Salida al mar para Bolivia: expectativa por decisión de La Haya

Bolivia y Chile esperan con gran expectativa el fallo de la Corte de La Haya de este jueves sobre la incompetencia de ese tribunal de la ONU que planteó Santiago, que busca fortalecer la unidad nacional con la oposición y asegura que cualquiera sea la decisión no entregará un metro de territorio, mientras La Paz espera con "optimismo" cualquiera de las tres opciones que a su juicio puede plantear el tribunal.

22 SEP 2015 - 17:13 | Actualizado

El vicepresidente boliviano, Alvaro García Linera, sostuvo hoy que "hemos trabajado las respuestas y en cada una habrá una posición firme de parte del gobierno".

Las tres opciones que puede plantear la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya según el gobierno boliviano, son las que anticipó a Télam la semana pasada la presidenta de la Cámara de Diputados, Gabriela Montaño en Buenos Aires: "que se declare competente", que es lo que espera con optimismo Bolivia; que acepte su "incompetencia", como planteó Chile, o que "postergue este tema" hasta abordar el reclamo de La Paz de recuperar su salida al mar, la cuestión de fondo.

García Linera reiteró hoy estas tres posibles respuestas de la CIJ, la primera que "rechace el pedido chileno y se declare competente para dirimir la causa marítima en un plazo de tres o cuatro años.

"La segunda opción le dice: es verdad Chile, yo no soy competente y ahí se acaba todo. La tercera opción, no te voy a responder Chile, te voy a responder al final del juicio, que postergue la decisión jurídica al momento de emitir el fallo final", detalló el vicepresidente.

En caso de que se declare competente, Chile deberá presentar su contra memoria a la memoria que Bolivia presentó en 2013 al iniciar su demanda.

García Linera agregó que Bolivia espera "muy optimista y serena" el fallo de la CIJ por la fortaleza de los argumentos jurídicos e históricos de la demanda marítima.

"Y por la propia historia del tribunal, que justamente fue formado para resolver en justicia, en paz y en diálogo este tipo de litigios que tienen recurrentemente las naciones del mundo", mencionó.

En Chile, la presidenta Michelle Bachelet tiene planificado reunirse mañana a la tarde con los ex mandatarios Eduardo Frei, Ricardo Lagos y Sebastián Piñera, tras el encuentro de ayer con los titulares de los partidos y los bloques legislativos para mostrar fuertes gestos de unidad nacional en espera del fallo del jueves de la CIJ.

"Aquí no hay gobierno y oposición, somos todos chilenos, y tenemos un acuerdo en lo que fue la certeza de haber presentado estas objeciones preliminares (la incompetencia)", dijo el canciller Heraldo Muñoz al término del encuentro con los titulares de los bloques parlamentarios.

Los asistentes agregaron que se acordó transmitir enfáticamente, antes y después del fallo, que independiente del resultado Chile no perderá soberanía territorial, e insistieron que la decisión de este jueves es recién el primer paso del diferendo.

En el oficialismo y la oposición existe un diagnóstico generalizado de la ofensiva que podría activar el presidente boliviano, Evo Morales, si es que La Haya rechaza la objeción presentada por Chile o si decide postergar esa determinación para el final del proceso.

Este último escenario es visto como el más probable, y obligaría a entrar a discutir el fondo de la demanda, justamente lo que Chile ha buscado evitar, comentó hoy el diario santiaguino La Tercera. Así, la idea es contrarrestar una eventual ofensiva comunicacional de Bolivia.

Por su parte, Morales declaró el lunes una vigilia en su país y ordenó hacer flamear la bandera de la reivindicación marítima hasta el jueves 24, cuando la CIJ pronuncie una resolución sobre la objeción preliminar de Chile.

"Hemos declarado una vigilia y convocamos a todas las instituciones del Estado, a todos, izar la bandera de reivindicación marítima", dijo el mandatario en un acto público en el municipio San José de Chiquitos del departamento de Santa Cruz, al este de Bolivia.

El anuncio de la CIJ, tribunal compuesto por 15 jueces, se programó para las 15 hora local de La Haya (10 de Argentina) de ese día, informó el agente boliviano Eduardo Rodríguez Veltzé.

Bolivia presentó en abril de 2013 una demanda para que la Corte Internacional de Justicia obligue a Chile a negociar de buena fe el pedido boliviano de una salida al mar que perdió en 1879 en la Guerra del Pacífico, que involucró también a Perú.

Chile planteó la objeción preliminar a la demanda boliviana en La Haya, basada en el Tratado de Paz y Amistad de 1904 firmado por los dos países, que definió las fronteras de ambos países, y en el artículo sexto del Pacto de Bogotá que excluye de la competencia de La Haya los diferendos o asuntos resueltos antes de 1948.

En cambio, Bolivia ha precisado una y otra vez que no cuestiona la vigencia del tratado de 1904, sino que pide, al margen de ese acuerdo, la competencia de la Corte para que ésta obligue a Chile a "negociar de buena fe" una salida soberana al océano Pacífico.

Según La Paz, lo anterior se sustenta en que Santiago se habría comprometido en varias oportunidades a negociar una salida al mar, lo que finalmente nunca se llevó a cabo.

