El colombiano fue contundente al analizar al equipo de Lionel Messi, "un espectáculo en sí mismo que el día que se enchufa no hay cómo contenerlo", de cara al partido de mañana en el Soldier Field de Chicago, por la segunda fecha del Grupo D de la Copa América Centenario.
"De todas formas que vuelva a jugar justo contra nosotros no nos cambia los planes, porque Argentina es el mejor equipo del mundo y habrá que estar muy concentrados y pelear para que no nos someta. Pero es un partido para hacer historia", evaluó.
"A este encuentro hay que entrar con todo, porque si uno ingresa tímido, como un pobre a la casa de un rico, no habrá nada que hacer. Por eso a mis futbolistas no tengo que decirles nada, aunque eso sí, para jugar con Argentina hay que jugar, porque no sirve solamente defenderse", advirtió.
Fue entonces cuando el 'Bolillo' le apuntó a los comienzos de su carrera como entrenador ante la consulta de Télam respecto de lo que había incorporado junto a Francisco 'Pacho' Maturana (fue su ayudante de campo en la Selección Colombia) principios de los '90 y lo que fue dejando en el camino con el paso del tiempo.
"No tuve que dejar nada por el camino en todos estos años, porque el fútbol sigue siendo el mismo de siempre, y lo único que cambió fue la urgencia para desarrollar algunas instancias de juego. Pero ahora lo que pasa es que se modificó la dialéctica y entonces apareció la presión alta para nombrar la marca en la salida, o el contraataque cuando en realidad eso es juego de medio campo. Por eso cuando me preguntan que hay de nuevo en el fútbol digo la pared, porque esa es la que vale, lo mismo que el cambio de frente", puntualizó.
"Por eso para mi el mejor equipo de la historia seguirá siendo la selección de Holanda de 1974, que era el fútbol total, y de estos días los que más me gustan son Bayern Munich, Barcelona, el seleccionado argentino y el de mi país, Colombia, de José Pekerman", destacó.
Los caminos condujeron durante la charla hacia un presumible juego fuerte de Panamá que el técnico se encargó enfáticamente de desmentir al invertir la carga y señalar que "en el partido inaugural que se le ganó a Bolivia sí hubo violencia. Pero esa violencia la ejercieron ellos, porque nunca vi un equipo que pegara tanto como el que enfrentamos nosotros el otro día".
"Después, el fútbol sudamericano marca diferencias con el centroamericano, pero no tantas como ese 7 a 1 que sufrió Haití frente a Brasil. De ninguna manera esa es la realidad", argumentó.
"Por eso el partido de mañana con Argentina será para vivirlo, aunque yo estoy bastante mal de salud, tengo una fuerte laringitis y no voy a estar hablando con mis jugadores. Pero como ya dije, una vez que salgan a la cancha ya no habrá más nada que decirles; solamente jueguen muchachos, que para eso es este encuentro", concluyó un 'Bolillo' que egresó de la escuela Maturana y se apropió de su ideología futbolistica.
El colombiano fue contundente al analizar al equipo de Lionel Messi, "un espectáculo en sí mismo que el día que se enchufa no hay cómo contenerlo", de cara al partido de mañana en el Soldier Field de Chicago, por la segunda fecha del Grupo D de la Copa América Centenario.
"De todas formas que vuelva a jugar justo contra nosotros no nos cambia los planes, porque Argentina es el mejor equipo del mundo y habrá que estar muy concentrados y pelear para que no nos someta. Pero es un partido para hacer historia", evaluó.
"A este encuentro hay que entrar con todo, porque si uno ingresa tímido, como un pobre a la casa de un rico, no habrá nada que hacer. Por eso a mis futbolistas no tengo que decirles nada, aunque eso sí, para jugar con Argentina hay que jugar, porque no sirve solamente defenderse", advirtió.
Fue entonces cuando el 'Bolillo' le apuntó a los comienzos de su carrera como entrenador ante la consulta de Télam respecto de lo que había incorporado junto a Francisco 'Pacho' Maturana (fue su ayudante de campo en la Selección Colombia) principios de los '90 y lo que fue dejando en el camino con el paso del tiempo.
"No tuve que dejar nada por el camino en todos estos años, porque el fútbol sigue siendo el mismo de siempre, y lo único que cambió fue la urgencia para desarrollar algunas instancias de juego. Pero ahora lo que pasa es que se modificó la dialéctica y entonces apareció la presión alta para nombrar la marca en la salida, o el contraataque cuando en realidad eso es juego de medio campo. Por eso cuando me preguntan que hay de nuevo en el fútbol digo la pared, porque esa es la que vale, lo mismo que el cambio de frente", puntualizó.
"Por eso para mi el mejor equipo de la historia seguirá siendo la selección de Holanda de 1974, que era el fútbol total, y de estos días los que más me gustan son Bayern Munich, Barcelona, el seleccionado argentino y el de mi país, Colombia, de José Pekerman", destacó.
Los caminos condujeron durante la charla hacia un presumible juego fuerte de Panamá que el técnico se encargó enfáticamente de desmentir al invertir la carga y señalar que "en el partido inaugural que se le ganó a Bolivia sí hubo violencia. Pero esa violencia la ejercieron ellos, porque nunca vi un equipo que pegara tanto como el que enfrentamos nosotros el otro día".
"Después, el fútbol sudamericano marca diferencias con el centroamericano, pero no tantas como ese 7 a 1 que sufrió Haití frente a Brasil. De ninguna manera esa es la realidad", argumentó.
"Por eso el partido de mañana con Argentina será para vivirlo, aunque yo estoy bastante mal de salud, tengo una fuerte laringitis y no voy a estar hablando con mis jugadores. Pero como ya dije, una vez que salgan a la cancha ya no habrá más nada que decirles; solamente jueguen muchachos, que para eso es este encuentro", concluyó un 'Bolillo' que egresó de la escuela Maturana y se apropió de su ideología futbolistica.