de Netanyahu.

01 MAR 2015 - 16:45

Horas antes de partir para su estadía de dos días en EEUU, el jefe del estado israelí visitó el Muro de los Lamentos de Jerusalén, donde defendió la fortaleza de las relaciones bilaterales con el país del norte, oportunidad en que subrayó su posición respecto a las actuales negociaciones con Teherán.

Político al fin, Netanyahu señaló que "en la víspera de mi viaje (...) me gustaría aprovechar la oportunidad para decir que respeto al presidente de EEUU, Barack Obama", según un comunicado de su oficina de prensa.

"Creo en la relación entre Israel y EEUU y en su fortaleza para superar las diferencias de opinión, aquellas que han surgido y aquellas que surgirán", añadió.

En ese terreno, el primer ministro israelí reiteró que, como dirigente de su país, tiene la "obligación de velar por la seguridad de Israel".

Y para que no quedaran dudas sobre su punto de vista, puntualizó que "por ello nos oponemos firmemente al acuerdo que está siendo formulado con Irán y las potencias mundiales, que puede amenazar nuestra propia existencia".

Sobre el discurso que tiene previsto pronunciar mañana en el Capitolio, Netanyahu dijo que "a la luz de este peligro debemos unirnos y también explicar los peligros que se derivan de este acuerdo para Israel, para la región y el mundo".

En un episodio insólito, y que no tiene antecedentes, la invitación al mandatario israelí fue motorizada por el Partido Republicano sin previa coordinación con la Casa Blanca. De hecho, Obama se negó a recibirlo mientras permanezca en territorio estadounidense.

La movida de la oposición conservadora, que intenta jaquear en todos los frentes al mandatario de EEUU en el último tramo de su presidencia, provocó un terremoto en las relaciones entre ambos países, habituales aliados en la arena internacional.

Las autoridades de Washington entienden que el hecho provocó un distanciamiento por considerar que trata de torpedear los esfuerzos de Obama en la cuestión nuclear iraní, recordó la agencia de noticias EFE.

En la crítica más fuerte vertida hasta ahora por la Casa Blanca contra la invitación, la asesora de Seguridad Nacional estadounidense, Susan Rice, dijo que la iniciativa de los republicanos y la aceptación de Netanyahu "inyectaron un grado de partidismo" en una relación que debería estar por encima de la política.

"Es destructivo para el entramado de la relación", señaló Rice, citada por la agencia de noticias EFE.

Sus comentarios siguieron a las duras palabras del secretario de Estado, John Kerry, quien durante una audiencia bajo juramento ante el Congreso dijo que, en lo que toca a las negociaciones nucleares con Irán, el jefe de gobierno israelí "puede tener un juicio que simplemente puede no ser correcto".

Antes de su alocución en el Capitolio, Netanyahu se dirigirá a los delegados del Comité americano-israelí de actividades políticas, un grupo de gran influencia de la colectividad judía en Washington a favor de Israel.

La visita a EEUU se produce a poco más de dos semanas de que tengan lugar las elecciones generales en Israel, algo que es interpretado por dirigentes locales opositores como una oportunidad meramente electoralista por parte de Netanyahu.


NOTICIAS RELACIONADAS