Tras los secuestros de productos electrónicos de alta gama en el aeropuerto internacional de Ezeiza y de las fiscalizaciones a las empresas de courier (mensajería), la AFIP comenzó a monitorear de manera permanente a empresas de transporte y de encomiendas del norte del país que despachaban “puerta a puerta” mercadería a clientes de la Ciudad de Buenos Aires y de la zona norte de la provincia, "pero utilizando nombres falsos de destinatarios".
Luego del cruce sistémico y de la alerta generada por el incremento del volumen de operaciones de la empresa de transporte, logró incautarse, luego de un control documental y físico, dos millones de toneladas de mercadería ilegal que era transportada en un camión a la altura de la ciudad bonaerense de Campana, cuando iba camino a Buenos Aires.
Entre los productos secuestrados se encontraban celulares de última generación, dispositivos de cobro electrónico, notebooks, tablets, “mezcladoras” de música digital, consolas de audio, lentes y cámaras de fotos, videojuegos, memorias y hasta repuestos de automóviles.
Dicha mercadería fue comprada en Miami (Estados Unidos) y enviada vía aérea a la ciudad de Asunción y/o Ciudad del Este (Paraguay) y vía fluvial a Iquique (Chile) y fue ingresada a territorio argentino por pasos no habilitados del norte del país, informó la AFIP en un comunicado.
Tras los secuestros de productos electrónicos de alta gama en el aeropuerto internacional de Ezeiza y de las fiscalizaciones a las empresas de courier (mensajería), la AFIP comenzó a monitorear de manera permanente a empresas de transporte y de encomiendas del norte del país que despachaban “puerta a puerta” mercadería a clientes de la Ciudad de Buenos Aires y de la zona norte de la provincia, "pero utilizando nombres falsos de destinatarios".
Luego del cruce sistémico y de la alerta generada por el incremento del volumen de operaciones de la empresa de transporte, logró incautarse, luego de un control documental y físico, dos millones de toneladas de mercadería ilegal que era transportada en un camión a la altura de la ciudad bonaerense de Campana, cuando iba camino a Buenos Aires.
Entre los productos secuestrados se encontraban celulares de última generación, dispositivos de cobro electrónico, notebooks, tablets, “mezcladoras” de música digital, consolas de audio, lentes y cámaras de fotos, videojuegos, memorias y hasta repuestos de automóviles.
Dicha mercadería fue comprada en Miami (Estados Unidos) y enviada vía aérea a la ciudad de Asunción y/o Ciudad del Este (Paraguay) y vía fluvial a Iquique (Chile) y fue ingresada a territorio argentino por pasos no habilitados del norte del país, informó la AFIP en un comunicado.