Gastre: denuncias por violencia policial

Una abogada dijo que se podrían recolectar las quejas de todos los vecinos.

Gabriel Cayupán junto a su esposa Noermí Farfán y la abogada Sánchez.
23 OCT 2016 - 21:27 | Actualizado

El 30 de septiembre, en Gastre, el viceintendente Paulo Cáceres y su amigo Gabriel Omar Cayumán fueron detenidos por personal policial y denunciaron haber sido salvajemente golpeados por ellos. Pero el caso no terminó ahí. Ahora, la abogada Ana Sánchez reveló que hay “un montón de casos iguales”. Dijo que los mismos dos policías sindicados por Cáceres y Cayumán “tienen a todo el pueblo atemorizado. Es comparable a la Ley de Far West”. Por ese motivo, irá por una imputación colectiva en donde se incluirán las denuncias particulares. Por su parte, Cayumán reclamó justicia debido a que aún no se recuperó de las lesiones.

“Como es vox populi, la causa inicia caratulada contra Omar Cayupán y Paulo Cáceres por el delito de resistencia de autoridad. Son detenidos durante dos días. Se realiza la audiencia de control. Es obligación hacerla. Le toman la declaración a Omar y Paulo. Surge que en realidad, la versión de los hechos había sido trastocada por la Policía y sucedió lo contrario” recordó Ana Sánchez.

Detalles

Por el hecho intervinieron el procurador general Jorge Miquelarena y el jefe de Policía, Juan Ale. Se ordenó el traslado y pase a disponibilidad de al menos dos uniformados. Pero no quedó ahí. La letrada aseguró que “los dos policías que les pegaron a Omar y Paulo están por ser imputados. No fue aún elevada pero hay pruebas contundentes para realizar una imputación colectiva. Es lo interesante del caso. No se van a tomar sólo las denuncias de ellos dos sino la de todas las personas que tienen denuncias particulares”.

Será una causa compleja. “La figura legal que ha sido caratulada (provisoria) es la de vejaciones. Hubo más de un delito. Habría que ir por el delito de lesiones graves por Omar Cayupan; agravado por funcionario policial”, agregó.

Sánchez aseguró que “son dos personas que tienen atemorizados a todo el pueblo. Es comparable a la ley del Far West. Cuando uno lee la historia de Chubut de cómo eran los policías fronterizos de la época, que estaban en los pueblos, encargados de controlar el orden y cometían abusos, una suerte de reflejo es la actualidad del pueblo” dijo.

Criticó “esta cuestión de la Policía de pasar a disponibilidad a personas que tienen comportamientos erróneos. Los que terminan siendo castigados son los pobladores que tienen que vivir bajo el temor de lo que pase”.

“La idea es que una sola causa se pueda tratar todo. Este caso, destapó todo. Tiene que pasar algo extremo para que se descubra todo lo otro. Había un menor acosado constantemente. No podía salir a la calle”.

La abogada señaló también que “además de lo fehaciente que tenemos, está el examen médico forense de Omar y los testigos que estuvieron en todo momento, tanto personal de seguridad como de salud. Ellos fueron individualizados en varios hospitales, historias clínicas y el relato de las víctimas es coincidente. Tengo el expediente. Coinciden los dos”, apuntó.

Se refirió a las expectativas legales con la causa. “Primero, que se caratule como concurso real de delitos. Son varios hechos. Trajeron varias consecuencias. Que realmente queden exonerados de la fuerza pública. La población está cansada de esos atropellos. Se arman sumarios internos. Se los pasa a disponibilidad. No prescinden del sueldo o se los va removiendo pero van a seguir siendo violentos. No hay un mensaje a la sociedad”, manifestó.

Agregó: “Tenemos toda la gente que conoce a Omar. En la Comisaría los torturaron también. Desde gas pimienta. Cosas de la época de la dictadura. Cosas graves. Además de eso, hay desprestigio. Salieron a dar su versión de los hechos en los medios. Paulo Cáceres tiene una función dentro de la política. Dijeron que estaba borracho. Todos atestiguaron que es una persona de bien que está en su casa. Fue desprestigiado”.

