En la madrugada de ayer, personal policial de la Comisaría Primera detuvo a cuatro personas, entre ellas mujeres, que causaban disturbios en las afueras de un céntrico boliche de Trelew.
Anoche, la jueza Mirta Moreno los dejó en libertad, luego de que el fiscal Arnaldo Maza lo pidiera. “No voy a pedir ninguna medida de coerción”. La defensora Carolina Marín no se opuso. Según consignaron desde dicha comisaría, un grupo de personas arribó a la puerta de un local bailable del pasaje Tucumán, pero debido a la negativa del personal de seguridad privada de dicho comercio, que impedían el ingreso de esas personas, éstas comenzaron a generar empujones y una situación violenta. La Policía, en un muy reducido número, quiso apaciguar la situación. Debieron intervenir refuerzos.
Eso fue porque poco después llegó otro grupo que comenzó a confrontar con los iracundos. Allí se generó una batahola que dejó como saldo a un efectivo policial lesionado.
Cuatro detenidos fueron trasladados a la Comisaría, entre ellos una mujer, que también fue reducida y llevada al sector femenino de contraventores.
Según graficaron tras la intervención, ambos grupos que peleaban, se unieron luego para ir contra los servidores del orden público. El delito es el de atentado, resistencia y lesiones a la autoridad.
En la madrugada de ayer, personal policial de la Comisaría Primera detuvo a cuatro personas, entre ellas mujeres, que causaban disturbios en las afueras de un céntrico boliche de Trelew.
Anoche, la jueza Mirta Moreno los dejó en libertad, luego de que el fiscal Arnaldo Maza lo pidiera. “No voy a pedir ninguna medida de coerción”. La defensora Carolina Marín no se opuso. Según consignaron desde dicha comisaría, un grupo de personas arribó a la puerta de un local bailable del pasaje Tucumán, pero debido a la negativa del personal de seguridad privada de dicho comercio, que impedían el ingreso de esas personas, éstas comenzaron a generar empujones y una situación violenta. La Policía, en un muy reducido número, quiso apaciguar la situación. Debieron intervenir refuerzos.
Eso fue porque poco después llegó otro grupo que comenzó a confrontar con los iracundos. Allí se generó una batahola que dejó como saldo a un efectivo policial lesionado.
Cuatro detenidos fueron trasladados a la Comisaría, entre ellos una mujer, que también fue reducida y llevada al sector femenino de contraventores.
Según graficaron tras la intervención, ambos grupos que peleaban, se unieron luego para ir contra los servidores del orden público. El delito es el de atentado, resistencia y lesiones a la autoridad.