Frente a esta situación, ayer se emitió un documento de parte de los operarios comunicando que sumarán a las familias al acampe y no se descarta tomar la planta, ya que sería inminente el desalojo, al haber sentencia de la medida solicitada en la Justicia por parte de Quilmes.
Sin embargo, el endurecimiento de las medidas no es compartido por todos y algunos se abrirían al considerar que expondrían a la familia y el reclamo podría alcanzar mayores niveles de violencia.
El comunicado ayer manifestaba: “A partir de la negativa de Cervecería y Maltería Quilmes a enviarnos una propuesta seria para financiar nuestra cooperativa y habiéndose cumplido más de cien días de acampe en los portones de la planta reclamando lo que nos corresponde, nuestras familias han decidido a partir de hoy (por ayer) sumarse al acampe”.
Se agrega que “el cierre de la planta Pepsi, con la consecuencia de dejar medio centenar de familias en la calle, se da en un contexto económico donde es casi imposible conseguir trabajo. Lo han hecho con saña, en forma arbitraria e intempestiva, de mala fe, arreglando con la conducción del Sindicato de Trabajadores de Aguas Gaseosas (Sutiaga), de espalda a los trabajadores, y pagando en forma parcial las indemnizaciones”.
“Frente a la orden de inminente desalojo presentada por la patronal multinacional resistiremos. Hasta el momento nos hemos manifestado pacíficamente, pero si intentan reprimirnos no nos dejaremos pegar”.
“Cada día que pasa aprendemos más y nuestros lazos con la sociedad, organizaciones sociales y políticas se hacen más fuertes”.
A modo de conclusión sostienen que “queremos agradecer a la sociedad por el apoyo, los gestos y palabras de aliento, a los gremios, partidos políticos, organizaciones sociales, iglesias católicas y cristianas, periodistas, abogados y a nuestro querido Comité de Apoyo que nos hacen la lucha más fácil y que juntos vamos a dejar un precedente importantísimo en Chubut”.
Ayer varios extrabajadores mostraban impotencia. Otros defraudados consideran que ya se llegó a un punto final y tras más de tres meses buscan enfocarse en una nueva etapa para insertarse en el mercado laboral, ya que la plata de las indemnizaciones se está agotando. Entre hoy y mañana habrá una asamblea para definir los pasos a seguir.#
Frente a esta situación, ayer se emitió un documento de parte de los operarios comunicando que sumarán a las familias al acampe y no se descarta tomar la planta, ya que sería inminente el desalojo, al haber sentencia de la medida solicitada en la Justicia por parte de Quilmes.
Sin embargo, el endurecimiento de las medidas no es compartido por todos y algunos se abrirían al considerar que expondrían a la familia y el reclamo podría alcanzar mayores niveles de violencia.
El comunicado ayer manifestaba: “A partir de la negativa de Cervecería y Maltería Quilmes a enviarnos una propuesta seria para financiar nuestra cooperativa y habiéndose cumplido más de cien días de acampe en los portones de la planta reclamando lo que nos corresponde, nuestras familias han decidido a partir de hoy (por ayer) sumarse al acampe”.
Se agrega que “el cierre de la planta Pepsi, con la consecuencia de dejar medio centenar de familias en la calle, se da en un contexto económico donde es casi imposible conseguir trabajo. Lo han hecho con saña, en forma arbitraria e intempestiva, de mala fe, arreglando con la conducción del Sindicato de Trabajadores de Aguas Gaseosas (Sutiaga), de espalda a los trabajadores, y pagando en forma parcial las indemnizaciones”.
“Frente a la orden de inminente desalojo presentada por la patronal multinacional resistiremos. Hasta el momento nos hemos manifestado pacíficamente, pero si intentan reprimirnos no nos dejaremos pegar”.
“Cada día que pasa aprendemos más y nuestros lazos con la sociedad, organizaciones sociales y políticas se hacen más fuertes”.
A modo de conclusión sostienen que “queremos agradecer a la sociedad por el apoyo, los gestos y palabras de aliento, a los gremios, partidos políticos, organizaciones sociales, iglesias católicas y cristianas, periodistas, abogados y a nuestro querido Comité de Apoyo que nos hacen la lucha más fácil y que juntos vamos a dejar un precedente importantísimo en Chubut”.
Ayer varios extrabajadores mostraban impotencia. Otros defraudados consideran que ya se llegó a un punto final y tras más de tres meses buscan enfocarse en una nueva etapa para insertarse en el mercado laboral, ya que la plata de las indemnizaciones se está agotando. Entre hoy y mañana habrá una asamblea para definir los pasos a seguir.#