"No hay crisis en América Latina", dijo Familiar durante un encuentro con el embajador de la región en España y representantes del ámbito empresarial y docente organizado por la Secretaría General Iberoamericana (Segib), según un despacho de la agencia EFE.
El directivo del BM expuso las líneas generales de un informe sobre la "Prosperidad compartida y erradicación de la pobreza" en la región mediante las cuales precisó que durante una década Latinoamérica creció a un buen ritmo y ello redundó en una progresiva reducción de la pobreza, que entre 2003 y 2013 pasó del 41,3 al 24,3 por ciento.
Sin embargo, Familiar alertó que ahora todos los datos apuntan a que hay una ralentización del crecimiento y uno de los efectos es que está en riesgo de volver a la pobreza un amplio grupo de población vulnerable, en particular el segmento que vive con entre cuatro y diez dólares al día.
Según el BM, la pobreza en la región -los que viven con menos de cuatro dólares al día- pasó del 25,3 por ciento en 2012 al 24,3 por ciento en 2013; mientras que la pobreza extrema -vivir con menos de 2,5 dólares al día- pasó del 12,2 en 2012 al 11,5 por ciento en 2013.
Familiar manifestó que “la sociedad demanda ahora más y mejores servicios públicos”, así como “transparencia, rendición de cuentas y un mejor manejo de los recursos escasos”, a lo que agregó que en el actual contexto es preciso "gastar de manera más inteligente".
"Preocupa el círculo vicioso" que se genera cuando "los ciudadanos ven pocos y malos servicios públicos, como la educación, la seguridad... Quien no tiene dinero queda excluido del pacto social y su interés por pagar impuestos se dificulta", añadió.
Entre las carencias de Latinoamérica, destacó Familiar, está el déficit de infraestructura lo cual, unido a los menores recursos públicos, hace necesario atraer capital privado.
"No hay crisis en América Latina", dijo Familiar durante un encuentro con el embajador de la región en España y representantes del ámbito empresarial y docente organizado por la Secretaría General Iberoamericana (Segib), según un despacho de la agencia EFE.
El directivo del BM expuso las líneas generales de un informe sobre la "Prosperidad compartida y erradicación de la pobreza" en la región mediante las cuales precisó que durante una década Latinoamérica creció a un buen ritmo y ello redundó en una progresiva reducción de la pobreza, que entre 2003 y 2013 pasó del 41,3 al 24,3 por ciento.
Sin embargo, Familiar alertó que ahora todos los datos apuntan a que hay una ralentización del crecimiento y uno de los efectos es que está en riesgo de volver a la pobreza un amplio grupo de población vulnerable, en particular el segmento que vive con entre cuatro y diez dólares al día.
Según el BM, la pobreza en la región -los que viven con menos de cuatro dólares al día- pasó del 25,3 por ciento en 2012 al 24,3 por ciento en 2013; mientras que la pobreza extrema -vivir con menos de 2,5 dólares al día- pasó del 12,2 en 2012 al 11,5 por ciento en 2013.
Familiar manifestó que “la sociedad demanda ahora más y mejores servicios públicos”, así como “transparencia, rendición de cuentas y un mejor manejo de los recursos escasos”, a lo que agregó que en el actual contexto es preciso "gastar de manera más inteligente".
"Preocupa el círculo vicioso" que se genera cuando "los ciudadanos ven pocos y malos servicios públicos, como la educación, la seguridad... Quien no tiene dinero queda excluido del pacto social y su interés por pagar impuestos se dificulta", añadió.
Entre las carencias de Latinoamérica, destacó Familiar, está el déficit de infraestructura lo cual, unido a los menores recursos públicos, hace necesario atraer capital privado.