“Yoko”, la embajadora valletana en Boca

Johana Barrera es oriunda de Puerto Madryn. Surgida de la Liga del Valle, hoy es delantera titular en la primera división de Boca Juniors. Es la máxima referencia del fútbol femenino a nivel provincial. A sus 26 años sueña con vestir la camiseta de la Selección Nacional.

Johana Barrera en acción ante El Porvenir. Marcó un gol el fin de semana. Es delantera titular de Boca, equipo dirigido por Cristian Meloni.
26 ABR 2017 - 21:31 | Actualizado

Por Francisco Caputo.

Es la jugadora referente del fútbol femenino en Chubut. Es respetada e inclusive idolatrada por las futbolistas locales. Esta delantera oriunda de Puerto Madryn es el espejo de ellas. Hay motivos. No sin sacrificio, Johana Barrera superó adversidades de la mano del amor y fichó por Boca. Desde Buenos Aires, “Yoko”, dialogó en exclusiva con Jornada para relatar su historia.

El amor vence al desánimo

La vida es una tómbola especial. Barrera se probó en River en 2014. La falta de alojamiento fijo, tras tres meses en Buenos Aires, frustró el pase y volvió a Deportivo Madryn. Pero en octubre del año pasado, tras superar las pruebas gestionadas por J.J. Moreno, donde jugaba en aquel entonces, se incorporó al “Xeneize”, donde es titular.

“Tras lo de River, me volví con mezclas de sensaciones por la experiencia que viví y frustrada por tener que volverme. Pero María Lozano, mi pareja desde hace diez años, me apoyó en todo momento”, indicó la delantera.

“Lo que estoy viviendo, creo que nunca lo hubiese logrado sin ella. Seguí insistiendo y se dio”, relató. “Tengo a mi pareja que siempre me apoyó y no me dejó renunciar a lo que tanto soñaba”, mencionó. “Nos casamos en enero. Ella está en Madryn. Pero me acompaña siempre”, comentó sonriente.

“Yoko”, quien pretende trabajar y estudiar la carrera de nutrición o educación física en breve, vive en la residencia que Boca posee para las futbolistas reclutadas en el Interior. Tras su prueba, en la pensión quedaba un solo lugar disponible, aquel que el destino tenía reservado para ella.

Una cuestión de género

Barrera asiste a las tres prácticas semanales de Boca, el club con más títulos femeninos, para luego jugar cada fin de semana. “Me pude ganar un lugar entre las titulares. Intento superarme y mejorar en cada entrenamiento”, explicó. El próximo sábado a las 15, emerge River, el puntero, como adversario. Será un duelo de primero contra segundo.

En Argentina, donde el fútbol es una cuestión de género, Barrera narra sus vivencias al respecto.

“Para un varón, jugar en Buenos Aires es complicado. Para una mujer, es tres veces más difícil. No es profesional el femenino”, puntualizó. “Si bien tengo todas las comodidades en Boca, no puedo decirte que vivo del fútbol”, expresó la atacante 26 años.

Las selecciones

Hay falencias de estructura que complican el desarrollo del fútbol femenino. La selección nacional no figura en el ranking FIFA al no haber tenido competencia por más de 18 meses.

“A nivel nacional, el fútbol femenino está muy olvidado, hasta te diría que hubo falta de interés por los que organizan los torneos”, narró. Pero se mostró esperanzada. “Hubo muchos cambios en AFA. Se renovó la conducción del femenino. Tengo esperanza en que haya cambios”, mencionó. “Sueño con la Selección Argentina, por supuesto. Mentiría si dijera lo contrario”, pronunció.

Mientras compite en Buenos Aires, desea integrar un combinado que ya conoce. “Yoko” mostró interés en volver al seleccionado de la Liga del Valle. Disputó el Nacional jugado en Chubut en 2014, donde marcó un gol. Ahora, le gustaría volver a competir con la casaca de las “Valletanas”, junto a las jugadoras que la tienen en tan alta estima.

“Me llena de orgullo ese cariño. Me costó mucho llegar donde estoy, son años que vengo insistiendo. Ojalá muchas como yo se animen”, dijo.

“Uno siempre quiere representar a su selección, a su tierra. En su momento, recibí una sanción por hacerlo. Creo que fue excesiva. No merecíamos ese castigo. Fue muy frustrante para mí y para otras chicas”, detalló la goleadora.

Levantó barreras

Indiscutiblemente. Johana Barrera progresó. En Puerto Madryn, trabajaba en la despensa “Confites” para sostenerse. Cambiaba horarios para poder entrenarse y jugar cada fin de semana. Ella agradece la buena predisposición del comercio portuario. Hoy, es figura en Buenos Aires en un equipo referencial.

