El sondeo semanal, realizado a un centenar de analistas del sector privado y conocido como Boletín Focus, había calculado la semana anterior una inflación del 4,81% y la bajó esta semana en un punto base, señala un cable de la agencia de noticias EFE.
Brasil terminó 2016 con una inflación del 6,29%, una cifra que se sitúa por debajo del llamado "techo de tolerancia" del 6,5%, en un contexto de desaceleración de la golpeada economía del país que, según cálculos de los analistas, se contrajo 3,5 por ciento el año pasado.
La cifra supuso un alivio para la maltrecha economía del país, que cerró 2015 con una inflación del 10,67 por ciento, la mayor tasa en trece años, y contribuyó para una aceleración del descenso de las tasas de interés.
La semana pasada el Banco Central recortó sus tasas de interés en 75 puntos básicos al 13%, un recorte mayor al esperado, profundizando el alivio monetario para tratar de sacar a la economía de la peor recesión de su historia.
Para 2018 los analistas son más optimistas y prevén una inflación del 4,50%, en el centro de la meta fijada por el Banco Central, y un crecimiento del 2,20%.
Brasil cerró 2015 con una caída del 3,8%, la mayor de los últimos 25 años, y, según los analistas se contrajo 3,5% en 2016, por lo que acumuló dos años consecutivos en números rojos por primera vez desde la década de 1930.
El sondeo semanal, realizado a un centenar de analistas del sector privado y conocido como Boletín Focus, había calculado la semana anterior una inflación del 4,81% y la bajó esta semana en un punto base, señala un cable de la agencia de noticias EFE.
Brasil terminó 2016 con una inflación del 6,29%, una cifra que se sitúa por debajo del llamado "techo de tolerancia" del 6,5%, en un contexto de desaceleración de la golpeada economía del país que, según cálculos de los analistas, se contrajo 3,5 por ciento el año pasado.
La cifra supuso un alivio para la maltrecha economía del país, que cerró 2015 con una inflación del 10,67 por ciento, la mayor tasa en trece años, y contribuyó para una aceleración del descenso de las tasas de interés.
La semana pasada el Banco Central recortó sus tasas de interés en 75 puntos básicos al 13%, un recorte mayor al esperado, profundizando el alivio monetario para tratar de sacar a la economía de la peor recesión de su historia.
Para 2018 los analistas son más optimistas y prevén una inflación del 4,50%, en el centro de la meta fijada por el Banco Central, y un crecimiento del 2,20%.
Brasil cerró 2015 con una caída del 3,8%, la mayor de los últimos 25 años, y, según los analistas se contrajo 3,5% en 2016, por lo que acumuló dos años consecutivos en números rojos por primera vez desde la década de 1930.