Trelew: un militar retirado a juicio por torturas y secuestros a militantes en la Base Almirante Zar

Raúl Noziglia será juzgado por la represión sistemática a un grupo de dirigentes del Valle Inferior del Río Chubut. Se trata de peronistas, radicales y del Partido Comunista que sufrieron múltiples torturas físicas y psicológicas. Fueron fichados. Hay una embarazada y un chico que tenía 16 años.

24 SEP 2017 - 21:11 | Actualizado

Por Rolando Tobarez.

Un militar retirado será juzgado por 26 secuestros, 14 episodios de tortura a perseguidos políticos y 21 violaciones de domicilio. Se trata de Raúl Noziglia, de 82 años. Vive en Capital Federal y era capitán de navío del Cuerpo de Infantería de Marina de la Armada Argentina. Lo acusan de cómplice de estos hechos como comandante del Batallón de Infantería de Marina N° 4, de la Base Aeronaval Almirante Zar de Trelew.

Se trata de la causa que por primera vez declaró a la Base como centro clandestino de detención, en el marco del plan de represión, tortura y aniquilamiento de opositores a la dictadura que se desató el 24 de marzo de 1976.

El expediente, investigado por el fiscal federal Fernando Gélvez, ya fue elevado a juicio al Tribunal Oral Federal de Comodoro Rivadavia, que deberá ponerle fecha al juicio. Las víctimas fueron Enrique Alberto Bar; Federico García López; Aroldo Nelson Onzari; Manfredo Enrique Lendzian; Juan José Onzari; Daniel Alfredo De Lamo; Héctor Luis Cassia y Luis Enrique Molina.

También Olga Nidia Asaro de Capandegui; José María Ferre; Santiago Marcelino López; Daniel Alfredo Focarazzo; Noel Nicolás Coronel; Chakib Florentino Loscar; María Cristina Torres; Alberto Recchia y Heraldo Delfín Torne.

La lista culmina con Horacio Mallo; Luis Eugenio Calero; Juan Esteban Tudela Sánchez; Alberto Rubén Raimondi Gastaldi; Enrique Oscar Escolar; Timoteo Timoszuk; María Laura Pautasso; José María Pagnamento y Fernando y Luis Eugenio Calero. Algunos ya fallecieron

A Bar lo detuvieron en 1976 en el operativo “Rodeo”, en Playa Unión. En su casa hallaron libros de estrategia militar, Perón y Mao. Lo cargaron en un camión rumbo a la Base, custodiado por soldados con fusiles FAL. Lo bajaron vendado a una celda desde donde escuchó otras detenidas. Un día le devolvieron sus libros y lo liberaron. En 1977 lo detienen de nuevo. Ingresaron por la ventana tres gendarmes, le dieron vuelta la vivienda y lo llevaron a la Base vendado y las manos atadas.

El “Pelado” Cassia fue detenido en 1977 por un grupo de 15 personas con armas largas de la Infantería de Marina. Entraron en forma salvaje, lo trompearon y se lo llevaron encapuchado. En un calabozo de la Base lo interrogaron con golpes y amenazas. Eran cinco. Un mes después lo hicieron subir a un camión junto con “Chiche” López y lo liberaron en la ruta.

A Coronel en la Base lo encapucharon y le ataron las manos por la espalda. En una habitación lo esposaron a un radiador apagado. Lo interrogaron y lo torturaron psíquicamente. “Le preguntaron por Elvio Ángel Bel (el maestro desaparecido en Trelew) le sacaron una foto pero no abrió los ojos porque los tenía llenos de sangre”.

Mallo trabajaba en su campo de Paso de Indios cuando lo llamó el comisario con la orden de detenerlo y llevarlo a Trelew. En el hall de ingreso de la Base fue obligado a ponerse de rodillas y vendado. “Le advirtieron que no podía sacarse la venda por ninguna razón o tendría que atenerse a las consecuencias”.

Onzari fue detenido en el Aeropuerto viejo de Trelew. Lo esposaron, le vendaron los ojos y lo subieron a la caja de un camión con más personas. En su habitación de la Base escuchaba gritos y llantos. Cree que era una grabación porque constantemente se repetía. Lo interrogaron por su relación con Bel. Lo golpearon en el brazo y en las costillas cerca del riñón.

