"Argentina está logrando avances para resolver varios desequilibrios macroeconómicos en el país, al mismo tiempo que reconstruye gradualmente su credibilidad y mejora el debilitado marco institucional en general", sostuvo el informe difundido desde Nueva York.
El informe prevé que la inflación anual 2017 baje a 20% y "que siga una tendencia descendente gradual", así como un crecimiento de la economía de 3% promedio en los tres años siguientes.
"Subimos nuestras calificaciones crediticias soberanas de largo plazo de Argentina a 'B' desde 'B-' y afirmamos nuestras calificaciones soberanas de corto plazo en 'B'. También subimos nuestra evaluación de riesgo de transferencia y convertibilidad (T&C) a 'B+' desde 'B-'", precisó.
La mejor calificación de la Argentina se basa en general en los "avances logrados en la política económica" para "resolver los importantes desequilibrios económicos y restaurar la credibilidad de las políticas del país", afirmó el informe de la consultora.
"En el largo plazo", destacó S&P, "uno de los principales desafíos de Argentina continua siendo tratar de evitar su patrón histórico de elevada volatilidad en su desempeño económico", y con un contexto de "escenario político todavía sumamente polarizado" la consultora estimó que "el PBI per cápita de Argentina medido en dólares se ubique en u$s 13.700 en promedio durante los próximos dos años".
En su análisis, S&P menciona como factores positivos la emisión global de bonos por U$S 22.000 millones el año pasado y otros U$S 7.400 millones en lo que va de este año, la "reducción de la inflación a un esperado 20% y 15% en 2017 y 2018", el "ajuste de las tarifas de servicios públicos a su costo subyacente", así como los "objetivos fiscales de mediado plazo" que incrementaron "la transparencia y la rendición de cuentas".
Subrayó que "se reconstituyó la agencia estadística del gobierno, Indec, facilitando la publicación de información confiable sobre variables económicas clave".
Standard and Poors no ignora que el "gobierno continuará enfrentando desafíos políticos y sociales para implementar su plan económico", y consideró que "mantener el difícil equilibrio de las política requerirá un manejo hábil".
"Argentina está logrando avances para resolver varios desequilibrios macroeconómicos en el país, al mismo tiempo que reconstruye gradualmente su credibilidad y mejora el debilitado marco institucional en general", sostuvo el informe difundido desde Nueva York.
El informe prevé que la inflación anual 2017 baje a 20% y "que siga una tendencia descendente gradual", así como un crecimiento de la economía de 3% promedio en los tres años siguientes.
"Subimos nuestras calificaciones crediticias soberanas de largo plazo de Argentina a 'B' desde 'B-' y afirmamos nuestras calificaciones soberanas de corto plazo en 'B'. También subimos nuestra evaluación de riesgo de transferencia y convertibilidad (T&C) a 'B+' desde 'B-'", precisó.
La mejor calificación de la Argentina se basa en general en los "avances logrados en la política económica" para "resolver los importantes desequilibrios económicos y restaurar la credibilidad de las políticas del país", afirmó el informe de la consultora.
"En el largo plazo", destacó S&P, "uno de los principales desafíos de Argentina continua siendo tratar de evitar su patrón histórico de elevada volatilidad en su desempeño económico", y con un contexto de "escenario político todavía sumamente polarizado" la consultora estimó que "el PBI per cápita de Argentina medido en dólares se ubique en u$s 13.700 en promedio durante los próximos dos años".
En su análisis, S&P menciona como factores positivos la emisión global de bonos por U$S 22.000 millones el año pasado y otros U$S 7.400 millones en lo que va de este año, la "reducción de la inflación a un esperado 20% y 15% en 2017 y 2018", el "ajuste de las tarifas de servicios públicos a su costo subyacente", así como los "objetivos fiscales de mediado plazo" que incrementaron "la transparencia y la rendición de cuentas".
Subrayó que "se reconstituyó la agencia estadística del gobierno, Indec, facilitando la publicación de información confiable sobre variables económicas clave".
Standard and Poors no ignora que el "gobierno continuará enfrentando desafíos políticos y sociales para implementar su plan económico", y consideró que "mantener el difícil equilibrio de las política requerirá un manejo hábil".