El ministro de Finanzas, Michel Sapin, dio su aprobación para incluir la modificación en los presupuestos de 2016, aunque el Gobierno socialista se había mostrado inicialmente en contra.
"Tendrá que repercutir sobre los precios" a la baja, advirtió el funcionario en declaraciones que reprodujo la agencia EFE.
El primer ministro francés, Manuel Valls, había señalado poco antes en una entrevista en la emisora "France Intern", que el Gobierno no se opondría a esa rebaja impositiva al considerar que era de "sentido común".
Se estima que la reducción -que reclamaban las asociaciones feministas y que ya se aplica en países como España, Estados Unidos, Holanda o el Reino Unido- tendrá un costo de 55 millones de euros anuales para las arcas públicas.
El ministro de Finanzas, Michel Sapin, dio su aprobación para incluir la modificación en los presupuestos de 2016, aunque el Gobierno socialista se había mostrado inicialmente en contra.
"Tendrá que repercutir sobre los precios" a la baja, advirtió el funcionario en declaraciones que reprodujo la agencia EFE.
El primer ministro francés, Manuel Valls, había señalado poco antes en una entrevista en la emisora "France Intern", que el Gobierno no se opondría a esa rebaja impositiva al considerar que era de "sentido común".
Se estima que la reducción -que reclamaban las asociaciones feministas y que ya se aplica en países como España, Estados Unidos, Holanda o el Reino Unido- tendrá un costo de 55 millones de euros anuales para las arcas públicas.