Internaron al "Caballo" Suárez por una hemorragia intestinal
El detenido y procesado ex titular del Sindicato de Obrero Marítimos Unidos (SOMU), Omar Suárez, permanece detenido en una clínica porteña donde se recupera de una hemorragia intestinal, según informaron fuentes judiciales.
El sindicalista ingresó al Instituto Médico de Alta Complejidad, ubicado en Moreno al 2900 del barrio porteño de Balvanera, el martes pasado; allí le realizaron una "fibrocolonoscopía bajo sedación", según consta en el expediente del incidente de salud de Suárez al que tuvo acceso Télam.
La autorización para que el ex titular del SOMU fuera trasladado a una clínica porteña fue concedida por el juez Rodolfo Canicoba Corral, en el marco de la causa en la que el sindicalista fue procesado con prisión preventiva por ser el supuesto líder de una asociación ilícita que defraudó a los trabajadores del gremio.
El incidente vinculado a la salud del sindicalista se abrió el 1° de noviembre último, cuando su defensa le hizo saber al juzgado que Suárez estaba "evacuando con sangre", lo que generó un pedido de informes de Canicoba Corral al cuerpo médico del Penal de Marcos Paz.
La primera respuesta de parte del los médicos del Penal llegó al día siguiente y generó una nueva demanda del juzgado en busca de conocer con mayor precisión el estado de salud del detenido.
Tras un segundo informe, la defensa de Suárez solicitó el 8 de noviembre que el sindicalista fuera trasladado al sanatorio Otamendi, donde ya se había atendido con anterioridad, y días más tarde, a pedido del juzgado, aportó su historia clínica.
Recién en diciembre la familia del "Caballo" Suárez consiguió un turno para que este fuera atendido en el Otamendi, pero tras la autorización del juzgado las autoridades de la clínica se negaron a recibirlo.
De acuerdo al expediente, durante los primeros días de diciembre el Servicio Médico del Servicio Penitenciario sugirió que Suárez fuera a realizarse los estudios que necesitaba al Hospital Vicente López y Planes del partido bonaerense del General Rodríguez y el juzgado dispuso su traslado para el lunes pasado.
A pedido de la defensa y con el consentimiento del juez Rodolfo Canicoba Corral que entiende en la causa, Suárez permaneció un día más en el penal y fue trasladado el martes al Instituto Médico de Alta Complejidad donde fue atendido por un médico de su confianza, según indicaron fuentes judiciales.
Tras la realización de los estudios que le habían encomendado, la familia del ex titular del SOMU solicitó que el sindicalista permaneciera internado por un tiempo prolongado, a lo que el juzgado respondió que el tiempo de internación dependerá de los que digan los médicos.
La intenación de Suárez encendió alarmas en la fiscalía de Gerardo Pollicita, que interviene en el caso, y en el ministerio de Justicia, según pudo constatar Télam, dado que se temía que los abogados del sindicalista intentaran lograr la prisión domiciliaria para su defendido.
Desde el ministerio de Justicia sostuvieron que los médicos del Servicio Penitenciario no pudieron inspeccionar al detenido y no avalaron su traslado, mientras que desde la fiscalía de Pollicita sostuvieron que el traslado no les fue notificado.
La prisión preventiva de Suárez fue confirmada a fin de octubre por la Cámara Federal porteña cuando rechazó el pedido de excarcelación presentado por su defensa bajo el pretexto de que conceder ese recurso podía poner en riesgo la investigación.
El sindicalista ingresó al Instituto Médico de Alta Complejidad, ubicado en Moreno al 2900 del barrio porteño de Balvanera, el martes pasado; allí le realizaron una "fibrocolonoscopía bajo sedación", según consta en el expediente del incidente de salud de Suárez al que tuvo acceso Télam.
La autorización para que el ex titular del SOMU fuera trasladado a una clínica porteña fue concedida por el juez Rodolfo Canicoba Corral, en el marco de la causa en la que el sindicalista fue procesado con prisión preventiva por ser el supuesto líder de una asociación ilícita que defraudó a los trabajadores del gremio.
El incidente vinculado a la salud del sindicalista se abrió el 1° de noviembre último, cuando su defensa le hizo saber al juzgado que Suárez estaba "evacuando con sangre", lo que generó un pedido de informes de Canicoba Corral al cuerpo médico del Penal de Marcos Paz.
La primera respuesta de parte del los médicos del Penal llegó al día siguiente y generó una nueva demanda del juzgado en busca de conocer con mayor precisión el estado de salud del detenido.
Tras un segundo informe, la defensa de Suárez solicitó el 8 de noviembre que el sindicalista fuera trasladado al sanatorio Otamendi, donde ya se había atendido con anterioridad, y días más tarde, a pedido del juzgado, aportó su historia clínica.
Recién en diciembre la familia del "Caballo" Suárez consiguió un turno para que este fuera atendido en el Otamendi, pero tras la autorización del juzgado las autoridades de la clínica se negaron a recibirlo.
De acuerdo al expediente, durante los primeros días de diciembre el Servicio Médico del Servicio Penitenciario sugirió que Suárez fuera a realizarse los estudios que necesitaba al Hospital Vicente López y Planes del partido bonaerense del General Rodríguez y el juzgado dispuso su traslado para el lunes pasado.
A pedido de la defensa y con el consentimiento del juez Rodolfo Canicoba Corral que entiende en la causa, Suárez permaneció un día más en el penal y fue trasladado el martes al Instituto Médico de Alta Complejidad donde fue atendido por un médico de su confianza, según indicaron fuentes judiciales.
Tras la realización de los estudios que le habían encomendado, la familia del ex titular del SOMU solicitó que el sindicalista permaneciera internado por un tiempo prolongado, a lo que el juzgado respondió que el tiempo de internación dependerá de los que digan los médicos.
La intenación de Suárez encendió alarmas en la fiscalía de Gerardo Pollicita, que interviene en el caso, y en el ministerio de Justicia, según pudo constatar Télam, dado que se temía que los abogados del sindicalista intentaran lograr la prisión domiciliaria para su defendido.
Desde el ministerio de Justicia sostuvieron que los médicos del Servicio Penitenciario no pudieron inspeccionar al detenido y no avalaron su traslado, mientras que desde la fiscalía de Pollicita sostuvieron que el traslado no les fue notificado.
La prisión preventiva de Suárez fue confirmada a fin de octubre por la Cámara Federal porteña cuando rechazó el pedido de excarcelación presentado por su defensa bajo el pretexto de que conceder ese recurso podía poner en riesgo la investigación.