Para finalizar, relató: “Cuando hacían una denuncia iban a la Comisaría y caés en manos de los mismos que te golpean, es una ironía”.

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Gabriel Cayupán junto a su esposa Noermí Farfán y la abogada Sánchez.
23 OCT 2016 - 21:27

El 30 de septiembre, en Gastre, el viceintendente Paulo Cáceres y su amigo Gabriel Omar Cayumán fueron detenidos por personal policial y denunciaron haber sido salvajemente golpeados por ellos. Pero el caso no terminó ahí. Ahora, la abogada Ana Sánchez reveló que hay “un montón de casos iguales”. Dijo que los mismos dos policías sindicados por Cáceres y Cayumán “tienen a todo el pueblo atemorizado. Es comparable a la Ley de Far West”. Por ese motivo, irá por una imputación colectiva en donde se incluirán las denuncias particulares. Por su parte, Cayumán reclamó justicia debido a que aún no se recuperó de las lesiones.

“Como es vox populi, la causa inicia caratulada contra Omar Cayupán y Paulo Cáceres por el delito de resistencia de autoridad. Son detenidos durante dos días. Se realiza la audiencia de control. Es obligación hacerla. Le toman la declaración a Omar y Paulo. Surge que en realidad, la versión de los hechos había sido trastocada por la Policía y sucedió lo contrario” recordó Ana Sánchez.

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Por el hecho intervinieron el procurador general Jorge Miquelarena y el jefe de Policía, Juan Ale. Se ordenó el traslado y pase a disponibilidad de al menos dos uniformados. Pero no quedó ahí. La letrada aseguró que “los dos policías que les pegaron a Omar y Paulo están por ser imputados. No fue aún elevada pero hay pruebas contundentes para realizar una imputación colectiva. Es lo interesante del caso. No se van a tomar sólo las denuncias de ellos dos sino la de todas las personas que tienen denuncias particulares”.

Será una causa compleja. “La figura legal que ha sido caratulada (provisoria) es la de vejaciones. Hubo más de un delito. Habría que ir por el delito de lesiones graves por Omar Cayupan; agravado por funcionario policial”, agregó.

Sánchez aseguró que “son dos personas que tienen atemorizados a todo el pueblo. Es comparable a la ley del Far West. Cuando uno lee la historia de Chubut de cómo eran los policías fronterizos de la época, que estaban en los pueblos, encargados de controlar el orden y cometían abusos, una suerte de reflejo es la actualidad del pueblo” dijo.

Criticó “esta cuestión de la Policía de pasar a disponibilidad a personas que tienen comportamientos erróneos. Los que terminan siendo castigados son los pobladores que tienen que vivir bajo el temor de lo que pase”.

“La idea es que una sola causa se pueda tratar todo. Este caso, destapó todo. Tiene que pasar algo extremo para que se descubra todo lo otro. Había un menor acosado constantemente. No podía salir a la calle”.

La abogada señaló también que “además de lo fehaciente que tenemos, está el examen médico forense de Omar y los testigos que estuvieron en todo momento, tanto personal de seguridad como de salud. Ellos fueron individualizados en varios hospitales, historias clínicas y el relato de las víctimas es coincidente. Tengo el expediente. Coinciden los dos”, apuntó.

Se refirió a las expectativas legales con la causa. “Primero, que se caratule como concurso real de delitos. Son varios hechos. Trajeron varias consecuencias. Que realmente queden exonerados de la fuerza pública. La población está cansada de esos atropellos. Se arman sumarios internos. Se los pasa a disponibilidad. No prescinden del sueldo o se los va removiendo pero van a seguir siendo violentos. No hay un mensaje a la sociedad”, manifestó.

Agregó: “Tenemos toda la gente que conoce a Omar. En la Comisaría los torturaron también. Desde gas pimienta. Cosas de la época de la dictadura. Cosas graves. Además de eso, hay desprestigio. Salieron a dar su versión de los hechos en los medios. Paulo Cáceres tiene una función dentro de la política. Dijeron que estaba borracho. Todos atestiguaron que es una persona de bien que está en su casa. Fue desprestigiado”.

Para finalizar, relató: “Cuando hacían una denuncia iban a la Comisaría y caés en manos de los mismos que te golpean, es una ironía”.


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