Hubo tres detenidos por el crimen del remisero pero sólo uno quedó preso
El principal sospechoso es Miguel Ángel Sotelo. Quedará cuatro meses preso. Sus presuntos cómplices, Claudio Huilipan y Jesús Aguilar, quedaron libres por decisión de la jueza Raquel Tasello. Más detalles del dramático caso.
La fiscal de Comodoro Rivadavia, Camila Banfi, confirmó la detención de tres personas que estarían involucradas en el homicidio del remisero Fernando Andrés Schmidt en la madrugada del domingo. Dos ya están libres.
Al presunto autor del hecho le cabría una imputación principal de homicidio en ocasión de robo y “otra alternativa es homicidio”. Dio detalles de los hechos y dijo que el principal imputado es Miguel Ángel Sotelo, de 18 años, mientras que las otras dos personas responderían a la identidad de Claudio Alberto Huilipan, de 29 años y Jesús Leonardo Aguilar, de 24.
Explicó que “en este momento de la investigación no se descarta ningún móvil. Estamos en una etapa de investigación importante por lo que no podemos descartar ninguna hipótesis. Creo que con el avance de la investigación, indicios y testigos, nos va a poder permitir armar una hipótesis lo más cercana posible”.
Indicó en su diálogo con radio La Cien Punto Uno, que el trabajo se inició a partir de las 5.30 de la madrugada en conjunto con la División Criminalística. “Había bastantes elementos para relevar. Posteriormente se tomó entrevista a una serie de personas que son compañeros de la víctima”, dijo y señaló que en el lugar del hecho se registraron “testimonios variados de personas que daban características físicas bastante descriptivas respecto a prendas de vestir, y el rostro. La característica es que los vecinos decían que el autor era una persona joven de 18 o 19 años”.
A su vez remarcó que “llama la atención la continuidad del hecho porque el pedido de auxilio ocurre 10 minutos después de que toma el remís en la agencia”.
Pedido de auxilio
Indicó la fiscal sque “el pedido de auxilio lo efectúa el propio Schmitdh. Manifiesta que fue apuñalado por lo que hay que entrevistar a quienes prestaron ayuda y analizar eso”.
Además, sostuvo que “el operador de la remisería informó que ellos tienen un protocolo de seguridad, cuando van con personas que hacen viajes hacia algún barrio potencialmente peligroso, no permiten que suban a otros pasajeros. En este caso, ocurrió a 10 minutos de salir por lo que se aplicaría el protocolo de no parar en ningún intermedio ni levantó a ningún pasajero más, de modo que hay bastante material para ser peritado”.
Cámaras de seguridad
La fiscal indicó que luego de que se indicara que la agencia contaba con cámaras de seguridad, se informó la policía que acudió al lugar a las 7 de la mañana y “cuando está llegando a la agencia ven a dos personas saltando los paredones y un tercero que ingresa a un domicilio”.
Por tal motivo, “se inicia la investigación más detallada, y personal policial dice que habían sustraído las cámaras pero no el DVR que es donde estaban las imágenes. De modo que la Brigada identificó a las personas. Ingresa Sotelo y se ve claramente porque la imagen es muy nítida. En las imágenes tendríamos al autor Sotelo y a las dos personas que ingresaron a sustraer las cámaras”, remarcó.
Al momento del robo de la cámara, las personas “rompen la puerta y únicamente van a retirar la cámara que había filmado al sujeto que abordó el remís”, detalló Banfi.
Amenazas previas
Respecto a las amenazas que el remisero había recibido días previos al asesinato, Banfi remarcó que el dato fue aportado por personas cercanas a Schmidt y también se dieron las identidades de las personas que lo habrían amenazado. “Había una persona que semanas atrás lo había amenazado por unas diferencias personales. Pero al menos no tendría que ver con ninguno de los detenidos”.
Finalmente con respecto a la imputación que le cabría al presunto autor del hecho, Miguel Ángel Sotelo, de 18 años, Banfi indicó que “una imputación principal podría ser homicidio en ocasión de robo y otra alternativa es homicidio”.
Mientras que a los otros dos hombres detenidos Claudio Alberto Huilipan, de 29 años y Jesús Leonardo Aguilar, sería por encubrimiento agravado.
Un detenido y 2 libres
En una audiencia de control de detención se le dictó la prisión preventiva por cuatro meses al sospechoso, mientras que recuperaron la libertad las dos personas a quienes se los detuvo cuando intentaban sustraer las cámaras de seguridad de la agencia Aleisa.
Lo ordenó la jueza penal Raquel Tasello ante el fiscal Héctor Iturrioz y los defensores públicos Esteban Mantecon y Vanesa Vera.
Luego de escuchar los alegatos y tras varias horas de audiencia, Tasello declaró legal la detención de Sotelo y lo imputó por “homicidio en ocasión de robo”, por lo que le dictó la prisión preventiva por cuatro meses y otorgó el mismo plazo para la realización de las investigaciones pertinentes.
