Desde que asumió Macri, casi 23 mil patagónicos se quedaron sin empleo
Surge de un estudio divulgado por la consultora E&M Patagonia. Sólo en Chubut hubo 3.892 trabajadores en blanco que fueron despedidos.
Lanzar un plan para incentivar el desarrollo de la Patagonia el mismo día que cierra una planta de cerámicos en Puerto Madryn y deja a 140 personas en la calle es un contrasentido que sólo un Gobierno como el de Cambiemos puede explicar.
Desde que asumió la presidencia, Mauricio Macri convirtió a la Patagonia en el patio trasero de la Argentina. Aún a pesar de su baja densidad poblacional y con muy poca relevancia electoral, el Presidente no le perdona a una de las regiones más productivas y generadoras de riqueza, haberle dado la espalda en las urnas.
Vale la pena recordar que en Chubut, Macri fue tercero cómodo en las elecciones de octubre de 2015, y en la segunda vuelta que lo catapultó a la Presidencia a nivel nacional, en esta provincia perdió por 20 puntos con Daniel Scioli.
Durante los catorce meses que lleva de mandato, Macri sacudió con un tarifazo de gas a los lugares que generan el gas que consumen todos los argentinos; dejó casi a la buena de Dios al sector petrolero, eliminando de hecho el “barrill criollo”; le sacó de un plumazo los reembolsos por puertos patagónicos para beneficiar a la Provincia de Buenos Aires; y prometió obras largamente postergadas que por ahora siguen durmiendo en cajones o en procesos licitatorios más lentos que los tanques del General Alais.
Semana dura
Por esas cosas de la vida que ya nadie puede explicar, Macri pensaba que la semana de su cumpleaños número 58 podría ser una gran semana. Pero terminó siendo un espanto: su reunión con los gobernadores fue amable pero no pudo evitar escuchar un rosario de reclamos. Y el pomposo anuncio del “Plan Patagonia” quedó para otro momento, luego de que el Presidente tuviera que huir despavorido de Viedma, acuciado por manifestaciones callejeras que terminaron con un líder de ATE detenido y golpeado por la Policía de Río Negro.
Por si fuera poco, ese mismo día se conoció el vergonzoso acuerdo firmado en junio del año pasado entre el Estado nacional y el Correo Argentino, una empresa que en su momento estuvo vinculada a la familia Macri, que equivale a una condonación de deuda que casi todo el mundo considera abusiva.
Patagonia perdida
El impacto negativo de las políticas de Cambiemos en la Patagonia están a la vista. Las cifras estadísticas no hacen más que corroborar lo que muchos perciben: uno de cada tres empleos perdidos en la Argentina durante la gestión de Macri es de la región sur del país.
El dato pertenece a la consultora E&M Patagonia, que viene elaborando un ranking de regiones sobre cantidad de empleos perdidos, en base a datos oficiales del Ministerio de Trabajo de la Nación.
Tomando en cuenta todos los trabajadores privados inscriptos en el país, y al hacer una comparación interanual, se advierte una contracción de casi 73.000 trabajadores asalariados formales con respecto al mes de noviembre de 2015. “De estas pérdidas, la Patagonia aporta el 31,52%. Esto quiere decir que, de cada tres trabajadores que fueron despedidos entre noviembre de 2015 y noviembre de 2016, uno era de la región patagónica”, dice el informe elaborado por Julio Ibáñez, titular de la consultora.
El dato es más preocupante si, además del número absoluto, se toma en cuenta que la Patagonia aporta tan solo el 6,7% de la cantidad de trabajadores privados activos.
“Por lo tanto, se puede considerar que las provincias patagónicas son las más castigadas proporcionalmente en las caídas de puestos laborales del sector privado de toda la Argentina. Analizando el número actual de trabajadores activos, y los empleos perdidos en el año, en la Patagonia se dejaron en el camino un total de 22.998 trabajadores, sobre un total de 408.782 obreros activos en blanco en el último mes disponible, lo que representa un 5,63% de la masa total”, detalla el informe de E&M Patagonia.
3.892 menos
Haciendo este mismo cálculo para el total país, y contabilizando que en noviembre de 2016 se registraron en el país alrededor de 6,19 millones de trabajadores asalariados en el sector privado -según la Subsecretaría de Políticas, Estudios y Estadísticas Laborales del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social de la Nación-, esta caída es del 1,1%.
En este sentido, los sectores más castigados fueron los de la construcción, el sector de Minas y Canteras (Petróleo) y las industrias manufactureras.
Las provincias patagónica que más empleos perdieron durante la gestión macrista son Tierra del Fuego (5.386 puestos de trabajo en blanco menos) y Santa Cruz (6.671). Después le siguen Chubut (3.892), Río Negro (3.627); Neuquén (3.422); y La Pampa (729).
Con sólo ver estos números se puede entender que el “Plan Patagonia” de Macri debería comenzar por admitir las graves consecuencias que tuvo la sucesión de desaciertos en estos catorce meses de gestión.
Casi 23 mil patagónicos se quedaron en la calle. ¿Cómo piensa el Gobierno nacional revertir semejante cifra? ¿Qué plan “mágico” piensa implementar para regenerar el empleo, recuperar a las industrias y terminar con esa sensación de que la economía argentina cayó en un pozo por la impericia de los funcionarios de un Gobierno que pedalean todo el tiempo en el aire y repiten como loros lo de “la herencia” recibida?