Ambos países mantienen rotas sus relaciones diplomáticas a nivel de embajadores desde 1978 después del fracaso de las negociaciones para superar la mediterraneidad de Bolivia que llevaban adelante los dictadores Hugo Banzer en Bolivia y Augusto Pinochet en Chile.

22 SEP 2015 - 17:13

El vicepresidente boliviano, Alvaro García Linera, sostuvo hoy que "hemos trabajado las respuestas y en cada una habrá una posición firme de parte del gobierno".

Las tres opciones que puede plantear la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya según el gobierno boliviano, son las que anticipó a Télam la semana pasada la presidenta de la Cámara de Diputados, Gabriela Montaño en Buenos Aires: "que se declare competente", que es lo que espera con optimismo Bolivia; que acepte su "incompetencia", como planteó Chile, o que "postergue este tema" hasta abordar el reclamo de La Paz de recuperar su salida al mar, la cuestión de fondo.

García Linera reiteró hoy estas tres posibles respuestas de la CIJ, la primera que "rechace el pedido chileno y se declare competente para dirimir la causa marítima en un plazo de tres o cuatro años.

"La segunda opción le dice: es verdad Chile, yo no soy competente y ahí se acaba todo. La tercera opción, no te voy a responder Chile, te voy a responder al final del juicio, que postergue la decisión jurídica al momento de emitir el fallo final", detalló el vicepresidente.

En caso de que se declare competente, Chile deberá presentar su contra memoria a la memoria que Bolivia presentó en 2013 al iniciar su demanda.

García Linera agregó que Bolivia espera "muy optimista y serena" el fallo de la CIJ por la fortaleza de los argumentos jurídicos e históricos de la demanda marítima.

"Y por la propia historia del tribunal, que justamente fue formado para resolver en justicia, en paz y en diálogo este tipo de litigios que tienen recurrentemente las naciones del mundo", mencionó.

En Chile, la presidenta Michelle Bachelet tiene planificado reunirse mañana a la tarde con los ex mandatarios Eduardo Frei, Ricardo Lagos y Sebastián Piñera, tras el encuentro de ayer con los titulares de los partidos y los bloques legislativos para mostrar fuertes gestos de unidad nacional en espera del fallo del jueves de la CIJ.

"Aquí no hay gobierno y oposición, somos todos chilenos, y tenemos un acuerdo en lo que fue la certeza de haber presentado estas objeciones preliminares (la incompetencia)", dijo el canciller Heraldo Muñoz al término del encuentro con los titulares de los bloques parlamentarios.

Los asistentes agregaron que se acordó transmitir enfáticamente, antes y después del fallo, que independiente del resultado Chile no perderá soberanía territorial, e insistieron que la decisión de este jueves es recién el primer paso del diferendo.

En el oficialismo y la oposición existe un diagnóstico generalizado de la ofensiva que podría activar el presidente boliviano, Evo Morales, si es que La Haya rechaza la objeción presentada por Chile o si decide postergar esa determinación para el final del proceso.

Este último escenario es visto como el más probable, y obligaría a entrar a discutir el fondo de la demanda, justamente lo que Chile ha buscado evitar, comentó hoy el diario santiaguino La Tercera. Así, la idea es contrarrestar una eventual ofensiva comunicacional de Bolivia.

Por su parte, Morales declaró el lunes una vigilia en su país y ordenó hacer flamear la bandera de la reivindicación marítima hasta el jueves 24, cuando la CIJ pronuncie una resolución sobre la objeción preliminar de Chile.

"Hemos declarado una vigilia y convocamos a todas las instituciones del Estado, a todos, izar la bandera de reivindicación marítima", dijo el mandatario en un acto público en el municipio San José de Chiquitos del departamento de Santa Cruz, al este de Bolivia.

El anuncio de la CIJ, tribunal compuesto por 15 jueces, se programó para las 15 hora local de La Haya (10 de Argentina) de ese día, informó el agente boliviano Eduardo Rodríguez Veltzé.

Bolivia presentó en abril de 2013 una demanda para que la Corte Internacional de Justicia obligue a Chile a negociar de buena fe el pedido boliviano de una salida al mar que perdió en 1879 en la Guerra del Pacífico, que involucró también a Perú.

Chile planteó la objeción preliminar a la demanda boliviana en La Haya, basada en el Tratado de Paz y Amistad de 1904 firmado por los dos países, que definió las fronteras de ambos países, y en el artículo sexto del Pacto de Bogotá que excluye de la competencia de La Haya los diferendos o asuntos resueltos antes de 1948.

En cambio, Bolivia ha precisado una y otra vez que no cuestiona la vigencia del tratado de 1904, sino que pide, al margen de ese acuerdo, la competencia de la Corte para que ésta obligue a Chile a "negociar de buena fe" una salida soberana al océano Pacífico.

Según La Paz, lo anterior se sustenta en que Santiago se habría comprometido en varias oportunidades a negociar una salida al mar, lo que finalmente nunca se llevó a cabo.

Ambos países mantienen rotas sus relaciones diplomáticas a nivel de embajadores desde 1978 después del fracaso de las negociaciones para superar la mediterraneidad de Bolivia que llevaban adelante los dictadores Hugo Banzer en Bolivia y Augusto Pinochet en Chile.


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