Murieron 33 adolescentes en Guatemala por incendio de reformatorio
La muerte de otras 11 chicas elevó a 33 el número de víctimas fatales como consecuencia de las graves quemaduras que sufrieron en el incendio en un centro de menores. Algunas de las internas prendieron fuego a los colchones para denunciar abusos sexuales y físicos en la jornada en que se conmemoraba el Día Internacional de la Mujer.
Otras veinte chicas de entre 12 y 17 años permanecen internadas en grave estado en los hospitales Roosevelt y San Juan de Dios, algunas con quemaduras de cuarto grado y con alto riesgo de mortalidad, señala un despacho de la agencia Efe.
Las autoridades "aún no brindaron un informe sobre la identidad de las víctimas y tampoco hay un listado de los niños internados" en ese centro, dijo a Télam Abner Paredes, defensor de la Juventud de la Procuraduría de Derechos Humanos (PDH) guatemalteca.
El incendio ocurrió en el Hogar Seguro Virgen de la Asunción, ubicado a unos 25 kilómetros al sureste de ciudad de Guatemala, en el municipio de San José Pinula.
El director del hospital San Juan de Dios, Juan Antonio Villeda, afirmó que atendieron a 16 "menores con quemaduras de segundo y tercer grado" y añadió que "en algunos casos el problema se extendió a las vías respiratorias".
"Algunas han sido operadas, otras tienen aparatos para respirar. Habilitamos un área donde están bajo atención médica", explicó el funcionario.
"Estamos abastecidos con insumos básicos que permiten brindar atención adecuada a los pacientes", explicó el centro de salud a través de un comunicado, consignó el diario local Prensa Libre.
Por la declaración de algunos internos y de las autoridades, se supo que los menores de edad comenzaron el fuego al incendiar las colchonetas que usaban de cama, pero luego las llamas se propagaron y se tornaron incontrolables.
Las adolescentes que quedaron atrapadas en la habitación donde comenzó el fuego murieron calcinadas, en medio de la protesta por los abusos sexuales y físicos que realizaban en el Día Internacional de la Mujer.
La institución, a cargo de la Secretaría de Bienestar Social, alojaba a unos 748 menores (varones y mujeres), aunque su capacidad es de 400, y ante esta tragedia el Gobierno destituyó al director y decretó tres días de luto oficial.
El año pasado, 47 jóvenes se fugaron de la casa hogar, lo que llevó a la Secretaría de la Presidencia -que está encargada de la guardia y custodia de los menores- a desplazar al entonces director del instituto.
La PDH había denunciado en 2016 ante la justicia local y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), la posible conexión entre algunos miembros del personal del hogar y una red de trata.
"Por reiteradas fugas, la PDH visitó la casa hogar y estableció la posible participación de miembros del personal en una red de trata, dio cuenta al Ministerio Público Fiscal y en octubre de 2016 la jueza sexta (en Primera instancia Penal) Silvia de León ordena hacer una investigación", explicó Paredes a Télam.
Y continuó: "Previendo una situación de gravedad y porque las adolescentes seguían escapando, la PDH decidió el 11 de noviembre de 2016 remitir una solicitud de medidas cautelares a la CIDH,", aunque "a la fecha no tenemos respuesta", dijo.
Las advertencias de la Procuradoría habían comenzado en 2013, cuando hizo una "declaración de violación de Derechos Humanos de niños, niñas y adolescentes" por la situación de la casa hogar.
En diálogo con Télam, el periodista guatemalteco Marvin del Cid contó que este centro "fue inaugurado durante la presidencia de Álvaro Colón (2008-2012) para albergar a niñas abandonadas por sus madres y adolescentes con problemas de drogas o de rebeldía, quienes eran internadas allí porque sus padres pedían apoyo".
"La casa trabajaba bien y cumplía sus objetivos hasta el 2013, cuando comienza a incorporar adolescentes en conflicto con la ley penal", continuó del Cid.
El martes, un día antes del incendio, la PDH recibió un llamado de la secretaría de Bienestar solicitando apoyo porque se habían escapado 60 menores.
"Los monitores no querían que estos adolescentes regresaran porque eran conflictivos, hacia la tarde noche nos retiramos a documentar y hacer diligencias de denuncias y ayer muy temprano recibimos la llamada alertando sobre el incendio", reseñó Paredes.
En el Congreso de Guatemala trabajaba esta tarde una comisión de investigación para pedir a "todas las instituciones responsables que rindan cuentas" y, ante la versión de que las adolescentes "se habían encerrado solas" luego de iniciar el incendio, la PDH trataba de determinar "qué ocurrió anoche", agregó el funcionario.
