Desde las primeras horas del sábado los habitantes de Cholila y Epuyén sufren interrupciones en el servicio de energía eléctrica debido al temporal.
La nieve caída en la Cordillera afectó la línea que alimenta Epuyén y Cholila en la zona de El Coihue. Los problemas empezaron a las 5.40 del sábado, cuando debido a la nevada en esa zona cayeron árboles sobre la línea.
La demora en las reparaciones estaría directamente ligadas a que los operarios de servicios públicos de ambas localidades no tendrían el equipamiento en condiciones para poder trabajar en el temporal.
Según supo Jornada, en la delegación cordillerana de la Dirección de Servicios Públicos tienen fuera de servicio el único vehículo con el que cuenta, en tanto que en Epuyén cuentan con una Toyota año 2004 cuyas cubiertas “están lisas, parece para correr en Fórmula 1”, confío una de las fuentes.
Algunos operarios reconocieron que “están juntando unos mangos para cargar combustible”, ya que no tienen vales de combustible y así poder llegar hasta el lugar para intentar sacar los árboles.
“La situación ya nos está superando y no vamos a poder garantizar la continuidad del servicio. Se acabaron los materiales usados para reparar líneas y no tenemos proveedor ni nadie que nos fíe nada”, confío un operario que pidió no ser identificado.#
Desde las primeras horas del sábado los habitantes de Cholila y Epuyén sufren interrupciones en el servicio de energía eléctrica debido al temporal.
La nieve caída en la Cordillera afectó la línea que alimenta Epuyén y Cholila en la zona de El Coihue. Los problemas empezaron a las 5.40 del sábado, cuando debido a la nevada en esa zona cayeron árboles sobre la línea.
La demora en las reparaciones estaría directamente ligadas a que los operarios de servicios públicos de ambas localidades no tendrían el equipamiento en condiciones para poder trabajar en el temporal.
Según supo Jornada, en la delegación cordillerana de la Dirección de Servicios Públicos tienen fuera de servicio el único vehículo con el que cuenta, en tanto que en Epuyén cuentan con una Toyota año 2004 cuyas cubiertas “están lisas, parece para correr en Fórmula 1”, confío una de las fuentes.
Algunos operarios reconocieron que “están juntando unos mangos para cargar combustible”, ya que no tienen vales de combustible y así poder llegar hasta el lugar para intentar sacar los árboles.
“La situación ya nos está superando y no vamos a poder garantizar la continuidad del servicio. Se acabaron los materiales usados para reparar líneas y no tenemos proveedor ni nadie que nos fíe nada”, confío un operario que pidió no ser identificado.#