Marcelino López al llegar a su casa vio camiones con soldados. Se entregó en el Distrito Militar. Encapuchado lo trasladaron apuntándole con una pistola 45. Le colocaron algodones en los ojos y sobre ellos una venda. En una celda fue interrogado sobre su amistad con Bel, Sergio Maida (secuestrado en 1976) y su vinculación con el Ejército Revolucionario del Pueblo.

Lendzian también fue vendado y encapuchado en la Base. Pasó el día sentado en una silla; a la noche fue esposado a un radiador. Lo interrogaron por su actividad política.

A Loscar lo hicieron arrodillar y lo vendaron. Lo esposaron a un radiador. Escuchaba gritos y una mujer que insultaba. Lo alumbraron con un reflector a los ojos. Lo golpeaban y lo amenazaban. Le preguntaban sobre la organización del Partido Comunista y sobre Bel. Le decían que no iba a salir de ahí.

Una noche lo sacaron para “un viaje sin retorno”, le dijeron. Lo llevaron cerca de un avión, le amagaron con subirlo pero lo regresaron al vehículo. Antes de soltarlo lo fotografiaron. Lodejaron vendado frente a su casa.

Gastaldi fue secuestrado e interrogado por su vinculación con el PC. En el caso de Molina, una madrugada fue obligado a salir de su casa con gritos de megáfono. Había militares con armas largas. Lo colocaron contra una pared encapuchado y esposado. En la caja de un camión lo ataron con alambre y lo taparon con mantas. En la Base alcanzó a ver y escuchar a conocidos ya que militaba en el PC.

En los interrogatorios recibió patadas, trompadas, tirones de pelo y amenazas de que podía “terminar mal”. Hasta recibió corriente en las muñecas. Le preguntaban sobre temas económicos del PC, sobre Bel y otros secuestrados. Escuchó que le pegaban a otros detenidos, entre llantos e insultos. Lo amenazaron con arrojarlo por la ventana.

Onzari fue secuestrado en Rawson para interrogarlo sobre su vinculación con el PC. Abría su fábrica cuando fue cargado a un colectivo de la Marina. En la Base estuvo en un gimnasio, lo hicieron arrodillar contra una pared y le colocaron tapones en los ojos y una venda. Lo fotografiaron.

Focarazzo fuera de su casa vio gran despliegue de soldados. Esposado en la Base, en el gimnasio vio varias personas mirando a la pared con la orden de no mirar al costado. Fue interrogado en un calabozo pequeño.

Timoszuk era delegado de la UTGRA. fue detenido en una lista de personas a investigar. Allanaron la sede y en la Base lo interrogaron por su actividad gremial.

Torres fue detenida la madrugada del 3 de mayo del 77. Eran diez policías uniformados. Revisaron toda su casa. La subieron a un furgón con más gente. En la Base le quitaron la venda y le tomaron una foto. Escuchó ruidos, gritos, órdenes, contraórdenes, quejidos, ruidos de cadenas, gritos de mujeres e insultos de hombres. La interrogaron con una luz muy alta frente a la cara. La insultaron y le gatillaron un arma en la sien. La amenazaban diciéndole que iban a detener a la madre.

Torné era sereno en el Residencial Paterson de Trelew. Vio muchos colimbas y gente de Marina. Lo encapucharon y lo subieron a un camión. Lo empezaron a golpear. En la Base estuvo siempre esposado, vendado y custodiado. Lo interrogaban de noche. Lo fotografiaron. Lo sentaban en una silla giratoria en el medio de la habitación con cinco personas y le preguntaban sobre desde que época estaba en la subversión, sobre su hermano, sus actividades, sobre Bel y Recchia. Lo golpeaban en el estómago, la espalda y culatazos en la nuca.

García López fue detenido por un grupo de tareas en mayo de 1977. Recorrió varias casas cuando supo que otros compañeros del Partido Comunista habían sido detenidos. Volvió a su vivienda pero la estaban allanando. Regresó sobre sus pasos.

Al otro día trabajaba en su taller cuando ingresó un operativo con armas, lo encapucharon y esposaron. Fue subido a la caja en una camioneta de la Base. Lo sentaron en una silla. Cuando se negó a dar información del P.C. y su relación con Bel, un militar le pasó un cortapluma sin filo por el cuello, las orejas y la cara. De noche pateaban las puertas de su habitación, corrían el cerrojo del arma y abrían y cerraba la puerta de la pieza. Escuchó gritos muy fuertes del hijo de Calero (Fernando) y de la madre del muchacho (ver recuadro).

