Decisión de vida: la historia de una donación

A Lucas Reyes lo asesinaron en el barrio INTA de Trelew. En medio del dolor Zulma Díaz, su madre, decidió donar su órganos. Un relato familiar conmovedor.

09 ABR 2017 - 20:49 | Actualizado

Por Lorena Leeming

Le digo a la gente que aprendamos a ser solidarios. Por más que nos duela el alma. Pero si un pedacito de la persona que se nos va sirve para otra, ya es  mucho. Tenemos que tomar la decisión rápido. Se pueden salvar muchas vidas. Pero tiene que ser rápido”. El relato es de Zulma Díaz. La mamá de Lucas Reyes, el joven que fue baleado en el barrio Inta de Trelew y falleció. Su familia donó los órganos.
Zulma, en medio de tanto dolor por la pérdida de su hijo tuvo la valentía de pensar en el prójimo. Su familia salvó otras vidas accediendo a la donación. No lo dudaron. Fueron días difíciles. Los peores de su vida. Pero tiene la tranquilidad en el alma de que hizo lo que su corazón le indicó. “Una vez lo hablamos de la donación con Lucas cuando hicimos los trámites. Le pregunté si había hecho los documentos. Le pregunté si le habían  preguntado si donaba. Me dijo que no. Y yo le contestó que podía donar todo, pero que la vista no le iba a servir a nadie. El, era corto de vista. Él se reía. Nunca pensé que me iba a pasar éste”. Recordó la anécdota con una sonrisa.
“Creí que mi hijo se curaba”

Aseguró la mujer que el referente en Chubut del Incucai Sebastián Kidd fue quien la contactó y le explicó los términos de la donación. Fue quien le comunicó que ya nada podía hacerse por su hijo. Le preguntó si estábamos de acuerdo en donar.
“A mí me costó. Yo pensaba que se iba a curar. Que mi hijo iba a salir adelante. Yo creía que me lo iba a llevar a mi casa”.
Y agregó: “El doctor me habló muy bien. Tiene muy buena forma de hablar. Y decidí que sí. El papá y la hermana también dijeron que sí. A mí me costaba. Yo no caía. Creía que mí hijo salía adelante. En el momento que le pegaron el tiro murió en el acto. Sólo le funcionaba el corazón. En el hospital lo atendieron enseguida. Pero los médicos ya sabían que no tenía posibilidades. Fueron 4 días de tortura. Pero seguimos firmes. No se podía hacer más rápido porque el clima lo impedía”.
Su hijo se fue pero está segura de que otras personas podrán salir adelante gracias a la decisión que ella y su familia tomaron. “Tenemos la tranquilidad que se llevaron los órganos para quienes lo están esperando. Que ojalá Dios los ayude y sirva”.
Justicia

Zulma aún no cree lo que vivió en su propia casa. A su hijo lo mataron estando dentro de la cocina.
“Espero justicia. Lo mataron dentro de mi casa, haciendo la comida. Tenía una caja de puré de tomate en la mano. No encontró seguridad en su propia casa. No tuvo reacción a nada. El segundo tiro le dio en la cabeza”, relató.
Detalles

Reveló la mamá de la víctima que el imputado por el crimen de su hijo entró a la casa, se llevó el televisor y que además, se quiso llevar la computadora.
“No pudo. La dejó tirada. Quiero que pague el asesino de mi hijo. No estaba haciendo nada. Estaba en su casa”.
Para finalizar, se dirigió a quienes estén pasando por una situación similar.
“Le digo a la gente que aprendamos a ser solidarios. Por más que nos duela el alma. Pero si un pedacito de la persona que se va sirve para otra, ya es  mucho. Tenemos que tomar la decisión rápido. Se pueden salvar muchas vidas. Pero tiene que ser rápido”, concluyó. #

 

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09 ABR 2017 - 20:49

Por Lorena Leeming

Le digo a la gente que aprendamos a ser solidarios. Por más que nos duela el alma. Pero si un pedacito de la persona que se nos va sirve para otra, ya es  mucho. Tenemos que tomar la decisión rápido. Se pueden salvar muchas vidas. Pero tiene que ser rápido”. El relato es de Zulma Díaz. La mamá de Lucas Reyes, el joven que fue baleado en el barrio Inta de Trelew y falleció. Su familia donó los órganos.
Zulma, en medio de tanto dolor por la pérdida de su hijo tuvo la valentía de pensar en el prójimo. Su familia salvó otras vidas accediendo a la donación. No lo dudaron. Fueron días difíciles. Los peores de su vida. Pero tiene la tranquilidad en el alma de que hizo lo que su corazón le indicó. “Una vez lo hablamos de la donación con Lucas cuando hicimos los trámites. Le pregunté si había hecho los documentos. Le pregunté si le habían  preguntado si donaba. Me dijo que no. Y yo le contestó que podía donar todo, pero que la vista no le iba a servir a nadie. El, era corto de vista. Él se reía. Nunca pensé que me iba a pasar éste”. Recordó la anécdota con una sonrisa.
“Creí que mi hijo se curaba”

Aseguró la mujer que el referente en Chubut del Incucai Sebastián Kidd fue quien la contactó y le explicó los términos de la donación. Fue quien le comunicó que ya nada podía hacerse por su hijo. Le preguntó si estábamos de acuerdo en donar.
“A mí me costó. Yo pensaba que se iba a curar. Que mi hijo iba a salir adelante. Yo creía que me lo iba a llevar a mi casa”.
Y agregó: “El doctor me habló muy bien. Tiene muy buena forma de hablar. Y decidí que sí. El papá y la hermana también dijeron que sí. A mí me costaba. Yo no caía. Creía que mí hijo salía adelante. En el momento que le pegaron el tiro murió en el acto. Sólo le funcionaba el corazón. En el hospital lo atendieron enseguida. Pero los médicos ya sabían que no tenía posibilidades. Fueron 4 días de tortura. Pero seguimos firmes. No se podía hacer más rápido porque el clima lo impedía”.
Su hijo se fue pero está segura de que otras personas podrán salir adelante gracias a la decisión que ella y su familia tomaron. “Tenemos la tranquilidad que se llevaron los órganos para quienes lo están esperando. Que ojalá Dios los ayude y sirva”.
Justicia

Zulma aún no cree lo que vivió en su propia casa. A su hijo lo mataron estando dentro de la cocina.
“Espero justicia. Lo mataron dentro de mi casa, haciendo la comida. Tenía una caja de puré de tomate en la mano. No encontró seguridad en su propia casa. No tuvo reacción a nada. El segundo tiro le dio en la cabeza”, relató.
Detalles

Reveló la mamá de la víctima que el imputado por el crimen de su hijo entró a la casa, se llevó el televisor y que además, se quiso llevar la computadora.
“No pudo. La dejó tirada. Quiero que pague el asesino de mi hijo. No estaba haciendo nada. Estaba en su casa”.
Para finalizar, se dirigió a quienes estén pasando por una situación similar.
“Le digo a la gente que aprendamos a ser solidarios. Por más que nos duela el alma. Pero si un pedacito de la persona que se va sirve para otra, ya es  mucho. Tenemos que tomar la decisión rápido. Se pueden salvar muchas vidas. Pero tiene que ser rápido”, concluyó. #

 


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