Lanzar un plan para incentivar el desarrollo de la Patagonia el mismo día que cierra una planta de cerámicos en Puerto Madryn y deja a 140 personas en la calle es un contrasentido que sólo un Gobierno como el de Cambiemos puede explicar.
Desde que asumió la presidencia, Mauricio Macri convirtió a la Patagonia en el patio trasero de la Argentina. Aún a pesar de su baja densidad poblacional y con muy poca relevancia electoral, el Presidente no le perdona a una de las regiones más productivas y generadoras de riqueza, haberle dado la espalda en las urnas.
Vale la pena recordar que en Chubut, Macri fue tercero cómodo en las elecciones de octubre de 2015, y en la segunda vuelta que lo catapultó a la Presidencia a nivel nacional, en esta provincia perdió por 20 puntos con Daniel Scioli.
Durante los catorce meses que lleva de mandato, Macri sacudió con un tarifazo de gas a los lugares que generan el gas que consumen todos los argentinos; dejó casi a la buena de Dios al sector petrolero, eliminando de hecho el “barrill criollo”; le sacó de un plumazo los reembolsos por puertos patagónicos para beneficiar a la Provincia de Buenos Aires; y prometió obras largamente postergadas que por ahora siguen durmiendo en cajones o en procesos licitatorios más lentos que los tanques del General Alais.
Semana dura
Por esas cosas de la vida que ya nadie puede explicar, Macri pensaba que la semana de su cumpleaños número 58 podría ser una gran semana. Pero terminó siendo un espanto: su reunión con los gobernadores fue amable pero no pudo evitar escuchar un rosario de reclamos. Y el pomposo anuncio del “Plan Patagonia” quedó para otro momento, luego de que el Presidente tuviera que huir despavorido de Viedma, acuciado por manifestaciones callejeras que terminaron con un líder de ATE detenido y golpeado por la Policía de Río Negro.
Por si fuera poco, ese mismo día se conoció el vergonzoso acuerdo firmado en junio del año pasado entre el Estado nacional y el Correo Argentino, una empresa que en su momento estuvo vinculada a la familia Macri, que equivale a una condonación de deuda que casi todo el mundo considera abusiva.
Patagonia perdida
El impacto negativo de las políticas de Cambiemos en la Patagonia están a la vista. Las cifras estadísticas no hacen más que corroborar lo que muchos perciben: uno de cada tres empleos perdidos en la Argentina durante la gestión de Macri es de la región sur del país.
El dato pertenece a la consultora E&M Patagonia, que viene elaborando un ranking de regiones sobre cantidad de empleos perdidos, en base a datos oficiales del Ministerio de Trabajo de la Nación.
Tomando en cuenta todos los trabajadores privados inscriptos en el país, y al hacer una comparación interanual, se advierte una contracción de casi 73.000 trabajadores asalariados formales con respecto al mes de noviembre de 2015. “De estas pérdidas, la Patagonia aporta el 31,52%. Esto quiere decir que, de cada tres trabajadores que fueron despedidos entre noviembre de 2015 y noviembre de 2016, uno era de la región patagónica”, dice el informe elaborado por Julio Ibáñez, titular de la consultora.
El dato es más preocupante si, además del número absoluto, se toma en cuenta que la Patagonia aporta tan solo el 6,7% de la cantidad de trabajadores privados activos.
“Por lo tanto, se puede considerar que las provincias patagónicas son las más castigadas proporcionalmente en las caídas de puestos laborales del sector privado de toda la Argentina. Analizando el número actual de trabajadores activos, y los empleos perdidos en el año, en la Patagonia se dejaron en el camino un total de 22.998 trabajadores, sobre un total de 408.782 obreros activos en blanco en el último mes disponible, lo que representa un 5,63% de la masa total”, detalla el informe de E&M Patagonia.
3.892 menos
Haciendo este mismo cálculo para el total país, y contabilizando que en noviembre de 2016 se registraron en el país alrededor de 6,19 millones de trabajadores asalariados en el sector privado -según la Subsecretaría de Políticas, Estudios y Estadísticas Laborales del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social de la Nación-, esta caída es del 1,1%.
En este sentido, los sectores más castigados fueron los de la construcción, el sector de Minas y Canteras (Petróleo) y las industrias manufactureras.
Las provincias patagónica que más empleos perdieron durante la gestión macrista son Tierra del Fuego (5.386 puestos de trabajo en blanco menos) y Santa Cruz (6.671). Después le siguen Chubut (3.892), Río Negro (3.627); Neuquén (3.422); y La Pampa (729).
Con sólo ver estos números se puede entender que el “Plan Patagonia” de Macri debería comenzar por admitir las graves consecuencias que tuvo la sucesión de desaciertos en estos catorce meses de gestión.
Casi 23 mil patagónicos se quedaron en la calle. ¿Cómo piensa el Gobierno nacional revertir semejante cifra? ¿Qué plan “mágico” piensa implementar para regenerar el empleo, recuperar a las industrias y terminar con esa sensación de que la economía argentina cayó en un pozo por la impericia de los funcionarios de un Gobierno que pedalean todo el tiempo en el aire y repiten como loros lo de “la herencia” recibida?