Pese a que está prohibida esa práctica, es sabido que esa metodología se aplica producto del accionar indebido de las habitantes de dicho parque.
A los efectos de solucionar el tema, el funcionario provincial confirmó que no se permitirán más vertidos y que se tomarán las medidas necesarias para sellar las cañerías que desembocan al agua.
Agulleiro manifestó que tras la recorrida confirmó in situ las versiones que referenciaban la existencia de “varios vuelcos ilegales, algunos de industriales y otros que parecen más cloacales”. La situación sería mucho más compleja aún debido a que desde la puesta en marcha de la planta de tratamiento de la cota 130 no se pueden realizar más.
El ministro ratificó la decisión de abordar todas las temáticas que refieren al cuidado y preservación de la naturaleza y del golfo. Adelantó que las empresas que “estén legales, hagan bien las cosas y cumplan con los parámetros que se deben cumplir para no afectar el golfo seguirán funcionando”. Advirtió que con quienes estén por fuera de la ley se será extremadamente duro con las sanciones. “Las que están ilegales directamente se las va a clausurar y cementar el caño para que no haya más descargas”, en un medida que buscará poner punto final a la metodología observada por todos quienes acuden a esa zona.
Agulleiro recordó que un semestre antes se firmó un decreto para preservar las agua del Golfo Nuevo y eliminar los vertidos, claves para preservar el ambiente. El ministro recalcó que “no nos interesa sancionar a nadie. Lo que queremos es resolver el problema ambiental que es el vuelco al golfo”.#
Pese a que está prohibida esa práctica, es sabido que esa metodología se aplica producto del accionar indebido de las habitantes de dicho parque.
A los efectos de solucionar el tema, el funcionario provincial confirmó que no se permitirán más vertidos y que se tomarán las medidas necesarias para sellar las cañerías que desembocan al agua.
Agulleiro manifestó que tras la recorrida confirmó in situ las versiones que referenciaban la existencia de “varios vuelcos ilegales, algunos de industriales y otros que parecen más cloacales”. La situación sería mucho más compleja aún debido a que desde la puesta en marcha de la planta de tratamiento de la cota 130 no se pueden realizar más.
El ministro ratificó la decisión de abordar todas las temáticas que refieren al cuidado y preservación de la naturaleza y del golfo. Adelantó que las empresas que “estén legales, hagan bien las cosas y cumplan con los parámetros que se deben cumplir para no afectar el golfo seguirán funcionando”. Advirtió que con quienes estén por fuera de la ley se será extremadamente duro con las sanciones. “Las que están ilegales directamente se las va a clausurar y cementar el caño para que no haya más descargas”, en un medida que buscará poner punto final a la metodología observada por todos quienes acuden a esa zona.
Agulleiro recordó que un semestre antes se firmó un decreto para preservar las agua del Golfo Nuevo y eliminar los vertidos, claves para preservar el ambiente. El ministro recalcó que “no nos interesa sancionar a nadie. Lo que queremos es resolver el problema ambiental que es el vuelco al golfo”.#