Crecen las chances de una cumbre entre Santos y Maduro
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, afirmó hoy que se ha dado "un paso importante" para poder reunirse finalmente con su colega de Venezuela, Nicolás Maduro, mientras esta noche parecía descartada la posibilidad de que la crisis de la relación entre Bogotá y Caracas sea analizada por los mandatarios de los 12 miembros de la Unasur.
"Hemos dado un paso importante para poder lograr esa reunión entre el presidente Maduro y este servidor", dijo Santos al visitar Paraguachón, un punto fronterizo entre el departamento colombiano La Guajira y el estado venezolano Zulia, cerrado hace una semana por Venezuela.
"Se ha venido avanzando" con la creación de un corredor humanitario para permitir que niños que viven a un lado de la frontera puedan asistir a la escuela del otro lado y "ya se comenzó a hacer la unificación de las familias que han sido separadas" por el cierre de los pasos limítrofes, explicó el mandatario colombiano.
Santos afirmó que "no se ha vuelto a maltratar" a colombianos deportados por Venezuela, lo cual es "también prioritario" porque si bien "cualquier país tiene derecho a deportar a un ciudadano de otro país si está en forma ilegal en su territorio, e incluso a cerrar su frontera, ningún país tiene derecho a maltratar a los ciudadanos" de otra nación ni "a violarle sus derechos o su dignidad".
No obstante, el mandatario advirtió que el eventual encuentro con Maduro "tiene que ser una reunión para tomar decisiones y encontrar soluciones", y remarcó: "Yo no quiero reunirme por la foto. Yo quiero reunirme para encontrar soluciones de forma civilizada, respetuosa".
En Paraguachón, además de conversar con ciudadanos y dirigentes locales, Santos estrechó la mano a varios efectivos de la Guardia Nacional (policía militar) venezolano, excepto a uno que le negó el saludo, informó la radio colombiana Caracol en su sitio web.
Esta noche, fuentes de la Casa de Nariño (sede del gobierno colombiano) citadas por los diarios bogotanos El Espectador y El Tiempo aseguraron que "no tuvo éxito" la idea de que los mandatarios de los países miembros de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) se reunieran para analizar la situación de la crisis colombo-venezolana porque "no hubo consenso" entre ellos.
Esa posibilidad había sido anunciada esta tarde por la canciller de Venezuela, Delcy Rodríguez.
"La presidencia pro témpore de la Unasur, que la tiene Uruguay, hizo circular una convocatoria a reunión de jefes de Estado de la Unasur este lunes, una solicitud promovida por la Argentina a quien le agradecemos y estamos aquí dispuestos a ir a esa reunión de la Unasur", dijo Rodríguez a periodistas al término de un acto protocolar en la cancillería venezolana.
"En cualquier ámbito estamos dispuestos a reunirnos, en el ámbito bilateral y regional; es muy importante que los mecanismos regionales que nos hemos dado nosotros mismos, nuestros pueblos, estén funcionando para crear las condiciones para este diálogo bilateral", agregó Rodríguez.
Sin embargo, la iniciativa no fue ratificada por ningún otro vocero oficial y las mismas fuentes diplomáticas consultadas por Télam que por la tarde confirmaron las gestiones para que se realizara, horas después las dieron por concluidas.
Por otra parte, Rodríguez volvió a negar que aviones militares venezolanos hayan invadido el espacio aéreo de Colombia, tal como denunció Bogotá.
"Hemos señalado con absoluta certeza que se trata de falsos supuestos y hemos hecho un llamado para que se presenten las pruebas; hay dos formas de demostrar esto y nosotros tenemos las pruebas, donde absolutamente está la certeza de que no hubo tal violación del espacio aéreo", sostuvo la canciller venezolana.
Colombia afirmó el domingo que dos aviones militares venezolanos incursionaron en su espacio aéreo dos veces cada uno en la tarde del sábado. Ayer aseguró que esos hechos están debidamente verificados por su sistema de defensa aérea y agregó que hubo una nueva invasión en la noche del domingo.
El gobierno de Venezuela negó en varias ocasiones la veracidad de esas denuncias que, según su ministro de Defensa, general Vladimir Padrino, forman parte de una "operación tenaza" para "cercar" al país "físicamente y bloquear sus alianzas".
En ese contexto, el Senado colombiano convocó a una sesión reservada al ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas, y los comandantes de las Fuerzas Militares, para que "se conozca la estrategia de Colombia en caso de cualquier eventualidad" con Venezuela, reveló el senador Mauricio Lizcano
"Queremos preguntarle al ministro en qué estado está nuestra capacidad de defensa, cuál es nuestra capacidad de disuasión militar y si estamos o no preparados frente a las amenazas que Venezuela permanentemente hace contra Colombia", explicó el legislador.
La relación entre Colombia y Venezuela está en entredicho desde el 19 de agosto pasado, cuando el segundo país cerró la frontera común y expulsó a cerca de 1.500 colombianos, mientras otros casi 20.000 regresaron voluntariamente a su país por temor a represalias, lo que, según Bogotá y organismos internacionales, causó una crisis humanitaria.
