Francescoli afirmó que es "un resultado positivo"

El director deportivo de River destacó que el equipo de Gallardo regresó de México con "un resultado positivo" después empatar sin goles con Tigres en la primera final de la Copa Libertadores.

30 JUL 2015 - 15:31 | Actualizado

El dirigente de origen uruguayo, ganador de ese trofeo como futbolista de River en 1996, aclaró de todos modos que esa consideración cobrará sentido si el equipo "es capaz de hacer la diferencia el próximo miércoles como local, con todo el público a favor".

"Si hace cuatro días me decían que íbamos a empatar en Monterrey quedaba feliz. Traer ese resultado fue bueno, especialmente después de un viaje tan largo, con el calor que hubo que sufrir y ante uno de los mejores equipos de la Copa", entendió.

Para reforzar su idea, Francescoli evocó su experiencia como jugador en la final con América de Cali en 1996, que los "millonarios" también comenzaron de visitante.

"Cuando fuimos a Colombia estábamos convencidos que debíamos empatar y hasta perder por un gol, porque sabíamos que de local podíamos hacer la diferencia", recordó.

En cuanto al partido de anoche, el directivo aceptó que "ninguno de los dos equipos jugó bien" y lo atribuyó a las "cargas emotivas diferentes" que implican la disputa de una final.

"Es típico cuando hay otro partido, nadie quema las naves. Tigres quiso ganarlo en todo momento pero sin volverse loco y River lo controló sabiendo que tiene la revancha en casa", explicó en diálogo con TyC Sports.

Finalmente, el emblema "millonario", que no viajó a México por cábala, se mostró "muy pesimista" sobre la posibilidad de que los uruguayos Tabaré Viudez y Rodrigo Mora, ambos con lesiones musculares sufridas en México, puedan llegar al desquite del miércoles próximo, a las 22, en el Monumental.

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30 JUL 2015 - 15:31

El dirigente de origen uruguayo, ganador de ese trofeo como futbolista de River en 1996, aclaró de todos modos que esa consideración cobrará sentido si el equipo "es capaz de hacer la diferencia el próximo miércoles como local, con todo el público a favor".

"Si hace cuatro días me decían que íbamos a empatar en Monterrey quedaba feliz. Traer ese resultado fue bueno, especialmente después de un viaje tan largo, con el calor que hubo que sufrir y ante uno de los mejores equipos de la Copa", entendió.

Para reforzar su idea, Francescoli evocó su experiencia como jugador en la final con América de Cali en 1996, que los "millonarios" también comenzaron de visitante.

"Cuando fuimos a Colombia estábamos convencidos que debíamos empatar y hasta perder por un gol, porque sabíamos que de local podíamos hacer la diferencia", recordó.

En cuanto al partido de anoche, el directivo aceptó que "ninguno de los dos equipos jugó bien" y lo atribuyó a las "cargas emotivas diferentes" que implican la disputa de una final.

"Es típico cuando hay otro partido, nadie quema las naves. Tigres quiso ganarlo en todo momento pero sin volverse loco y River lo controló sabiendo que tiene la revancha en casa", explicó en diálogo con TyC Sports.

Finalmente, el emblema "millonario", que no viajó a México por cábala, se mostró "muy pesimista" sobre la posibilidad de que los uruguayos Tabaré Viudez y Rodrigo Mora, ambos con lesiones musculares sufridas en México, puedan llegar al desquite del miércoles próximo, a las 22, en el Monumental.


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