Tras vencer todo tipo de murallas, ella es titular en Boca y se esperanza con la Selección Nacional. Johana Barrera, la embajadora del fútbol femenino valletano que está haciendo de su vida un sueño cumplido.

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Johana Barrera en acción ante El Porvenir. Marcó un gol el fin de semana. Es delantera titular de Boca, equipo dirigido por Cristian Meloni.
26 ABR 2017 - 21:31

Por Francisco Caputo.

Es la jugadora referente del fútbol femenino en Chubut. Es respetada e inclusive idolatrada por las futbolistas locales. Esta delantera oriunda de Puerto Madryn es el espejo de ellas. Hay motivos. No sin sacrificio, Johana Barrera superó adversidades de la mano del amor y fichó por Boca. Desde Buenos Aires, “Yoko”, dialogó en exclusiva con Jornada para relatar su historia.

El amor vence al desánimo

La vida es una tómbola especial. Barrera se probó en River en 2014. La falta de alojamiento fijo, tras tres meses en Buenos Aires, frustró el pase y volvió a Deportivo Madryn. Pero en octubre del año pasado, tras superar las pruebas gestionadas por J.J. Moreno, donde jugaba en aquel entonces, se incorporó al “Xeneize”, donde es titular.

“Tras lo de River, me volví con mezclas de sensaciones por la experiencia que viví y frustrada por tener que volverme. Pero María Lozano, mi pareja desde hace diez años, me apoyó en todo momento”, indicó la delantera.

“Lo que estoy viviendo, creo que nunca lo hubiese logrado sin ella. Seguí insistiendo y se dio”, relató. “Tengo a mi pareja que siempre me apoyó y no me dejó renunciar a lo que tanto soñaba”, mencionó. “Nos casamos en enero. Ella está en Madryn. Pero me acompaña siempre”, comentó sonriente.

“Yoko”, quien pretende trabajar y estudiar la carrera de nutrición o educación física en breve, vive en la residencia que Boca posee para las futbolistas reclutadas en el Interior. Tras su prueba, en la pensión quedaba un solo lugar disponible, aquel que el destino tenía reservado para ella.

Una cuestión de género

Barrera asiste a las tres prácticas semanales de Boca, el club con más títulos femeninos, para luego jugar cada fin de semana. “Me pude ganar un lugar entre las titulares. Intento superarme y mejorar en cada entrenamiento”, explicó. El próximo sábado a las 15, emerge River, el puntero, como adversario. Será un duelo de primero contra segundo.

En Argentina, donde el fútbol es una cuestión de género, Barrera narra sus vivencias al respecto.

“Para un varón, jugar en Buenos Aires es complicado. Para una mujer, es tres veces más difícil. No es profesional el femenino”, puntualizó. “Si bien tengo todas las comodidades en Boca, no puedo decirte que vivo del fútbol”, expresó la atacante 26 años.

Las selecciones

Hay falencias de estructura que complican el desarrollo del fútbol femenino. La selección nacional no figura en el ranking FIFA al no haber tenido competencia por más de 18 meses.

“A nivel nacional, el fútbol femenino está muy olvidado, hasta te diría que hubo falta de interés por los que organizan los torneos”, narró. Pero se mostró esperanzada. “Hubo muchos cambios en AFA. Se renovó la conducción del femenino. Tengo esperanza en que haya cambios”, mencionó. “Sueño con la Selección Argentina, por supuesto. Mentiría si dijera lo contrario”, pronunció.

Mientras compite en Buenos Aires, desea integrar un combinado que ya conoce. “Yoko” mostró interés en volver al seleccionado de la Liga del Valle. Disputó el Nacional jugado en Chubut en 2014, donde marcó un gol. Ahora, le gustaría volver a competir con la casaca de las “Valletanas”, junto a las jugadoras que la tienen en tan alta estima.

“Me llena de orgullo ese cariño. Me costó mucho llegar donde estoy, son años que vengo insistiendo. Ojalá muchas como yo se animen”, dijo.

“Uno siempre quiere representar a su selección, a su tierra. En su momento, recibí una sanción por hacerlo. Creo que fue excesiva. No merecíamos ese castigo. Fue muy frustrante para mí y para otras chicas”, detalló la goleadora.

Levantó barreras

Indiscutiblemente. Johana Barrera progresó. En Puerto Madryn, trabajaba en la despensa “Confites” para sostenerse. Cambiaba horarios para poder entrenarse y jugar cada fin de semana. Ella agradece la buena predisposición del comercio portuario. Hoy, es figura en Buenos Aires en un equipo referencial.

Tras vencer todo tipo de murallas, ella es titular en Boca y se esperanza con la Selección Nacional. Johana Barrera, la embajadora del fútbol femenino valletano que está haciendo de su vida un sueño cumplido.


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