Dijo que “hace pocos días leí un artículo periodístico que decía: ´En Esquel tienen que dejar de ser expulsivos´. Era el gobernador Mario Das Neves haciendo notar su queja, debido a que su comentario respecto de que habría interesados en el centro de esquí, no habría sido tan bien tomado por algunos actores del sector turístico”.
Sostuvo que “no voy a cuestionar si la empresa (Don Otto) está o no en condiciones de atraer más turistas que nuestra bendita provincia, porque no conozco el verdadero potencial económico de la misma, ni su alcance en cuanto a promoción y marketing. Tampoco voy a cuestionar a nuestras agencias de viajes ni a nadie que haya estudiado científicamente el tema, porque pueden contar con evidencia o proyecciones que yo tampoco tenga”.
Si recalcó Comparada que cuestiona que las Cámaras Turísticas, de Comercio y otras, no pongan en discusión los peligros de perder el control del cerro La Hoya. “Presiento que detrás de esta privatización que se pretende instalar, los esquelenses estamos perdiendo el control de un recurso que vamos a lamentar”.
Recordó que “hace pocos meses discutíamos la posibilidad de realizar un traspaso de la órbita provincial al municipal, con la idea de que Esquel administre los recursos de la zona. Esa discusión se perdió como por arte de magia, y pasamos de una administración conjunta entre Provincia y municipio, a una posible privatización dada a una empresa de colectivos”.
En el mismo sentido el prestador manifestó que “La Hoya ya estuvo concesionada en la década del 90´, y los resultados para el Estado fueron malísimos, y los conocedores de dicha etapa, comentan que se devolvió el cerro destruido”.
También indicó que el CAM tuvo en 2016 un presupuesto de 10 millones de pesos, que no sólo recuperó, sino que arrojó ganancias por 2 millones de pesos, sin contar sueldos del personal permanente.
Aumento de la desigualdad
En su análisis Javier Comparada señaló que es bien sabido que las empresas concesionarias intentan acaparar todos los servicios posibles para hacerlo súper rentable, dejando afuera del sistema a una cantidad de prestadores independientes. “En Bariloche –explicó- ofrecen el paquete completo: Aéreos o micro, comida, excursiones, diversión nocturna, hoteles, etc. Al mismo ritmo aumenta la desigualdad, y el mejor ejemplo de esto es la ciudad de Bariloche, donde el crecimiento de las villas miseria es proporcional al desarrollo del centro”.
Citó otras malas experiencias en Esquel, y remarcó que “la quita del servicio de transporte a Oscar Perazzo resultó un fiasco, con un juicio millonario en contra de los esquelenses, gente a la calle e impotencia del empresario. Llegó una súper empresa de Bariloche que abandonó el servicio al poco tiempo, y vuelta de Perazzo a continuar haciendo Patria”.
Otro ejemplo que dio Comparada es la concesión de la confitería de La Hoya cuatro años atrás, a alguien que en el ambiente turístico se decía que tendría relación directa con un funcionario de la Provincia, además de antecedentes discutidos. “El servicio resulto ser pésimo, caro, además de no pagar el canon. Y a todas estas experiencias debemos sumarle el pésimo estado de la Ruta 40, y un Parque Nacional que cierra inexplicablemente senderos en momentos en que Esquel lo necesita”.
“Se han intentado por parte de privados inversiones que no han dado resultado por las malas temporadas, y por la inexistencia de planes a nivel gubernamental que hagan sustentable el desarrollo turístico. Tuvimos, entre otros casos, un cine cuyos propietarios lo resistieron hasta el último minuto pero no funcionó”, subrayó.
Expresó que “no es cierto que en Esquel seamos expulsivos: Lo único que Esquel ha expulsado es la megaminería, aunque debemos reconocer que aquellos que somos antimineros no tenemos ganas de escuchar ni de mega ni de mina. Eso vamos a reconocerlo”.
En la misma dirección declaró Javier Comparada que “si el gobernador Das Neves le viera la cara a los turistas extranjeros cuando observan los murales con fotos del pueblo de Esquel reunido en asamblea para resistir el avance minero, podría observar el grado de admiración que sienten al contemplar la existencia de un pueblo que se levantó ante al avance no sólo de las mineras, sino también de las corporaciones, y de una clase política que estuvo a punto de rifar nuestros recursos”.#
Dijo que “hace pocos días leí un artículo periodístico que decía: ´En Esquel tienen que dejar de ser expulsivos´. Era el gobernador Mario Das Neves haciendo notar su queja, debido a que su comentario respecto de que habría interesados en el centro de esquí, no habría sido tan bien tomado por algunos actores del sector turístico”.
