Dos chicas se bajaron de un micro porque viajaba un femicida

Son dos estudiantes de Bahía Blanca que viajaban hacia La Plata. Cuando subieron al colectivo de largadistancia, notaron que en el mismo iba Pablo Victor Cuchán, un hombre que en 2004 asesinó y descuartizó a su novia. El hombre buscaba pareja hace pocos días a través de Tinder.

Pablo Victor Cuchán fue condenado a 11 años de cárcel por el femicidio de Luciana Moretti.
15 MAY 2017 - 21:11 | Actualizado

Dos estudiantes que iban a viajar a La Plata en un colectivo de larga distancia decidieron no hacerlo tras comprobar que con ellas viajaba un hombre condenado a 17 años de prisión por haber descuartizado y quemado a su novia en 2004 en la localidad bonaerense de Ingeniero White.
A pesar de la situación y las quejas de los familiares de los pasajeros que fue viralizada a través de las redes sociales, Pablo Victor Cuchán (30), abordó la unidad de la empresa Plusmar y viajó con destino a la capital provincial, pese a que no comunicó a la Justicia sobre el viaje.
El hombre se encuentra en libertad luego de haber estado 11 años en prisión por el crimen de Luciana Moretti (15), ya que la sentencia no está firme y tuvo buena conducta dentro de la cárcel.
A raíz de tomar estado público el episodio la abogada de la familia de Moretti adelantó que presentará un escrito ante el Tribunal 1 de Bahía Blanca para que se revoque su libertad.
El pasado 15 de abril el hombre había publicado una foto suya en un perfil de la aplicación Tinder -utilizada para buscar pareja y concretar citas amorosas- y también abrió una cuenta en Facebook.
Dicha situación provocó distintas reacciones por parte de la comunidad como así también repudio por parte de los familiares de Moretti.
El último episodio ocurrió anoche cuando familiares de los pasajeros reconocieron a Cuchán en momentos en que se hallaba sentado en la unidad de Plusmar que partía poco después de las 23.
Fue así que dos estudiantes decidieron no viajar en el mismo vehículo con el hombre y reclamaron junto a sus familiares y otras personas que Cuchán no esté en el colectivo de pasajeros.
A pesar de las quejas y los reclamos ante los choferes y hasta dos policías que acudieron para ver lo que pasaba, el colectivo partió con el condenado como pasajero.
Al respecto Ana Canullo, madre de una de las estudiantes que decidió no viajar, expresó hoy a Télam que su "hija ya había subido al colectivo, viajaba adelante" y la estaba despidiendo cuando se dieron "cuenta que Cuchán iba a subir al colectivo".
"Empecé a gritar porque estaba muy nerviosa y mi hija cuando se dio cuenta se bajó", dijo la mujer, quien agregó: "Los choferes nos dijeron que no lo podían bajar porque no tenían facultades para eso y después vino la Policía pero como había pagado el pasaje no pudieron obligarlo a bajar".
Canullo, quien además es dirigente del SUTEBA local, afirmó que "evidentemente los que queda hacer es una condena social porque a él lo dejaron libre". 
"A veces las reacciones de la gente no son las que uno espera", comentó la mujer en referencia que sólo su hija y otra estudiante decidieron no viajar y postergarlo para hoy.
Por su parte, Viviana Lozano, abogada de la familia Moretti, expresó hoy a Télam que estuvieron en el Tribunal 1, donde les dijeron que el hombre "no había pedido la autorización", por lo que calificó a la situación como "una vergüenza", tras lo cual realizarán "una presentación para anoticiar formalmente la inconducta por parte de él".
"Además solicitaremos una vez más que se revoque automáticamente la libertad que le dieron", puntualizó.
El crimen de Luciana fue cometido en octubre de 2004, cuando la adolescente fue descuartizada y las partes de su cuerpo quemadas en la parrilla de la casa de Cuchán, en Ingeniero White.
En 2007, el Tribunal en lo Criminal (TOC) 1 de Bahía Blanca condenó al novio de la víctima a 18 años de prisión pero en 2010 el Tribunal de Casación bonaerense redujo la pena a 17 y en 2013 la Suprema Corte de Justicia provincial dispuso la nulidad parcial del fallo y ordenó que se dicte una nueva sentencia con otra pena.
Tras varios pedidos de excarcelación, el TOC 1 bahiense le otorgó la libertad hasta que la sentencia quede firme y dispuso que fije domicilio en el ámbito de ese departamento judicial y se presente ante el tribunal cada 15 días.
Además, Cuchán debe respetar el régimen del Patronato de Liberados, tener un trabajo, no cometer ningún delito y someterse a un tratamiento psicológico.

