El hecho ocurrió ayer, alrededor de las 17.30, en una casa ubicada en la calle Barragán al 3400, en el citado distrito del partido de La Matanza, en donde vivían Jonatan Ramos (34), y su novia, Carla Giselle Bufano (29), junto a los niños.
Fuentes judiciales informaron a Télam que, por motivos que aún se investigan, se habría generado una discusión y que Ramos, efectivo de la Policía Local de La Matanza que se encontraba de franco, extrajo su arma reglamentaria y le disparó seis veces a Bufano, quien murió en el acto.
Luego de asesinar a su novia, el policía se suicidó de un disparo que entró por la zona de su barbilla, todo en presencia de los hijos de la pareja, de 7 y 10 años.
Los voceros señalaron a Télam que un vecino que vive enfrente de la casa, que también es miembro de la Policía Local de La Matanza y que era amigo de Ramos, escuchó los disparos, tras lo cual de inmediato se acercó a la vivienda.
En la casa, que está ubicada en un primer piso y a la que se accede a través de una escalera caracol exterior, estaban los dos chicos salpicados con sangre.
Ante esta situación, el vecino se los llevó del lugar pasándolos por arriba de una reja que funciona como cerco perimetral, los dejó a resguardo y solicitó asistencia.
Otros vecinos también se acercaron a la casa luego de escuchar las detonaciones e ingresaron a la vivienda y encontraron los dos cuerpos, por lo que de inmediato dieron aviso al 911.
La mujer fue hallada asesinada en la habitación de sus hijos, al costado de una cama marinera, boca arriba, y con disparos en el pecho, en la ingle y en la cabeza.
En tanto, Ramos fue encontrado muerto boca abajo en la puerta de acceso a la habitación y en la recámara de su arma reglamentaria, hallada al costado del cuerpo, sólo quedaba un proyectil.
Los testigos presentes en el lugar señalaron que el policía era celoso y posesivo, por lo que eran habituales las discusiones, mientras que respecto a la mujer asesinada, relataron que era pacífica, que sólo se dedicaba a sus hijos, y que recientemente había comenzado a estudiar, agregaron las fuentes.
En su cuenta personal de Facebook, el pasado 8 de agosto el policía había subido una foto acompañado de su novia, en la que le dedicó una publicación en la que afirmaba que mucha gente “quizás” los “quería separados”, y “que los demás se coman sus comentarios y se fijen en sus cosas”.
“Tantos años juntos, tantas luchas, tantas peleas, y seguimos firmes luchando por la familia que un día formamos”, inició en la publicación Ramos y continuó: “Yo no seré perfecto, cometí errores, pero nunca abandoné a mi familia, la que Dios me dio un día, y de eso se trata un matrimonio, de lucharla juntos”.
Es que, según revelaron a Télam fuentes de la investigación, el policía y Bufano eran novios desde los 12 años.
Ramos, en esa misma publicación, escribió que “lo que Dios unió el hombre nadie lo va a separar” y que “la envidia es mucha”, además de sostener que amaba a la mujer que tenía a su “lado” y “a los ángeles” que le dio “de hijos”.
“Carla Giselle Bufano, voy a estar hasta el último día de mi vida, y sepan que nadie está libre de pecado, es fácil juzgar y no mirarse uno mismo. Se que son muchas las pruebas y acá estoy firme dándole lo mejor a mi familia, lo que quizás nadie lo ve”, publicó el policía y agregó: “Igual no me interesa porque tengo lo más bello que uno puede pedir, una mujer a mi lado y mis hijos que son mi orgullo y van a ser grandes personas en su vida”.
En tanto, el pasado 16 de agosto, en otra publicación en la cual subió una foto junto a sus hijos y su novia, Ramos escribió: “agradezco a mi Dios por darme esta hermosa familia, y estos momentos de la vida hermosos no tienen precio, es lo mas lindo disfrutar con ellos mi tiempo libre, los amo”.
Intervino en la investigación el fiscal José Luis Maroto, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) Temática Homicidios del Departamento Judicial de La Matanza.
