Caso Diana Rojas: se hizo la reconstrucción del recorrido relatada por el acusado Donnini

La medida duró tres horas y el taxista explicó, desde su perspectiva, cómo se sucedieron los hechos. Insistió con que la joven estudiante entrerriana fue amenazada mientras iba en el taxi y que fue subida a otro rodado, en una de las paradas que efectuó ayer en medio de medidas de extrema seguridad.

24 OCT 2016 - 21:47 | Actualizado

Durante gran parte de la mañana de ayer se realizó el recorrido que hizo Dante Donnini, el taxista imputado por el femicidio de la estudiante de Abogacía Diana Rojas, tomando como elemento su declaración testimonial realizada ante el juez Marcelo Orlando en septiembre último.

La medida se desarrolló durante casi tres horas por distintas partes de la ciudad de Puerto Madryn, en el marco de un fuerte operativo de seguridad.

La diligencia, solicitada por la defensa, fue encabezada por el juez Marcelo Orlando junto al acompañamiento del fiscal Jorge Bugueño, el letrado querellante Carlos Villada y los defensores Carlos del Mármol y Gustavo Castro.

El recorrido comenzó en el domicilio donde vivía Diana Rojas y transcurrió por diversos puntos de la ciudad del Golfo. Donnini, según su versión, dijo que levantó a Diana en calle Libertad al 800 y la trasladó por diversos lugares. Cerca de la cancha del Club Guillermo Brown, relató que lo interceptó un auto, aunque mencionó la presencia de dos camionetas. En su relato ante el magistrado y las partes el taxista dijo que vio un arma, y que con la culata le pegaron en la cabeza.

Allí, según su versión, es donde amenazan a Diana por primera vez. Luego se dirigieron al ingreso de Solanas de la Patagonia, donde a Diana la sacan del auto en la rotonda de ingreso al barrio, sobre la ruta provincial Nº 1 y donde menciona que la bajaron del taxi para subirla a una camioneta de color negra que se trasladó hacia las Quintas del Mirador.

Él se va con uno de los agresores, que en Juan B. Justo y Hansen se sube a su camioneta, previo amenazarlo. De allí el taxista se dirigió a la estación de servicio de Juan B. Justo y Gales donde tomó una gaseosa “Pepsi” y luego se dirige a la garita de una parada de taxi en el barrio 630 viviendas y hace un viaje al Parque Industrial Liviano.

El recorrido finalizó pasado el mediodía. Donnini nunca denunció el hecho porque dijo que se sentía amenazado.

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24 OCT 2016 - 21:47

Durante gran parte de la mañana de ayer se realizó el recorrido que hizo Dante Donnini, el taxista imputado por el femicidio de la estudiante de Abogacía Diana Rojas, tomando como elemento su declaración testimonial realizada ante el juez Marcelo Orlando en septiembre último.

La medida se desarrolló durante casi tres horas por distintas partes de la ciudad de Puerto Madryn, en el marco de un fuerte operativo de seguridad.

La diligencia, solicitada por la defensa, fue encabezada por el juez Marcelo Orlando junto al acompañamiento del fiscal Jorge Bugueño, el letrado querellante Carlos Villada y los defensores Carlos del Mármol y Gustavo Castro.

El recorrido comenzó en el domicilio donde vivía Diana Rojas y transcurrió por diversos puntos de la ciudad del Golfo. Donnini, según su versión, dijo que levantó a Diana en calle Libertad al 800 y la trasladó por diversos lugares. Cerca de la cancha del Club Guillermo Brown, relató que lo interceptó un auto, aunque mencionó la presencia de dos camionetas. En su relato ante el magistrado y las partes el taxista dijo que vio un arma, y que con la culata le pegaron en la cabeza.

Allí, según su versión, es donde amenazan a Diana por primera vez. Luego se dirigieron al ingreso de Solanas de la Patagonia, donde a Diana la sacan del auto en la rotonda de ingreso al barrio, sobre la ruta provincial Nº 1 y donde menciona que la bajaron del taxi para subirla a una camioneta de color negra que se trasladó hacia las Quintas del Mirador.

Él se va con uno de los agresores, que en Juan B. Justo y Hansen se sube a su camioneta, previo amenazarlo. De allí el taxista se dirigió a la estación de servicio de Juan B. Justo y Gales donde tomó una gaseosa “Pepsi” y luego se dirige a la garita de una parada de taxi en el barrio 630 viviendas y hace un viaje al Parque Industrial Liviano.

El recorrido finalizó pasado el mediodía. Donnini nunca denunció el hecho porque dijo que se sentía amenazado.


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