Una tarde entera un grupo lo golpeó en los oídos, tórax, estómago, parte lumbar y testículos. Fue amenazado de muerte y que iban a llevar a su esposa ahí para violarla. Perdió parte de la audición.

Tudela Sánchez, ya en la Base, permaneció arriba del camión una hora, vendado y encapuchado. En un galpón lo encadenaron a una pared con los brazos hacia arriba, entre dolorosos calambres. Así pasó un día. Escuchaba gritos, golpes e insultos. Atravesó dos extensos interrogatorios sobre política e ideología y era amenazado con la picana eléctrica.

En el caso de Recchia, lo despertaron con un megáfono. Lo hicieron salir y los encapucharon a él y su señora. Le sacaron libros. Lo subieron a un auto y le pisaron en la espalda. Antes de entrar a la Base le inyectaron algo que lo desmayó. Despertó en una cama esposado a una argolla en la pared.

Lo interrogaron por militantes como Bel, Federico García, y Pagnamento. Era amenazado con que su mujer estaba en otra parte: “No te preocupes total tenemos forma de hacerla hablar”. Le pegaron patadas, sopapos y le picanearon las piernas. Lo inyectaron de nuevo y al despertar lo estaban soltando. Se acercó a una casa y se enteró que estaba en San Antonio Oeste. #

“Los freímosa la parrilla”

Ferré fue detenido en 1976 en un operativo en la ruta a Playa Unión. Pararon su colectivo y figuraba en una lista. Lo llevaron a los calabozos de la Base esposado y encapuchado. Escuchaba ruidos de otras personas. Día y noche los buscaban para interrogarlos sobre ideología, actividades políticas y amistades. Recibió patadas y golpes en la cabeza. Hasta le apoyaron una picana en el pecho.

Tuvo una segunda detención en su casa en mayo de 1977. De madrugada golpearon puertas y ventanas. Le solicitaron salir manos en alto. Vestían ropas militares verdes. Encapuchado y esposado fue cargado en un camión rumbo a la Base. Terminó en un gimnasio con más secuestrados de otros procedimientos.

En una celda dijo haber escuchado muchos gritos de torturados y le decían: “Están friendo a la parrilla a personas y después te toca a vos”. Le preguntaban por gente de Esquel.

Una vez le hicieron tocar un elemento de madera. Le dijeron que era un ataúd y pronto él iba a estar dentro del mismo. Le daban cachetadas, trompadas y palmazos en la cabeza.

De noche pasaban, le pateaban las puertas y no los dejaban dormir. Siempre encapuchado. Lo liberaron en el centro de Trelew. #

El caso Asaro: embarazada ysecuestrada

Olga Asaro estaba embarazada de 5 meses. Eran las 4. Dormía en su casa con su esposo y su hija de dos años. Golpearon su puerta y le advirtieron que eran de las “fuerzas de seguridad”, Entraron 15 personas vestidas de militares con armas largas. Revisaron todo. Se dieron cuenta de su embarazo y un oficial le dijo que se quedara tranquila. Fuera del departamento vio un camión lleno de militares y gente en el techo.

En la Base le vendaron los ojos; entre empujones la llevaron a un gimnasio. Notó que en el lugar más gente contra las paredes y sentados en el piso. Le alcanzaron una silla mientras oía que traían a más personas.

El interrogatorio se basó en preguntas sobre su hermana, si ella era peronista, quién le estaba haciendo los trámites para salir del país y si pensaba que su hermana había hecho algo para estar presa. También le preguntaron sobre unas cartas que le había enviado su hermana Silvia (detenida en Devoto) y los nombres que aparecían en ellas. #

El caso de los Calero

Fernando Calero tenía 16 años en mayo de 1977. Fue detenido junto con su padre Luis Eugenio y su madre Elena Warzansky. Su casa fue allanada. Secuestraron 50 libros de ideología comunista, marxista, leninista; 44 revistas “Fundamento”, recortes de diarios y apuntes relacionados con el Partido Comunista y 16 carnets de afiliación al Partido Comunista en blanco. Fueron llevados a la Base. Estuvo una semana, fue muy golpeado y según la causa, sufrió abusos de los represores para obligar a que su padre hablara. Quedó psíquicamente muy alterado.

Su padre

Su padre Luis fue llevado a un lugar grande con muchos detenidos, parecido a un gimnasio. Lo pusieron contra la pared, vendado y esposado. Lo interrogaron entre golpes y amenazas. Escuchó las torturas sufridas por su hijo Fernando, que estaba desnudo. Terminó en la Unidad 6 de Rawson.

