Nuevo intento en España para formar gobierno

El rey Felipe VI retomó hoy la segunda ronda de contactos con los líderes de Podemos (izquierda) y Ciudadanos (liberales) para proponer a un presidente para el gobierno de España con el líder socialista, Pedro Sánchez, como única opción para evitar nuevas elecciones, después de que los conservadores del Partido Popular (PP) adelantaran que Mariano Rajoy reclinará una eventual segunda oferta.

01 FEB 2016 - 12:13 | Actualizado

Antes de que el monarca tome una decisión, el PP ya afirmó que Rajoy volverá a rechazar la oferta de formar gobierno mientras Sánchez dijo que él está dispuesto a aceptar el encargo, aunque, según trascendió de fuentes socialistas, pediría no tener que someterse a una votación si antes no logra un margen de tiempo para negociar un acuerdo que le permita acceder al poder.

El presidente en funciones y líder del PP cerrará mañana las consultas sin haber sumado nuevos apoyos en los nueve días que transcurrieron desde que rechazó la primera oferta del rey, en una decisión inédita que sumió a España en un bloqueo político.

"Por coherencia el resultado será el mismo y se declinará someterse a la investidura", aseguró hoy el vicesecretario general de Organización del PP, Fernández Martínez Maillo, anticipando cuál será la respuesta de Rajoy al rey ante una nueva propuesta.

"En ningún momento hemos renunciado a la presidencia y a formar gobierno y seguimos trabajando para la estabilidad. Otra cosa es que hoy mismo no tengamos la fuerza parlamentaria para hacerlo", insistió Martínez Maillo en declaraciones radiales, reiterando la oferta de los conservadores de una gran coalición con los socialistas y liberales de Ciudadanos, que Sánchez rechaza.

Si Rajoy, como sostiene el PP, vuelve a declinar la propuesta del rey, todo apunta a que Sánchez, líder de la segunda fuerza política, será el siguiente al que se le encargue la difícil misión de formar gobierno.

El propio secretario General del PSOE (Partido Socialista), quien verá al rey antes que Rajoy, reiteró el sábado pasado que está dispuesto a buscar los apoyos para lograr conformar un gobierno progresista alternativo tras reiterar su rechazo tanto a gobernar en coalición con los conservadores o a permitir un Ejecutivo del PP.

La decisión de Felipe VI podría llegar inmediatamente después del encuentro con el líder conservador.

Sin embargo, ante un escenario político respecto al cual no existen precedentes, se especula también con la posibilidad de que el rey finalmente no anuncie ningún candidato y dé un margen de tiempo concreto a las dos fuerzas políticas mayoritarias, PP y PSOE, para abrir negociaciones antes de presentar una propuesta de gobierno que coseche apoyos suficientes.

"Le he transmitido al rey que Ciudadanos quiere poner en marcha negociaciones a dos bandas, con el PP y el PSOE, que son los que pueden presentar candidato", dijo Albert Rivera, líder de los liberales, tras reunirse con Felipe VI.

"Nada nos asegura que pueda haber gobierno, pero el vacío que se ha producido no puede continuar. España tiene que saber que estamos trabajando para poner en marcha un gobierno y reformas", subrayó Rivera en conferencia de prensa.

El dirigente liberal, quien está dispuesto a abstenerse para que gobierne Sánchez, tras reiterar su veto a Rajoy porque "no puede abanderar la lucha contra la corrupción" después de los últimos escándalos que estallaron en su partido, dijo que quiere negociar sobre temas concretos para obtener una "hoja de ruta en común" que permita poner en marcha la legislatura y un "gobierno de transición".

"El PP tiene que decidir si se sube a la segunda transición, si quiere cambiar el rumbo o si quiere seguir en al misma posición", remarcó Rivera, quien también quiere dialogar con Podemos pese a que rechaza dar su apoyo a un gobierno de coalición entre éstos y el PSOE como propuso el líder de la fuerza de la izquierda radical, Pablo Iglesias.

Sánchez sigue aspirando a lograr el respaldo tanto de Podemos como de Ciudadanos para evitar tener que apoyarse también en los independentistas catalanes, en plena escalada del desafío secesionista de Cataluña.

Por el momento esta es una opción que resulta imposible.

El líder de Podemos, Pablo Iglesias, lo dejó claro apenas unas horas antes de reunirse con Felipe VI en el Palacio de la Zarzuela al afirmar que si Sánchez busca un pacto con Ciudadanos su partido no entraría en el Ejecutivo ni le permitiría gobernar con una abstención.

"Ni por activa ni por pasiva", sostuvo Iglesias, al tiempo que instó a Sánchez a decidir si "acepta un gobierno de las derechas o nuestra oferta" de coalición, en la que también está incluido el partido Izquierda Unida (IU).

En la misma línea se manifestó su aliado en Cataluña, el vocero de En Comú Podem, Xavier Domenech, quien inauguró la recta final de los contactos del monarca.

"Nos declaramos incompatibles" con un gobierno del PSOE y Ciudadanos, señaló el dirigente de izquierda en conferencia de prensa, quien tampoco ve posible una abstención para facilitar ese gobierno.

"Difícilmente podamos coincidir con Ciudadanos en el programa económico y social, sin hablar de lo territorial", indicó Domenech, en referencia a la negativa de los liberales a permitir que Cataluña celebre un referéndum secesionista, un reclamo que los socios de Podemos mantienen sobre la mesa como condición para un acuerdo con los socialistas.