A su vez, a Claudio Alberto Huilipan y Jesús Leonardo Aguilar, detenidos cuando intentaban robar las cámaras de seguridad de la agencia Aleisa, donde trabajaba la víctima, se los imputó por “robo simple en concurso por encubrimiento” y ambos recuperaron su libertad, confirmó la Fiscalía tras la audiencia.
La fiscal de Comodoro Rivadavia, Camila Banfi, confirmó la detención de tres personas que estarían involucradas en el homicidio del remisero Fernando Andrés Schmidt en la madrugada del domingo. Dos ya están libres.
Al presunto autor del hecho le cabría una imputación principal de homicidio en ocasión de robo y “otra alternativa es homicidio”. Dio detalles de los hechos y dijo que el principal imputado es Miguel Ángel Sotelo, de 18 años, mientras que las otras dos personas responderían a la identidad de Claudio Alberto Huilipan, de 29 años y Jesús Leonardo Aguilar, de 24.
Explicó que “en este momento de la investigación no se descarta ningún móvil. Estamos en una etapa de investigación importante por lo que no podemos descartar ninguna hipótesis. Creo que con el avance de la investigación, indicios y testigos, nos va a poder permitir armar una hipótesis lo más cercana posible”.
Indicó en su diálogo con radio La Cien Punto Uno, que el trabajo se inició a partir de las 5.30 de la madrugada en conjunto con la División Criminalística. “Había bastantes elementos para relevar. Posteriormente se tomó entrevista a una serie de personas que son compañeros de la víctima”, dijo y señaló que en el lugar del hecho se registraron “testimonios variados de personas que daban características físicas bastante descriptivas respecto a prendas de vestir, y el rostro. La característica es que los vecinos decían que el autor era una persona joven de 18 o 19 años”.
A su vez remarcó que “llama la atención la continuidad del hecho porque el pedido de auxilio ocurre 10 minutos después de que toma el remís en la agencia”.
Pedido de auxilio
Indicó la fiscal sque “el pedido de auxilio lo efectúa el propio Schmitdh. Manifiesta que fue apuñalado por lo que hay que entrevistar a quienes prestaron ayuda y analizar eso”.
Además, sostuvo que “el operador de la remisería informó que ellos tienen un protocolo de seguridad, cuando van con personas que hacen viajes hacia algún barrio potencialmente peligroso, no permiten que suban a otros pasajeros. En este caso, ocurrió a 10 minutos de salir por lo que se aplicaría el protocolo de no parar en ningún intermedio ni levantó a ningún pasajero más, de modo que hay bastante material para ser peritado”.
Cámaras de seguridad
La fiscal indicó que luego de que se indicara que la agencia contaba con cámaras de seguridad, se informó la policía que acudió al lugar a las 7 de la mañana y “cuando está llegando a la agencia ven a dos personas saltando los paredones y un tercero que ingresa a un domicilio”.
Por tal motivo, “se inicia la investigación más detallada, y personal policial dice que habían sustraído las cámaras pero no el DVR que es donde estaban las imágenes. De modo que la Brigada identificó a las personas. Ingresa Sotelo y se ve claramente porque la imagen es muy nítida. En las imágenes tendríamos al autor Sotelo y a las dos personas que ingresaron a sustraer las cámaras”, remarcó.
Al momento del robo de la cámara, las personas “rompen la puerta y únicamente van a retirar la cámara que había filmado al sujeto que abordó el remís”, detalló Banfi.
Amenazas previas
Respecto a las amenazas que el remisero había recibido días previos al asesinato, Banfi remarcó que el dato fue aportado por personas cercanas a Schmidt y también se dieron las identidades de las personas que lo habrían amenazado. “Había una persona que semanas atrás lo había amenazado por unas diferencias personales. Pero al menos no tendría que ver con ninguno de los detenidos”.
Finalmente con respecto a la imputación que le cabría al presunto autor del hecho, Miguel Ángel Sotelo, de 18 años, Banfi indicó que “una imputación principal podría ser homicidio en ocasión de robo y otra alternativa es homicidio”.
Mientras que a los otros dos hombres detenidos Claudio Alberto Huilipan, de 29 años y Jesús Leonardo Aguilar, sería por encubrimiento agravado.
Un detenido y 2 libres
En una audiencia de control de detención se le dictó la prisión preventiva por cuatro meses al sospechoso, mientras que recuperaron la libertad las dos personas a quienes se los detuvo cuando intentaban sustraer las cámaras de seguridad de la agencia Aleisa.
Lo ordenó la jueza penal Raquel Tasello ante el fiscal Héctor Iturrioz y los defensores públicos Esteban Mantecon y Vanesa Vera.
Luego de escuchar los alegatos y tras varias horas de audiencia, Tasello declaró legal la detención de Sotelo y lo imputó por “homicidio en ocasión de robo”, por lo que le dictó la prisión preventiva por cuatro meses y otorgó el mismo plazo para la realización de las investigaciones pertinentes.
A su vez, a Claudio Alberto Huilipan y Jesús Leonardo Aguilar, detenidos cuando intentaban robar las cámaras de seguridad de la agencia Aleisa, donde trabajaba la víctima, se los imputó por “robo simple en concurso por encubrimiento” y ambos recuperaron su libertad, confirmó la Fiscalía tras la audiencia.