Este militante ya había tenido una primera detención donde había sido interrogado sobre sus actividades en el Partido Comunista. Una mañana se cortó las venas en ambos brazos. Lo salvaron en la Enfermería.

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24 SEP 2017 - 21:11

Por Rolando Tobarez.

Un militar retirado será juzgado por 26 secuestros, 14 episodios de tortura a perseguidos políticos y 21 violaciones de domicilio. Se trata de Raúl Noziglia, de 82 años. Vive en Capital Federal y era capitán de navío del Cuerpo de Infantería de Marina de la Armada Argentina. Lo acusan de cómplice de estos hechos como comandante del Batallón de Infantería de Marina N° 4, de la Base Aeronaval Almirante Zar de Trelew.

Se trata de la causa que por primera vez declaró a la Base como centro clandestino de detención, en el marco del plan de represión, tortura y aniquilamiento de opositores a la dictadura que se desató el 24 de marzo de 1976.

El expediente, investigado por el fiscal federal Fernando Gélvez, ya fue elevado a juicio al Tribunal Oral Federal de Comodoro Rivadavia, que deberá ponerle fecha al juicio. Las víctimas fueron Enrique Alberto Bar; Federico García López; Aroldo Nelson Onzari; Manfredo Enrique Lendzian; Juan José Onzari; Daniel Alfredo De Lamo; Héctor Luis Cassia y Luis Enrique Molina.

También Olga Nidia Asaro de Capandegui; José María Ferre; Santiago Marcelino López; Daniel Alfredo Focarazzo; Noel Nicolás Coronel; Chakib Florentino Loscar; María Cristina Torres; Alberto Recchia y Heraldo Delfín Torne.

La lista culmina con Horacio Mallo; Luis Eugenio Calero; Juan Esteban Tudela Sánchez; Alberto Rubén Raimondi Gastaldi; Enrique Oscar Escolar; Timoteo Timoszuk; María Laura Pautasso; José María Pagnamento y Fernando y Luis Eugenio Calero. Algunos ya fallecieron

A Bar lo detuvieron en 1976 en el operativo “Rodeo”, en Playa Unión. En su casa hallaron libros de estrategia militar, Perón y Mao. Lo cargaron en un camión rumbo a la Base, custodiado por soldados con fusiles FAL. Lo bajaron vendado a una celda desde donde escuchó otras detenidas. Un día le devolvieron sus libros y lo liberaron. En 1977 lo detienen de nuevo. Ingresaron por la ventana tres gendarmes, le dieron vuelta la vivienda y lo llevaron a la Base vendado y las manos atadas.

El “Pelado” Cassia fue detenido en 1977 por un grupo de 15 personas con armas largas de la Infantería de Marina. Entraron en forma salvaje, lo trompearon y se lo llevaron encapuchado. En un calabozo de la Base lo interrogaron con golpes y amenazas. Eran cinco. Un mes después lo hicieron subir a un camión junto con “Chiche” López y lo liberaron en la ruta.

A Coronel en la Base lo encapucharon y le ataron las manos por la espalda. En una habitación lo esposaron a un radiador apagado. Lo interrogaron y lo torturaron psíquicamente. “Le preguntaron por Elvio Ángel Bel (el maestro desaparecido en Trelew) le sacaron una foto pero no abrió los ojos porque los tenía llenos de sangre”.

Mallo trabajaba en su campo de Paso de Indios cuando lo llamó el comisario con la orden de detenerlo y llevarlo a Trelew. En el hall de ingreso de la Base fue obligado a ponerse de rodillas y vendado. “Le advirtieron que no podía sacarse la venda por ninguna razón o tendría que atenerse a las consecuencias”.

Onzari fue detenido en el Aeropuerto viejo de Trelew. Lo esposaron, le vendaron los ojos y lo subieron a la caja de un camión con más personas. En su habitación de la Base escuchaba gritos y llantos. Cree que era una grabación porque constantemente se repetía. Lo interrogaron por su relación con Bel. Lo golpearon en el brazo y en las costillas cerca del riñón.

Marcelino López al llegar a su casa vio camiones con soldados. Se entregó en el Distrito Militar. Encapuchado lo trasladaron apuntándole con una pistola 45. Le colocaron algodones en los ojos y sobre ellos una venda. En una celda fue interrogado sobre su amistad con Bel, Sergio Maida (secuestrado en 1976) y su vinculación con el Ejército Revolucionario del Pueblo.