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Pablo Victor Cuchán fue condenado a 11 años de cárcel por el femicidio de Luciana Moretti.
15 MAY 2017 - 21:11

Dos estudiantes que iban a viajar a La Plata en un colectivo de larga distancia decidieron no hacerlo tras comprobar que con ellas viajaba un hombre condenado a 17 años de prisión por haber descuartizado y quemado a su novia en 2004 en la localidad bonaerense de Ingeniero White.
A pesar de la situación y las quejas de los familiares de los pasajeros que fue viralizada a través de las redes sociales, Pablo Victor Cuchán (30), abordó la unidad de la empresa Plusmar y viajó con destino a la capital provincial, pese a que no comunicó a la Justicia sobre el viaje.
El hombre se encuentra en libertad luego de haber estado 11 años en prisión por el crimen de Luciana Moretti (15), ya que la sentencia no está firme y tuvo buena conducta dentro de la cárcel.
A raíz de tomar estado público el episodio la abogada de la familia de Moretti adelantó que presentará un escrito ante el Tribunal 1 de Bahía Blanca para que se revoque su libertad.
El pasado 15 de abril el hombre había publicado una foto suya en un perfil de la aplicación Tinder -utilizada para buscar pareja y concretar citas amorosas- y también abrió una cuenta en Facebook.
Dicha situación provocó distintas reacciones por parte de la comunidad como así también repudio por parte de los familiares de Moretti.
El último episodio ocurrió anoche cuando familiares de los pasajeros reconocieron a Cuchán en momentos en que se hallaba sentado en la unidad de Plusmar que partía poco después de las 23.
Fue así que dos estudiantes decidieron no viajar en el mismo vehículo con el hombre y reclamaron junto a sus familiares y otras personas que Cuchán no esté en el colectivo de pasajeros.
A pesar de las quejas y los reclamos ante los choferes y hasta dos policías que acudieron para ver lo que pasaba, el colectivo partió con el condenado como pasajero.
Al respecto Ana Canullo, madre de una de las estudiantes que decidió no viajar, expresó hoy a Télam que su "hija ya había subido al colectivo, viajaba adelante" y la estaba despidiendo cuando se dieron "cuenta que Cuchán iba a subir al colectivo".
"Empecé a gritar porque estaba muy nerviosa y mi hija cuando se dio cuenta se bajó", dijo la mujer, quien agregó: "Los choferes nos dijeron que no lo podían bajar porque no tenían facultades para eso y después vino la Policía pero como había pagado el pasaje no pudieron obligarlo a bajar".
Canullo, quien además es dirigente del SUTEBA local, afirmó que "evidentemente los que queda hacer es una condena social porque a él lo dejaron libre". 
"A veces las reacciones de la gente no son las que uno espera", comentó la mujer en referencia que sólo su hija y otra estudiante decidieron no viajar y postergarlo para hoy.
Por su parte, Viviana Lozano, abogada de la familia Moretti, expresó hoy a Télam que estuvieron en el Tribunal 1, donde les dijeron que el hombre "no había pedido la autorización", por lo que calificó a la situación como "una vergüenza", tras lo cual realizarán "una presentación para anoticiar formalmente la inconducta por parte de él".
"Además solicitaremos una vez más que se revoque automáticamente la libertad que le dieron", puntualizó.
El crimen de Luciana fue cometido en octubre de 2004, cuando la adolescente fue descuartizada y las partes de su cuerpo quemadas en la parrilla de la casa de Cuchán, en Ingeniero White.
En 2007, el Tribunal en lo Criminal (TOC) 1 de Bahía Blanca condenó al novio de la víctima a 18 años de prisión pero en 2010 el Tribunal de Casación bonaerense redujo la pena a 17 y en 2013 la Suprema Corte de Justicia provincial dispuso la nulidad parcial del fallo y ordenó que se dicte una nueva sentencia con otra pena.
Tras varios pedidos de excarcelación, el TOC 1 bahiense le otorgó la libertad hasta que la sentencia quede firme y dispuso que fije domicilio en el ámbito de ese departamento judicial y se presente ante el tribunal cada 15 días.
Además, Cuchán debe respetar el régimen del Patronato de Liberados, tener un trabajo, no cometer ningún delito y someterse a un tratamiento psicológico.


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