La renuncia fue presentada ayer a la tarde ante el Fiscal General de Santa Fe, Jorge Baclini y la misma tiene carácter de "indeclinable", afirmó hoy a la prensa, Víctor Corvalán, abogado defensor de Rodrigo.
Las denuncias penales en su contra por ordenar "escuchas ilegales" a su ex novia y a otras tres personas de su entorno, "seguirán su curso", aseguraron a Télam voceros judiciales.
Rodrigo fue denunciado el lunes 7 de agosto pasado por un empleado del Ministerio Público de la Acusación que advirtió que el fiscal había ordenado "intervenir" los teléfonos celulares de su ex novia y de otras tres personas de su entorno.
Según esa denuncia, el funcionario judicial utilizaba los recursos del Estado para "espiar" a su compañera de trabajo, también abogada, con la que había tenido una relación sentimental, además de a dos amigas de ella, con la misma profesión, y a su ex suegro.
Sobre la mecánica utilizada, las fuentes indicaron que Rodrigo "interponía" los números de los celulares que deseaba seguir a modo personal cuando enviaba a las compañías telefónicas listados de teléfonos que pedía legalmente intervenir en causas a su cargo.
A la denuncia del empleado, se sumó esta semana las denuncias presentadas por la ex novia y las de sus dos amigas, todas abogadas.
En tanto, en declaraciones a la prensa, el abogado de las damnificadas, Carlos Edwards, indicó que al ahora ex fiscal, podría haber incurrido en los delitos de "abuso de autoridad y falsedad ideológica de instrumento público".
La renuncia fue presentada ayer a la tarde ante el Fiscal General de Santa Fe, Jorge Baclini y la misma tiene carácter de "indeclinable", afirmó hoy a la prensa, Víctor Corvalán, abogado defensor de Rodrigo.
Las denuncias penales en su contra por ordenar "escuchas ilegales" a su ex novia y a otras tres personas de su entorno, "seguirán su curso", aseguraron a Télam voceros judiciales.
Rodrigo fue denunciado el lunes 7 de agosto pasado por un empleado del Ministerio Público de la Acusación que advirtió que el fiscal había ordenado "intervenir" los teléfonos celulares de su ex novia y de otras tres personas de su entorno.
Según esa denuncia, el funcionario judicial utilizaba los recursos del Estado para "espiar" a su compañera de trabajo, también abogada, con la que había tenido una relación sentimental, además de a dos amigas de ella, con la misma profesión, y a su ex suegro.
Sobre la mecánica utilizada, las fuentes indicaron que Rodrigo "interponía" los números de los celulares que deseaba seguir a modo personal cuando enviaba a las compañías telefónicas listados de teléfonos que pedía legalmente intervenir en causas a su cargo.
A la denuncia del empleado, se sumó esta semana las denuncias presentadas por la ex novia y las de sus dos amigas, todas abogadas.
En tanto, en declaraciones a la prensa, el abogado de las damnificadas, Carlos Edwards, indicó que al ahora ex fiscal, podría haber incurrido en los delitos de "abuso de autoridad y falsedad ideológica de instrumento público".