Cataluña desafía a Rajoy y apuesta a votar en el referéndum
El vicepresidente catalán, Oriol Junqueras, garantizó hoy que los ciudadanos catalanes podrán votar el domingo en el referéndum unilateral de secesión, declarado ilegal por la Justicia, incluso si se intentan "cerrar o asaltar colegios electorales", y aseguró que "los resultados tendrán total validez".
En conferencia de prensa en Barcelona, y como muestra de la firme determinación del gobierno de Cataluña de consumar su desafío secesionista, Junqueras, el responsable de Asuntos Exteriores catalán, Raül Romeva, y el vocero del gobierno regional, Jordi Turull, posaron para las cámaras junto a una urna de plástico fabricada específicamente para esta histórica votación.
El gobierno catalán anunció que 5,3 millones de catalanes están habilitados para votar el domingo, en 2.315 centros de votación, donde está previsto que se constituyan 6.249 mesas.
"Si alguien quiere cerrar los centros de votación, los ciudadanos podrán votar; si alguien asalta colegios electorales, o se produce un gesto tan antidemocrático como impedir que los ciudadanos voten, podrán votar. Estamos convencidos de que los resultados tendrán la validez", subrayó Junqueras.
A menos de 48 horas de la convocatoria, todavía no está claro si la policía catalana cumplirá la orden judicial de precintar las escuelas y centros cívicos que fueron designados como puntos de votación por el gobierno catalán.
"Estarán todas las mesas y los ciudadanos podrán votar. Tenga confianza en la buen gestión que todos haremos y en el compromiso de los ciudadanos", insistió el vicepresidente catalán, quien se negó a especificar el mecanismo que se implementará en caso de que efectivamente las fuerzas de seguridad intervengan.
"Los resultados tendrán todo la validez y legitimidad. Cada vez que ha actuado el gobierno central en contra del referéndum se ha reforzado la voluntad de los ciudadanos de Cataluña de votar", añadió Junqueras.
Previamente, el vocero gubernamental Jordi Turull informó sobre el dispositivo previsto para el domingo y aportó los datos más relevantes de cara a la votación y su logística.
"Se votará desde las nueve de la mañana hasta las ocho de la tarde. Hay 5.343.358 catalanes que tienen derecho a voto", dijo.
Asimismo, explicó que habrá 2.315 centros de votación, 6.249 mesas y 7.235 personas implicadas en la celebración de la consulta, pese a la amenaza de que podrían incurrir en un delito a raíz de que se trata de un acto prohibido por el Tribunal Constitucional.
En tanto, el consejero de Asuntos Exteriores, Raül Romeva, quien se dirigió a la prensa en inglés, insistió en el mensaje que Cataluña quiere dar a la comunidad internacional de cara al referéndum unilateral de secesión: "Esto no es sobre independencia sino sobre la democracia. Esta es una herramienta, no es ilegal, no es un crimen", sostuvo.
"Hay dos posiciones, por un lado, la democracia, y por otro, la respuesta represiva", reiteró, confrontando las posturas del gobierno regional catalán y del Ejecutivo central español de Mariano Rajoy, que considera que la votación del 1 de octubre no se puede celebrar porque es ilegal y atenta contra la unidad de España, consagrada en la Constitución.
En conferencia de prensa en Barcelona, y como muestra de la firme determinación del gobierno de Cataluña de consumar su desafío secesionista, Junqueras, el responsable de Asuntos Exteriores catalán, Raül Romeva, y el vocero del gobierno regional, Jordi Turull, posaron para las cámaras junto a una urna de plástico fabricada específicamente para esta histórica votación.
El gobierno catalán anunció que 5,3 millones de catalanes están habilitados para votar el domingo, en 2.315 centros de votación, donde está previsto que se constituyan 6.249 mesas.
"Si alguien quiere cerrar los centros de votación, los ciudadanos podrán votar; si alguien asalta colegios electorales, o se produce un gesto tan antidemocrático como impedir que los ciudadanos voten, podrán votar. Estamos convencidos de que los resultados tendrán la validez", subrayó Junqueras.
A menos de 48 horas de la convocatoria, todavía no está claro si la policía catalana cumplirá la orden judicial de precintar las escuelas y centros cívicos que fueron designados como puntos de votación por el gobierno catalán.
"Estarán todas las mesas y los ciudadanos podrán votar. Tenga confianza en la buen gestión que todos haremos y en el compromiso de los ciudadanos", insistió el vicepresidente catalán, quien se negó a especificar el mecanismo que se implementará en caso de que efectivamente las fuerzas de seguridad intervengan.
"Los resultados tendrán todo la validez y legitimidad. Cada vez que ha actuado el gobierno central en contra del referéndum se ha reforzado la voluntad de los ciudadanos de Cataluña de votar", añadió Junqueras.
Previamente, el vocero gubernamental Jordi Turull informó sobre el dispositivo previsto para el domingo y aportó los datos más relevantes de cara a la votación y su logística.
"Se votará desde las nueve de la mañana hasta las ocho de la tarde. Hay 5.343.358 catalanes que tienen derecho a voto", dijo.
Asimismo, explicó que habrá 2.315 centros de votación, 6.249 mesas y 7.235 personas implicadas en la celebración de la consulta, pese a la amenaza de que podrían incurrir en un delito a raíz de que se trata de un acto prohibido por el Tribunal Constitucional.
En tanto, el consejero de Asuntos Exteriores, Raül Romeva, quien se dirigió a la prensa en inglés, insistió en el mensaje que Cataluña quiere dar a la comunidad internacional de cara al referéndum unilateral de secesión: "Esto no es sobre independencia sino sobre la democracia. Esta es una herramienta, no es ilegal, no es un crimen", sostuvo.
"Hay dos posiciones, por un lado, la democracia, y por otro, la respuesta represiva", reiteró, confrontando las posturas del gobierno regional catalán y del Ejecutivo central español de Mariano Rajoy, que considera que la votación del 1 de octubre no se puede celebrar porque es ilegal y atenta contra la unidad de España, consagrada en la Constitución.