Por otra parte, la justicia local ya dispuso el traslado de 150 de los internos priorizando a "los niños más pequeños" y los que tienen "alguna discapacidad", al tiempo que la PDH brinda asistencia psicológica en los hospitales donde están las jóvenes heridas y en los hogares a los que los niños fueron trasladados.
Otras veinte chicas de entre 12 y 17 años permanecen internadas en grave estado en los hospitales Roosevelt y San Juan de Dios, algunas con quemaduras de cuarto grado y con alto riesgo de mortalidad, señala un despacho de la agencia Efe.
Las autoridades "aún no brindaron un informe sobre la identidad de las víctimas y tampoco hay un listado de los niños internados" en ese centro, dijo a Télam Abner Paredes, defensor de la Juventud de la Procuraduría de Derechos Humanos (PDH) guatemalteca.
El incendio ocurrió en el Hogar Seguro Virgen de la Asunción, ubicado a unos 25 kilómetros al sureste de ciudad de Guatemala, en el municipio de San José Pinula.
El director del hospital San Juan de Dios, Juan Antonio Villeda, afirmó que atendieron a 16 "menores con quemaduras de segundo y tercer grado" y añadió que "en algunos casos el problema se extendió a las vías respiratorias".
"Algunas han sido operadas, otras tienen aparatos para respirar. Habilitamos un área donde están bajo atención médica", explicó el funcionario.
"Estamos abastecidos con insumos básicos que permiten brindar atención adecuada a los pacientes", explicó el centro de salud a través de un comunicado, consignó el diario local Prensa Libre.
Por la declaración de algunos internos y de las autoridades, se supo que los menores de edad comenzaron el fuego al incendiar las colchonetas que usaban de cama, pero luego las llamas se propagaron y se tornaron incontrolables.
Las adolescentes que quedaron atrapadas en la habitación donde comenzó el fuego murieron calcinadas, en medio de la protesta por los abusos sexuales y físicos que realizaban en el Día Internacional de la Mujer.
La institución, a cargo de la Secretaría de Bienestar Social, alojaba a unos 748 menores (varones y mujeres), aunque su capacidad es de 400, y ante esta tragedia el Gobierno destituyó al director y decretó tres días de luto oficial.
El año pasado, 47 jóvenes se fugaron de la casa hogar, lo que llevó a la Secretaría de la Presidencia -que está encargada de la guardia y custodia de los menores- a desplazar al entonces director del instituto.
La PDH había denunciado en 2016 ante la justicia local y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), la posible conexión entre algunos miembros del personal del hogar y una red de trata.
"Por reiteradas fugas, la PDH visitó la casa hogar y estableció la posible participación de miembros del personal en una red de trata, dio cuenta al Ministerio Público Fiscal y en octubre de 2016 la jueza sexta (en Primera instancia Penal) Silvia de León ordena hacer una investigación", explicó Paredes a Télam.
Y continuó: "Previendo una situación de gravedad y porque las adolescentes seguían escapando, la PDH decidió el 11 de noviembre de 2016 remitir una solicitud de medidas cautelares a la CIDH,", aunque "a la fecha no tenemos respuesta", dijo.
Las advertencias de la Procuradoría habían comenzado en 2013, cuando hizo una "declaración de violación de Derechos Humanos de niños, niñas y adolescentes" por la situación de la casa hogar.
En diálogo con Télam, el periodista guatemalteco Marvin del Cid contó que este centro "fue inaugurado durante la presidencia de Álvaro Colón (2008-2012) para albergar a niñas abandonadas por sus madres y adolescentes con problemas de drogas o de rebeldía, quienes eran internadas allí porque sus padres pedían apoyo".
"La casa trabajaba bien y cumplía sus objetivos hasta el 2013, cuando comienza a incorporar adolescentes en conflicto con la ley penal", continuó del Cid.
El martes, un día antes del incendio, la PDH recibió un llamado de la secretaría de Bienestar solicitando apoyo porque se habían escapado 60 menores.
"Los monitores no querían que estos adolescentes regresaran porque eran conflictivos, hacia la tarde noche nos retiramos a documentar y hacer diligencias de denuncias y ayer muy temprano recibimos la llamada alertando sobre el incendio", reseñó Paredes.
En el Congreso de Guatemala trabajaba esta tarde una comisión de investigación para pedir a "todas las instituciones responsables que rindan cuentas" y, ante la versión de que las adolescentes "se habían encerrado solas" luego de iniciar el incendio, la PDH trataba de determinar "qué ocurrió anoche", agregó el funcionario.
Por otra parte, la justicia local ya dispuso el traslado de 150 de los internos priorizando a "los niños más pequeños" y los que tienen "alguna discapacidad", al tiempo que la PDH brinda asistencia psicológica en los hospitales donde están las jóvenes heridas y en los hogares a los que los niños fueron trasladados.