En ese contexto, las cancilleres Rodríguez y María Ángela Holguín se reunieron por segunda vez el sábado, en Quito, en procura de acordar un encuentro entre Santos y Maduro.
"Hemos dado un paso importante para poder lograr esa reunión entre el presidente Maduro y este servidor", dijo Santos al visitar Paraguachón, un punto fronterizo entre el departamento colombiano La Guajira y el estado venezolano Zulia, cerrado hace una semana por Venezuela.
"Se ha venido avanzando" con la creación de un corredor humanitario para permitir que niños que viven a un lado de la frontera puedan asistir a la escuela del otro lado y "ya se comenzó a hacer la unificación de las familias que han sido separadas" por el cierre de los pasos limítrofes, explicó el mandatario colombiano.
Santos afirmó que "no se ha vuelto a maltratar" a colombianos deportados por Venezuela, lo cual es "también prioritario" porque si bien "cualquier país tiene derecho a deportar a un ciudadano de otro país si está en forma ilegal en su territorio, e incluso a cerrar su frontera, ningún país tiene derecho a maltratar a los ciudadanos" de otra nación ni "a violarle sus derechos o su dignidad".
No obstante, el mandatario advirtió que el eventual encuentro con Maduro "tiene que ser una reunión para tomar decisiones y encontrar soluciones", y remarcó: "Yo no quiero reunirme por la foto. Yo quiero reunirme para encontrar soluciones de forma civilizada, respetuosa".
En Paraguachón, además de conversar con ciudadanos y dirigentes locales, Santos estrechó la mano a varios efectivos de la Guardia Nacional (policía militar) venezolano, excepto a uno que le negó el saludo, informó la radio colombiana Caracol en su sitio web.
Esta noche, fuentes de la Casa de Nariño (sede del gobierno colombiano) citadas por los diarios bogotanos El Espectador y El Tiempo aseguraron que "no tuvo éxito" la idea de que los mandatarios de los países miembros de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) se reunieran para analizar la situación de la crisis colombo-venezolana porque "no hubo consenso" entre ellos.
Esa posibilidad había sido anunciada esta tarde por la canciller de Venezuela, Delcy Rodríguez.
"La presidencia pro témpore de la Unasur, que la tiene Uruguay, hizo circular una convocatoria a reunión de jefes de Estado de la Unasur este lunes, una solicitud promovida por la Argentina a quien le agradecemos y estamos aquí dispuestos a ir a esa reunión de la Unasur", dijo Rodríguez a periodistas al término de un acto protocolar en la cancillería venezolana.
"En cualquier ámbito estamos dispuestos a reunirnos, en el ámbito bilateral y regional; es muy importante que los mecanismos regionales que nos hemos dado nosotros mismos, nuestros pueblos, estén funcionando para crear las condiciones para este diálogo bilateral", agregó Rodríguez.
Sin embargo, la iniciativa no fue ratificada por ningún otro vocero oficial y las mismas fuentes diplomáticas consultadas por Télam que por la tarde confirmaron las gestiones para que se realizara, horas después las dieron por concluidas.
Por otra parte, Rodríguez volvió a negar que aviones militares venezolanos hayan invadido el espacio aéreo de Colombia, tal como denunció Bogotá.
"Hemos señalado con absoluta certeza que se trata de falsos supuestos y hemos hecho un llamado para que se presenten las pruebas; hay dos formas de demostrar esto y nosotros tenemos las pruebas, donde absolutamente está la certeza de que no hubo tal violación del espacio aéreo", sostuvo la canciller venezolana.
Colombia afirmó el domingo que dos aviones militares venezolanos incursionaron en su espacio aéreo dos veces cada uno en la tarde del sábado. Ayer aseguró que esos hechos están debidamente verificados por su sistema de defensa aérea y agregó que hubo una nueva invasión en la noche del domingo.
El gobierno de Venezuela negó en varias ocasiones la veracidad de esas denuncias que, según su ministro de Defensa, general Vladimir Padrino, forman parte de una "operación tenaza" para "cercar" al país "físicamente y bloquear sus alianzas".
En ese contexto, el Senado colombiano convocó a una sesión reservada al ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas, y los comandantes de las Fuerzas Militares, para que "se conozca la estrategia de Colombia en caso de cualquier eventualidad" con Venezuela, reveló el senador Mauricio Lizcano
"Queremos preguntarle al ministro en qué estado está nuestra capacidad de defensa, cuál es nuestra capacidad de disuasión militar y si estamos o no preparados frente a las amenazas que Venezuela permanentemente hace contra Colombia", explicó el legislador.
La relación entre Colombia y Venezuela está en entredicho desde el 19 de agosto pasado, cuando el segundo país cerró la frontera común y expulsó a cerca de 1.500 colombianos, mientras otros casi 20.000 regresaron voluntariamente a su país por temor a represalias, lo que, según Bogotá y organismos internacionales, causó una crisis humanitaria.
En ese contexto, las cancilleres Rodríguez y María Ángela Holguín se reunieron por segunda vez el sábado, en Quito, en procura de acordar un encuentro entre Santos y Maduro.