Olave salió junto a sus compañeros para disputar el segundo tiempo y cuando se disponía a ocupar su lugar en el arco vio cómo le arrojaron una hamburguesa desde la tribuna.
El capitán del equipo cordobés recogió la hamburguesa y los panes que la recubrían, se las llevó cerca de la boca y simuló comérsela en dos bocados. Luego, miró a los hinchas de Racing y con una sonrisa dejó la hamburguesa fuera del campo de juego.
La acción de Olave recordó a la del ex delantero de San Lorenzo Walter Perazzo quien en el Nacional 1984 engulló un pebete de jamón y queso que le tiraron los hinchas rivales en un encuentro ante Instituto de Córdoba. En aquella ocasión, Perazzo sí comió el sandwich que le sirvió para sobrellevar el partido porque no había merendado. Esa tarde, San Lorenzo ganó 4-1 con un gol del ex DT de Olimpo de Bahía Blanca.
Olave salió junto a sus compañeros para disputar el segundo tiempo y cuando se disponía a ocupar su lugar en el arco vio cómo le arrojaron una hamburguesa desde la tribuna.
El capitán del equipo cordobés recogió la hamburguesa y los panes que la recubrían, se las llevó cerca de la boca y simuló comérsela en dos bocados. Luego, miró a los hinchas de Racing y con una sonrisa dejó la hamburguesa fuera del campo de juego.
La acción de Olave recordó a la del ex delantero de San Lorenzo Walter Perazzo quien en el Nacional 1984 engulló un pebete de jamón y queso que le tiraron los hinchas rivales en un encuentro ante Instituto de Córdoba. En aquella ocasión, Perazzo sí comió el sandwich que le sirvió para sobrellevar el partido porque no había merendado. Esa tarde, San Lorenzo ganó 4-1 con un gol del ex DT de Olimpo de Bahía Blanca.