"Nosotros vamos a ayudar a Pedro Sánchez a que trate de superar los obstáculos que le están poniendo", apuntó por su parte Iglesias, en referencia a las fuertes reticencias internas en el PSOE a que su líder negocie un acuerdo de gobierno con Podemos.

01 FEB 2016 - 12:13

Antes de que el monarca tome una decisión, el PP ya afirmó que Rajoy volverá a rechazar la oferta de formar gobierno mientras Sánchez dijo que él está dispuesto a aceptar el encargo, aunque, según trascendió de fuentes socialistas, pediría no tener que someterse a una votación si antes no logra un margen de tiempo para negociar un acuerdo que le permita acceder al poder.

El presidente en funciones y líder del PP cerrará mañana las consultas sin haber sumado nuevos apoyos en los nueve días que transcurrieron desde que rechazó la primera oferta del rey, en una decisión inédita que sumió a España en un bloqueo político.

"Por coherencia el resultado será el mismo y se declinará someterse a la investidura", aseguró hoy el vicesecretario general de Organización del PP, Fernández Martínez Maillo, anticipando cuál será la respuesta de Rajoy al rey ante una nueva propuesta.

"En ningún momento hemos renunciado a la presidencia y a formar gobierno y seguimos trabajando para la estabilidad. Otra cosa es que hoy mismo no tengamos la fuerza parlamentaria para hacerlo", insistió Martínez Maillo en declaraciones radiales, reiterando la oferta de los conservadores de una gran coalición con los socialistas y liberales de Ciudadanos, que Sánchez rechaza.

Si Rajoy, como sostiene el PP, vuelve a declinar la propuesta del rey, todo apunta a que Sánchez, líder de la segunda fuerza política, será el siguiente al que se le encargue la difícil misión de formar gobierno.

El propio secretario General del PSOE (Partido Socialista), quien verá al rey antes que Rajoy, reiteró el sábado pasado que está dispuesto a buscar los apoyos para lograr conformar un gobierno progresista alternativo tras reiterar su rechazo tanto a gobernar en coalición con los conservadores o a permitir un Ejecutivo del PP.

La decisión de Felipe VI podría llegar inmediatamente después del encuentro con el líder conservador.

Sin embargo, ante un escenario político respecto al cual no existen precedentes, se especula también con la posibilidad de que el rey finalmente no anuncie ningún candidato y dé un margen de tiempo concreto a las dos fuerzas políticas mayoritarias, PP y PSOE, para abrir negociaciones antes de presentar una propuesta de gobierno que coseche apoyos suficientes.

"Le he transmitido al rey que Ciudadanos quiere poner en marcha negociaciones a dos bandas, con el PP y el PSOE, que son los que pueden presentar candidato", dijo Albert Rivera, líder de los liberales, tras reunirse con Felipe VI.

"Nada nos asegura que pueda haber gobierno, pero el vacío que se ha producido no puede continuar. España tiene que saber que estamos trabajando para poner en marcha un gobierno y reformas", subrayó Rivera en conferencia de prensa.

El dirigente liberal, quien está dispuesto a abstenerse para que gobierne Sánchez, tras reiterar su veto a Rajoy porque "no puede abanderar la lucha contra la corrupción" después de los últimos escándalos que estallaron en su partido, dijo que quiere negociar sobre temas concretos para obtener una "hoja de ruta en común" que permita poner en marcha la legislatura y un "gobierno de transición".

"El PP tiene que decidir si se sube a la segunda transición, si quiere cambiar el rumbo o si quiere seguir en al misma posición", remarcó Rivera, quien también quiere dialogar con Podemos pese a que rechaza dar su apoyo a un gobierno de coalición entre éstos y el PSOE como propuso el líder de la fuerza de la izquierda radical, Pablo Iglesias.

Sánchez sigue aspirando a lograr el respaldo tanto de Podemos como de Ciudadanos para evitar tener que apoyarse también en los independentistas catalanes, en plena escalada del desafío secesionista de Cataluña.

Por el momento esta es una opción que resulta imposible.

El líder de Podemos, Pablo Iglesias, lo dejó claro apenas unas horas antes de reunirse con Felipe VI en el Palacio de la Zarzuela al afirmar que si Sánchez busca un pacto con Ciudadanos su partido no entraría en el Ejecutivo ni le permitiría gobernar con una abstención.

"Ni por activa ni por pasiva", sostuvo Iglesias, al tiempo que instó a Sánchez a decidir si "acepta un gobierno de las derechas o nuestra oferta" de coalición, en la que también está incluido el partido Izquierda Unida (IU).

En la misma línea se manifestó su aliado en Cataluña, el vocero de En Comú Podem, Xavier Domenech, quien inauguró la recta final de los contactos del monarca.

"Nos declaramos incompatibles" con un gobierno del PSOE y Ciudadanos, señaló el dirigente de izquierda en conferencia de prensa, quien tampoco ve posible una abstención para facilitar ese gobierno.

"Difícilmente podamos coincidir con Ciudadanos en el programa económico y social, sin hablar de lo territorial", indicó Domenech, en referencia a la negativa de los liberales a permitir que Cataluña celebre un referéndum secesionista, un reclamo que los socios de Podemos mantienen sobre la mesa como condición para un acuerdo con los socialistas.

"Nosotros vamos a ayudar a Pedro Sánchez a que trate de superar los obstáculos que le están poniendo", apuntó por su parte Iglesias, en referencia a las fuertes reticencias internas en el PSOE a que su líder negocie un acuerdo de gobierno con Podemos.


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