Lendzian también fue vendado y encapuchado en la Base. Pasó el día sentado en una silla; a la noche fue esposado a un radiador. Lo interrogaron por su actividad política.

A Loscar lo hicieron arrodillar y lo vendaron. Lo esposaron a un radiador. Escuchaba gritos y una mujer que insultaba. Lo alumbraron con un reflector a los ojos. Lo golpeaban y lo amenazaban. Le preguntaban sobre la organización del Partido Comunista y sobre Bel. Le decían que no iba a salir de ahí.

Una noche lo sacaron para “un viaje sin retorno”, le dijeron. Lo llevaron cerca de un avión, le amagaron con subirlo pero lo regresaron al vehículo. Antes de soltarlo lo fotografiaron. Lodejaron vendado frente a su casa.

Gastaldi fue secuestrado e interrogado por su vinculación con el PC. En el caso de Molina, una madrugada fue obligado a salir de su casa con gritos de megáfono. Había militares con armas largas. Lo colocaron contra una pared encapuchado y esposado. En la caja de un camión lo ataron con alambre y lo taparon con mantas. En la Base alcanzó a ver y escuchar a conocidos ya que militaba en el PC.

En los interrogatorios recibió patadas, trompadas, tirones de pelo y amenazas de que podía “terminar mal”. Hasta recibió corriente en las muñecas. Le preguntaban sobre temas económicos del PC, sobre Bel y otros secuestrados. Escuchó que le pegaban a otros detenidos, entre llantos e insultos. Lo amenazaron con arrojarlo por la ventana.

Onzari fue secuestrado en Rawson para interrogarlo sobre su vinculación con el PC. Abría su fábrica cuando fue cargado a un colectivo de la Marina. En la Base estuvo en un gimnasio, lo hicieron arrodillar contra una pared y le colocaron tapones en los ojos y una venda. Lo fotografiaron.

Focarazzo fuera de su casa vio gran despliegue de soldados. Esposado en la Base, en el gimnasio vio varias personas mirando a la pared con la orden de no mirar al costado. Fue interrogado en un calabozo pequeño.

Timoszuk era delegado de la UTGRA. fue detenido en una lista de personas a investigar. Allanaron la sede y en la Base lo interrogaron por su actividad gremial.

Torres fue detenida la madrugada del 3 de mayo del 77. Eran diez policías uniformados. Revisaron toda su casa. La subieron a un furgón con más gente. En la Base le quitaron la venda y le tomaron una foto. Escuchó ruidos, gritos, órdenes, contraórdenes, quejidos, ruidos de cadenas, gritos de mujeres e insultos de hombres. La interrogaron con una luz muy alta frente a la cara. La insultaron y le gatillaron un arma en la sien. La amenazaban diciéndole que iban a detener a la madre.

Torné era sereno en el Residencial Paterson de Trelew. Vio muchos colimbas y gente de Marina. Lo encapucharon y lo subieron a un camión. Lo empezaron a golpear. En la Base estuvo siempre esposado, vendado y custodiado. Lo interrogaban de noche. Lo fotografiaron. Lo sentaban en una silla giratoria en el medio de la habitación con cinco personas y le preguntaban sobre desde que época estaba en la subversión, sobre su hermano, sus actividades, sobre Bel y Recchia. Lo golpeaban en el estómago, la espalda y culatazos en la nuca.

García López fue detenido por un grupo de tareas en mayo de 1977. Recorrió varias casas cuando supo que otros compañeros del Partido Comunista habían sido detenidos. Volvió a su vivienda pero la estaban allanando. Regresó sobre sus pasos.

Al otro día trabajaba en su taller cuando ingresó un operativo con armas, lo encapucharon y esposaron. Fue subido a la caja en una camioneta de la Base. Lo sentaron en una silla. Cuando se negó a dar información del P.C. y su relación con Bel, un militar le pasó un cortapluma sin filo por el cuello, las orejas y la cara. De noche pateaban las puertas de su habitación, corrían el cerrojo del arma y abrían y cerraba la puerta de la pieza. Escuchó gritos muy fuertes del hijo de Calero (Fernando) y de la madre del muchacho (ver recuadro).

Una tarde entera un grupo lo golpeó en los oídos, tórax, estómago, parte lumbar y testículos. Fue amenazado de muerte y que iban a llevar a su esposa ahí para violarla. Perdió parte de la audición.

