Trelew: por fallas de los policías y del fiscal dejaron libres a cinco acusados

La Fiscalía no pudo probar que hayan sido cinco los que actuaron en el robo de una cartera a la dueña de “Casa Dos Ramos”. El jueza emitió un duro fallo contra la actuación de la Policía y calificó de insuficiente la acción del fiscal. Quedaron todos libres, pese a que dos reconocieron su autoría.

De izquierda a derecha, el defensor Javier Allende, el juez penal Sergio Piñeda, el defensor Abdón Manyauik y el fiscal Fabián Moyano..
22 AGO 2017 - 21:25 | Actualizado

El juez de Trelew Sergio Piñeda, absolvió a cinco sujetos que la Fiscalía había involucrado en el robo de una cartera. El hecho sucedió el 30 de diciembre de 2016 a las afueras de la firma Casa Dos Ramos y la víctima fue la propietaria, a la que le rompieron un vidro de su camioneta para sustraerle el elemento.
La causa estuvo a cargo del fiscal Fabián Moyano. Los cinco llevados a juicio quedaron en libertad. El juez Piñeda le dio la razón a los defensores Javier Allende y Abdon Manyauik, quienes plantearon las desprolijidades de las actuaciones policiales y la falta de solvencia del fiscal a la hora de sostener la calificación.
Dos autores, también libres

Lo curioso es que dos de los cinco acusados reconocieron haber cometido el hecho, pero los otros tres -según queda demostrado en la sentencia- no tuvieron nada que ver. De hecho, la resolución da cuenta de que no se explica cómo los detienen en otro sector de la ciudad a bordo de otro auto.
 No hay en su contra “un hecho claro, preciso, circunstanciado, constitucionalmente aceptable para formular una imputación donde se les diga su conducta, con circunstancia de tiempo, lugar y ocasión de las que se les acusa”.
“Como pudo observar del alegato de apertura de la Fiscalía se habla genéricamente de un grupo y no se dice qué hizo cada uno, ni cómo fue el plan”, indicó Allende sobre Moyano.
“Se trabajó mal”

 Manyauik, en tanto, consideró que “esto se pudo haber resuelto con una probation por robo simple pero el fiscal quiso hacer una causa por robo agravado por ser en poblado y en banda en grado de tentativa. Pero quisimos ir a juicio para dejar al descubierto lo mal que se trabajó desde la Policía y desde la acusación fiscal”. Agregó que “tenemos a dos que admiten haber robado la cartera, y aparecen tres más detenidos en otro auto (un gol rojo demorado en la calle Cuba). No sé qué iban haciendo en el primer auto, se ve que iban aplaudiendo o alentando a los otros dos, es ridículo”, deslizó.
El defensor refirió además que se tuvo por probado que actuaron Maximiliano Schenring y Sandro Antelaf, pero que se intentó engrosar la autoría con otros tres que no tuvieron nada que ver. Como resultado de todo esto, nadie pagó por el hecho que sufrió la señora Dos Ramos.
“Sospechoso y lamentable”

El juez Piñeda en su resolución fue más que claro al dejar notar que no le cerró por ningún lado el caso planteado por la Fiscalía.
“Resulta sospechoso y lamentable para este juez analizar este caso, pues fueron muchos los empleados policiales involucrados en persecuciones y detenciones de distintas jurisdicciones y es de reconocer la rapidez de sus actuaciones a escasos minutos de cometido el hecho. Pero para nada el fin justifica los medios”.
“Las actas deben ser el fiel reflejo de lo sucedido -advirtió-, que se traduce en la concatenación de hechos, actos y conductas desplegadas, que no debería llevar a duda alguna y menos aún a sospechar sobre el proceder policial. En este caso, resultó en vano todo un gran operativo que no falló desde la logística, pero sí de la forma en que se documentara lo sucedido, alterando los hechos acecidos con respecto al elemento sustraído, del cual derivaron todas las demás consecuencias, persecuciones y secuestros”.
Sobre estos aspectos que señaló en su sentencia el juez, Manyauik dio a entender que al principal testigo, un empleado de la firma Dos Ramos, lo alejaron de la escena donde fue hallada la cartera, para plantar esa prueba en manos de los 3 detenidos tiempo después y que se los implicó en el caso. “Esto sí que es grave, que manipulen la escena. Habrá que ver qué pasó ahí”.
Duda