Sostuvo que “no voy a cuestionar si la empresa (Don Otto) está o no en condiciones de atraer más turistas que nuestra bendita provincia, porque no conozco el verdadero potencial económico de la misma, ni su alcance en cuanto a promoción y marketing. Tampoco voy a cuestionar a nuestras agencias de viajes ni a nadie que haya estudiado científicamente el tema, porque pueden contar con evidencia o proyecciones que yo tampoco tenga”.
Si recalcó Comparada que cuestiona que las Cámaras Turísticas, de Comercio y otras, no pongan en discusión los peligros de perder el control del cerro La Hoya. “Presiento que detrás de esta privatización que se pretende instalar, los esquelenses estamos perdiendo el control de un recurso que vamos a lamentar”.
Recordó que “hace pocos meses discutíamos la posibilidad de realizar un traspaso de la órbita provincial al municipal, con la idea de que Esquel administre los recursos de la zona. Esa discusión se perdió como por arte de magia, y pasamos de una administración conjunta entre Provincia y municipio, a una posible privatización dada a una empresa de colectivos”.
En el mismo sentido el prestador manifestó que “La Hoya ya estuvo concesionada en la década del 90´, y los resultados para el Estado fueron malísimos, y los conocedores de dicha etapa, comentan que se devolvió el cerro destruido”.
También indicó que el CAM tuvo en 2016 un presupuesto de 10 millones de pesos, que no sólo recuperó, sino que arrojó ganancias por 2 millones de pesos, sin contar sueldos del personal permanente.
Aumento de la desigualdad
En su análisis Javier Comparada señaló que es bien sabido que las empresas concesionarias intentan acaparar todos los servicios posibles para hacerlo súper rentable, dejando afuera del sistema a una cantidad de prestadores independientes. “En Bariloche –explicó- ofrecen el paquete completo: Aéreos o micro, comida, excursiones, diversión nocturna, hoteles, etc. Al mismo ritmo aumenta la desigualdad, y el mejor ejemplo de esto es la ciudad de Bariloche, donde el crecimiento de las villas miseria es proporcional al desarrollo del centro”.
Citó otras malas experiencias en Esquel, y remarcó que “la quita del servicio de transporte a Oscar Perazzo resultó un fiasco, con un juicio millonario en contra de los esquelenses, gente a la calle e impotencia del empresario. Llegó una súper empresa de Bariloche que abandonó el servicio al poco tiempo, y vuelta de Perazzo a continuar haciendo Patria”.
Otro ejemplo que dio Comparada es la concesión de la confitería de La Hoya cuatro años atrás, a alguien que en el ambiente turístico se decía que tendría relación directa con un funcionario de la Provincia, además de antecedentes discutidos. “El servicio resulto ser pésimo, caro, además de no pagar el canon. Y a todas estas experiencias debemos sumarle el pésimo estado de la Ruta 40, y un Parque Nacional que cierra inexplicablemente senderos en momentos en que Esquel lo necesita”.
“Se han intentado por parte de privados inversiones que no han dado resultado por las malas temporadas, y por la inexistencia de planes a nivel gubernamental que hagan sustentable el desarrollo turístico. Tuvimos, entre otros casos, un cine cuyos propietarios lo resistieron hasta el último minuto pero no funcionó”, subrayó.
Expresó que “no es cierto que en Esquel seamos expulsivos: Lo único que Esquel ha expulsado es la megaminería, aunque debemos reconocer que aquellos que somos antimineros no tenemos ganas de escuchar ni de mega ni de mina. Eso vamos a reconocerlo”.
En la misma dirección declaró Javier Comparada que “si el gobernador Das Neves le viera la cara a los turistas extranjeros cuando observan los murales con fotos del pueblo de Esquel reunido en asamblea para resistir el avance minero, podría observar el grado de admiración que sienten al contemplar la existencia de un pueblo que se levantó ante al avance no sólo de las mineras, sino también de las corporaciones, y de una clase política que estuvo a punto de rifar nuestros recursos”.#