Tudela Sánchez, ya en la Base, permaneció arriba del camión una hora, vendado y encapuchado. En un galpón lo encadenaron a una pared con los brazos hacia arriba, entre dolorosos calambres. Así pasó un día. Escuchaba gritos, golpes e insultos. Atravesó dos extensos interrogatorios sobre política e ideología y era amenazado con la picana eléctrica.

En el caso de Recchia, lo despertaron con un megáfono. Lo hicieron salir y los encapucharon a él y su señora. Le sacaron libros. Lo subieron a un auto y le pisaron en la espalda. Antes de entrar a la Base le inyectaron algo que lo desmayó. Despertó en una cama esposado a una argolla en la pared.

Lo interrogaron por militantes como Bel, Federico García, y Pagnamento. Era amenazado con que su mujer estaba en otra parte: “No te preocupes total tenemos forma de hacerla hablar”. Le pegaron patadas, sopapos y le picanearon las piernas. Lo inyectaron de nuevo y al despertar lo estaban soltando. Se acercó a una casa y se enteró que estaba en San Antonio Oeste. #

“Los freímosa la parrilla”

Ferré fue detenido en 1976 en un operativo en la ruta a Playa Unión. Pararon su colectivo y figuraba en una lista. Lo llevaron a los calabozos de la Base esposado y encapuchado. Escuchaba ruidos de otras personas. Día y noche los buscaban para interrogarlos sobre ideología, actividades políticas y amistades. Recibió patadas y golpes en la cabeza. Hasta le apoyaron una picana en el pecho.

Tuvo una segunda detención en su casa en mayo de 1977. De madrugada golpearon puertas y ventanas. Le solicitaron salir manos en alto. Vestían ropas militares verdes. Encapuchado y esposado fue cargado en un camión rumbo a la Base. Terminó en un gimnasio con más secuestrados de otros procedimientos.

En una celda dijo haber escuchado muchos gritos de torturados y le decían: “Están friendo a la parrilla a personas y después te toca a vos”. Le preguntaban por gente de Esquel.

Una vez le hicieron tocar un elemento de madera. Le dijeron que era un ataúd y pronto él iba a estar dentro del mismo. Le daban cachetadas, trompadas y palmazos en la cabeza.

De noche pasaban, le pateaban las puertas y no los dejaban dormir. Siempre encapuchado. Lo liberaron en el centro de Trelew. #

El caso Asaro: embarazada ysecuestrada

Olga Asaro estaba embarazada de 5 meses. Eran las 4. Dormía en su casa con su esposo y su hija de dos años. Golpearon su puerta y le advirtieron que eran de las “fuerzas de seguridad”, Entraron 15 personas vestidas de militares con armas largas. Revisaron todo. Se dieron cuenta de su embarazo y un oficial le dijo que se quedara tranquila. Fuera del departamento vio un camión lleno de militares y gente en el techo.

En la Base le vendaron los ojos; entre empujones la llevaron a un gimnasio. Notó que en el lugar más gente contra las paredes y sentados en el piso. Le alcanzaron una silla mientras oía que traían a más personas.

El interrogatorio se basó en preguntas sobre su hermana, si ella era peronista, quién le estaba haciendo los trámites para salir del país y si pensaba que su hermana había hecho algo para estar presa. También le preguntaron sobre unas cartas que le había enviado su hermana Silvia (detenida en Devoto) y los nombres que aparecían en ellas. #

El caso de los Calero

Fernando Calero tenía 16 años en mayo de 1977. Fue detenido junto con su padre Luis Eugenio y su madre Elena Warzansky. Su casa fue allanada. Secuestraron 50 libros de ideología comunista, marxista, leninista; 44 revistas “Fundamento”, recortes de diarios y apuntes relacionados con el Partido Comunista y 16 carnets de afiliación al Partido Comunista en blanco. Fueron llevados a la Base. Estuvo una semana, fue muy golpeado y según la causa, sufrió abusos de los represores para obligar a que su padre hablara. Quedó psíquicamente muy alterado.

Su padre

Su padre Luis fue llevado a un lugar grande con muchos detenidos, parecido a un gimnasio. Lo pusieron contra la pared, vendado y esposado. Lo interrogaron entre golpes y amenazas. Escuchó las torturas sufridas por su hijo Fernando, que estaba desnudo. Terminó en la Unidad 6 de Rawson.

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