“Por lo expuesto -siguió el juez-, impera la duda de este magistrado, que no ha podio desvirtuar la Fiscalía y llegar al grado de certeza requerido para tener a los aquí traídos como autores del hecho que se les endilgara y llegar de esta manera a la aplicación de una condena”.
“Aún quienes se atribuyeron la autoría del mismo, como en el caso de Sandro Maximiliano Antelaf y Maximiliano Andrés Schnering, no se condice con la prueba recogida, en estas actuaciones, por tomar nada más el ejemplo de la cartera analizada en párrafos anteriores, como también la falta de elementos probatorios que permita tener certeza de cómo ocurrieron los hechos y poder llegar a los mismos por indicios o presunciones que de ninguna manera resultan unívocos la sola auto incriminación de los imputados no resulta suficiente”, dice la resolución de Piñeda.
“La absolución se impone, puesto que la prueba de cargo presentada por el Ministerio Público Fiscal ha resultado insuficiente como para arribar a un estado de certeza sobre la culpabilidad de los acusados, que permita destruir el estado de inocencia”, sentenció el juez que ordenó en ese mismo acto la libertad inmediata de los traídos a proceso.
Qué decía la Fiscalía

El fiscal Moyano había acusado que “Juan Ariel Faguada, Maximiliano Alvarino Sepúlveda, Matías Alejandro Alegría, Maximiliano Andrés Schering, y Sandro Maximiliano Antelaf, en forma organizada tomando todos participación en el hecho, con un plan común utilizando un Peugeot 206, con placa adulterada, atracaron el auto Peugeot Partner estacionado en cuyo interior se encontraba la dueña Silvana Dos Ramos descendiendo a la par”.
Habrían destruído el vidrio de la ventanilla “con algún elemento probablemente con un trozo de bujía, y sustrayendo la cartera de la damnificada color rojo conteniendo dinero, tarjeta de crédito y elementos personales, siendo este accionar visto por personal policial que circulaba en un patrullero que procede a perseguir el rodado, solicitando refuerzos, siendo detenidos todos ellos, dejando abandonado el Peugeot 206 en la calle Ecuador al 1523 esparciéndose por distintos lugares”.
La acusación agregó a lo anterior que “en tanto otros dos fueron demorados cuando habían ascendido a un vehículo Gol color rojo sobre la Calle Ceferino Namuncurá y Cuba resultando ser Faguada y Antelaf”. #

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De izquierda a derecha, el defensor Javier Allende, el juez penal Sergio Piñeda, el defensor Abdón Manyauik y el fiscal Fabián Moyano..
22 AGO 2017 - 21:25

El juez de Trelew Sergio Piñeda, absolvió a cinco sujetos que la Fiscalía había involucrado en el robo de una cartera. El hecho sucedió el 30 de diciembre de 2016 a las afueras de la firma Casa Dos Ramos y la víctima fue la propietaria, a la que le rompieron un vidro de su camioneta para sustraerle el elemento.
La causa estuvo a cargo del fiscal Fabián Moyano. Los cinco llevados a juicio quedaron en libertad. El juez Piñeda le dio la razón a los defensores Javier Allende y Abdon Manyauik, quienes plantearon las desprolijidades de las actuaciones policiales y la falta de solvencia del fiscal a la hora de sostener la calificación.
Dos autores, también libres

Lo curioso es que dos de los cinco acusados reconocieron haber cometido el hecho, pero los otros tres -según queda demostrado en la sentencia- no tuvieron nada que ver. De hecho, la resolución da cuenta de que no se explica cómo los detienen en otro sector de la ciudad a bordo de otro auto.
 No hay en su contra “un hecho claro, preciso, circunstanciado, constitucionalmente aceptable para formular una imputación donde se les diga su conducta, con circunstancia de tiempo, lugar y ocasión de las que se les acusa”.
“Como pudo observar del alegato de apertura de la Fiscalía se habla genéricamente de un grupo y no se dice qué hizo cada uno, ni cómo fue el plan”, indicó Allende sobre Moyano.
“Se trabajó mal”