El hecho ocurrió ayer, alrededor de las 17.30, en una casa ubicada en la calle Barragán al 3400, en el citado distrito del partido de La Matanza, en donde vivían Jonatan Ramos (34), y su novia, Carla Giselle Bufano (29), junto a los niños.
Fuentes judiciales informaron a Télam que, por motivos que aún se investigan, se habría generado una discusión y que Ramos, efectivo de la Policía Local de La Matanza que se encontraba de franco, extrajo su arma reglamentaria y le disparó seis veces a Bufano, quien murió en el acto.
Luego de asesinar a su novia, el policía se suicidó de un disparo que entró por la zona de su barbilla, todo en presencia de los hijos de la pareja, de 7 y 10 años.
Los voceros señalaron a Télam que un vecino que vive enfrente de la casa, que también es miembro de la Policía Local de La Matanza y que era amigo de Ramos, escuchó los disparos, tras lo cual de inmediato se acercó a la vivienda.
En la casa, que está ubicada en un primer piso y a la que se accede a través de una escalera caracol exterior, estaban los dos chicos salpicados con sangre.
Ante esta situación, el vecino se los llevó del lugar pasándolos por arriba de una reja que funciona como cerco perimetral, los dejó a resguardo y solicitó asistencia.
Otros vecinos también se acercaron a la casa luego de escuchar las detonaciones e ingresaron a la vivienda y encontraron los dos cuerpos, por lo que de inmediato dieron aviso al 911.
La mujer fue hallada asesinada en la habitación de sus hijos, al costado de una cama marinera, boca arriba, y con disparos en el pecho, en la ingle y en la cabeza.
En tanto, Ramos fue encontrado muerto boca abajo en la puerta de acceso a la habitación y en la recámara de su arma reglamentaria, hallada al costado del cuerpo, sólo quedaba un proyectil.
Los testigos presentes en el lugar señalaron que el policía era celoso y posesivo, por lo que eran habituales las discusiones, mientras que respecto a la mujer asesinada, relataron que era pacífica, que sólo se dedicaba a sus hijos, y que recientemente había comenzado a estudiar, agregaron las fuentes.
En su cuenta personal de Facebook, el pasado 8 de agosto el policía había subido una foto acompañado de su novia, en la que le dedicó una publicación en la que afirmaba que mucha gente “quizás” los “quería separados”, y “que los demás se coman sus comentarios y se fijen en sus cosas”.
“Tantos años juntos, tantas luchas, tantas peleas, y seguimos firmes luchando por la familia que un día formamos”, inició en la publicación Ramos y continuó: “Yo no seré perfecto, cometí errores, pero nunca abandoné a mi familia, la que Dios me dio un día, y de eso se trata un matrimonio, de lucharla juntos”.
Es que, según revelaron a Télam fuentes de la investigación, el policía y Bufano eran novios desde los 12 años.
Ramos, en esa misma publicación, escribió que “lo que Dios unió el hombre nadie lo va a separar” y que “la envidia es mucha”, además de sostener que amaba a la mujer que tenía a su “lado” y “a los ángeles” que le dio “de hijos”.
“Carla Giselle Bufano, voy a estar hasta el último día de mi vida, y sepan que nadie está libre de pecado, es fácil juzgar y no mirarse uno mismo. Se que son muchas las pruebas y acá estoy firme dándole lo mejor a mi familia, lo que quizás nadie lo ve”, publicó el policía y agregó: “Igual no me interesa porque tengo lo más bello que uno puede pedir, una mujer a mi lado y mis hijos que son mi orgullo y van a ser grandes personas en su vida”.
En tanto, el pasado 16 de agosto, en otra publicación en la cual subió una foto junto a sus hijos y su novia, Ramos escribió: “agradezco a mi Dios por darme esta hermosa familia, y estos momentos de la vida hermosos no tienen precio, es lo mas lindo disfrutar con ellos mi tiempo libre, los amo”.
Intervino en la investigación el fiscal José Luis Maroto, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) Temática Homicidios del Departamento Judicial de La Matanza.