 Manyauik, en tanto, consideró que “esto se pudo haber resuelto con una probation por robo simple pero el fiscal quiso hacer una causa por robo agravado por ser en poblado y en banda en grado de tentativa. Pero quisimos ir a juicio para dejar al descubierto lo mal que se trabajó desde la Policía y desde la acusación fiscal”. Agregó que “tenemos a dos que admiten haber robado la cartera, y aparecen tres más detenidos en otro auto (un gol rojo demorado en la calle Cuba). No sé qué iban haciendo en el primer auto, se ve que iban aplaudiendo o alentando a los otros dos, es ridículo”, deslizó.
El defensor refirió además que se tuvo por probado que actuaron Maximiliano Schenring y Sandro Antelaf, pero que se intentó engrosar la autoría con otros tres que no tuvieron nada que ver. Como resultado de todo esto, nadie pagó por el hecho que sufrió la señora Dos Ramos.
“Sospechoso y lamentable”

El juez Piñeda en su resolución fue más que claro al dejar notar que no le cerró por ningún lado el caso planteado por la Fiscalía.
“Resulta sospechoso y lamentable para este juez analizar este caso, pues fueron muchos los empleados policiales involucrados en persecuciones y detenciones de distintas jurisdicciones y es de reconocer la rapidez de sus actuaciones a escasos minutos de cometido el hecho. Pero para nada el fin justifica los medios”.
“Las actas deben ser el fiel reflejo de lo sucedido -advirtió-, que se traduce en la concatenación de hechos, actos y conductas desplegadas, que no debería llevar a duda alguna y menos aún a sospechar sobre el proceder policial. En este caso, resultó en vano todo un gran operativo que no falló desde la logística, pero sí de la forma en que se documentara lo sucedido, alterando los hechos acecidos con respecto al elemento sustraído, del cual derivaron todas las demás consecuencias, persecuciones y secuestros”.
Sobre estos aspectos que señaló en su sentencia el juez, Manyauik dio a entender que al principal testigo, un empleado de la firma Dos Ramos, lo alejaron de la escena donde fue hallada la cartera, para plantar esa prueba en manos de los 3 detenidos tiempo después y que se los implicó en el caso. “Esto sí que es grave, que manipulen la escena. Habrá que ver qué pasó ahí”.
Duda

“Por lo expuesto -siguió el juez-, impera la duda de este magistrado, que no ha podio desvirtuar la Fiscalía y llegar al grado de certeza requerido para tener a los aquí traídos como autores del hecho que se les endilgara y llegar de esta manera a la aplicación de una condena”.
“Aún quienes se atribuyeron la autoría del mismo, como en el caso de Sandro Maximiliano Antelaf y Maximiliano Andrés Schnering, no se condice con la prueba recogida, en estas actuaciones, por tomar nada más el ejemplo de la cartera analizada en párrafos anteriores, como también la falta de elementos probatorios que permita tener certeza de cómo ocurrieron los hechos y poder llegar a los mismos por indicios o presunciones que de ninguna manera resultan unívocos la sola auto incriminación de los imputados no resulta suficiente”, dice la resolución de Piñeda.
“La absolución se impone, puesto que la prueba de cargo presentada por el Ministerio Público Fiscal ha resultado insuficiente como para arribar a un estado de certeza sobre la culpabilidad de los acusados, que permita destruir el estado de inocencia”, sentenció el juez que ordenó en ese mismo acto la libertad inmediata de los traídos a proceso.
Qué decía la Fiscalía

El fiscal Moyano había acusado que “Juan Ariel Faguada, Maximiliano Alvarino Sepúlveda, Matías Alejandro Alegría, Maximiliano Andrés Schering, y Sandro Maximiliano Antelaf, en forma organizada tomando todos participación en el hecho, con un plan común utilizando un Peugeot 206, con placa adulterada, atracaron el auto Peugeot Partner estacionado en cuyo interior se encontraba la dueña Silvana Dos Ramos descendiendo a la par”.
Habrían destruído el vidrio de la ventanilla “con algún elemento probablemente con un trozo de bujía, y sustrayendo la cartera de la damnificada color rojo conteniendo dinero, tarjeta de crédito y elementos personales, siendo este accionar visto por personal policial que circulaba en un patrullero que procede a perseguir el rodado, solicitando refuerzos, siendo detenidos todos ellos, dejando abandonado el Peugeot 206 en la calle Ecuador al 1523 esparciéndose por distintos lugares”.
La acusación agregó a lo anterior que “en tanto otros dos fueron demorados cuando habían ascendido a un vehículo Gol color rojo sobre la Calle Ceferino Namuncurá y Cuba resultando ser Faguada y Antelaf”. #


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