Para la UIA, la ley de Pymes es "absolutamente necesaria"

Al cumplirse un año de la sanción de la Ley 27.264 Programa de Recuperación Productiva, que beneficia al sector de las pequeñas y medianas empresas, autoridades de la Unión Industrial Argentina (UIA) la consideraron hoy como un "hito legislativo" para el sector y una herramienta "absolutamente necesaria" para su desarrollo.

03 OCT 2017 - 16:08 | Actualizado

 

Esta ley es un "un hito dentro de la legislación para las pequeñas y las medianas empresas" que trajo aparejados "beneficios importantísimos" para el segmento industrial pyme, consideró Carlos Abeledo, presidente de Política Tributaria de la UIA.

Martín Rappallini, titular del departamento de pequeñas y medianas industrias por su parte, la consideró como "absolutamente necesaria" para las pymis y resaltó que "hoy es la primera vez que uno ve el comienzo de una ley que apunta fuertemente al desarrollo del sector".

El secretario de Emprendedores y Pymes, del Ministerio de Producción, Mariano Mayer, consideró a la nueva ley como "un logro colectivo que fue posible gracias a la voluntad de escuchar y a la vocación política (por parte del gobierno) de avanzar y lograr los consensos necesarios" en ambas cámaras del Congreso Nacional.

Para el secretario, la ley "fue una prueba de que íbamos en serio" y ponderó que, a un año de vigencia de la ley, "en los primeros números que se están viendo hablamos de los miles de millones de pesos que las pymes están ahorrando en impuestos".

Los conceptos fueron vertidos durante el desarrollo del Seminario de Evaluación, Logros y Asignaturas de la Ley Pyme, cuyo panel estuvo integrado por Carlos Abeledo, presidente de Política Tributaria de la UIA; Martín Rappallini, titular del Departamento PyMI de la unión fabril y por Mariano Mayer, secretario de Emprendedores y Pymes del Ministerio de Producción.

"Estamos viviendo un cambio de sistema económico donde el desafío es integrarnos al mundo y reacomodar el sistema impositivo y laboral", agregó Rappallini, quien indicó sobre la evolución en el marco de la ley que se hace necesario el desarrollo de un sector de pymes "sustentables" apoyadas en políticas públicas.

"No conozco país que no haya desarrollado grandes sectores de pymes si no hay una política activa por parte del estado para que el sector crezca", opinó.

Mariano Mayer recordó que el ahorro en impuestos para las pymes alcanzó los $ 6.000 millones y que la financiación del IVA, por un monto de $ 5.000 millones, ayudó a "mejorar la caja" de las pymes.

Por otro lado, el crédito alcanzó, en el mismo período, los $ 13.000 millones, en préstamos otorgados por el Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE).

Respecto a los reclamos planteados por los industriales sobre una ley que consideraron "con buenas intenciones", el eje del debate se centró en las dificultados que aún persisten a pesar de la sanción de la ley.

El secretario Pymi de la UIA reconoció que las microindustrias del sector están atravesando aún un momento difícil, aunque ponderó el reconocimiento por parte del gobierno de que "hay que seguir cambiando" lo que definió como "la gran burocracia" del sistema.

Dentro de las trabas y dificultades burocráticas, Rappallini se refirió a las dificultades para realizar los diferentes trámites ante los organismos del estado y pidió "agilizarlos" para que las pymes "se focalicen en desarrollar toda su potencialidad".

Además del aspecto burocrático, los costos laborales fueron otro punto considerado por la UIA como un "inconveniente" que atraviesa el sector, además de la demora en la obtención de financiamiento a largo plazo.

"Para poder generar una pyme sustentable y competitiva se tienen que invertir entre US$ 120.000 y US$ 200.000 para generar un puesto de trabajo. Esto requiere un esfuerzo muy grande, por lo que necesitamos políticas crediticias, fiscales y educativas articuladas, que sean duraderas en el tiempo", indicó.

Destacó también la vocación industrial argentina recordando que "hace algunos años, cualquier persona que quería evolucionar pensaba en tener una pequeña fábrica. Esos valores hay que volver a recuperarlos en un momento que la clase media empieza a soñar con tener una fábrica, quizás hoy con otra mirada, pero lo importante es que la clase media empieza a soñar con ser industrial".

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03 OCT 2017 - 16:08

 

Esta ley es un "un hito dentro de la legislación para las pequeñas y las medianas empresas" que trajo aparejados "beneficios importantísimos" para el segmento industrial pyme, consideró Carlos Abeledo, presidente de Política Tributaria de la UIA.

Martín Rappallini, titular del departamento de pequeñas y medianas industrias por su parte, la consideró como "absolutamente necesaria" para las pymis y resaltó que "hoy es la primera vez que uno ve el comienzo de una ley que apunta fuertemente al desarrollo del sector".

El secretario de Emprendedores y Pymes, del Ministerio de Producción, Mariano Mayer, consideró a la nueva ley como "un logro colectivo que fue posible gracias a la voluntad de escuchar y a la vocación política (por parte del gobierno) de avanzar y lograr los consensos necesarios" en ambas cámaras del Congreso Nacional.

Para el secretario, la ley "fue una prueba de que íbamos en serio" y ponderó que, a un año de vigencia de la ley, "en los primeros números que se están viendo hablamos de los miles de millones de pesos que las pymes están ahorrando en impuestos".

Los conceptos fueron vertidos durante el desarrollo del Seminario de Evaluación, Logros y Asignaturas de la Ley Pyme, cuyo panel estuvo integrado por Carlos Abeledo, presidente de Política Tributaria de la UIA; Martín Rappallini, titular del Departamento PyMI de la unión fabril y por Mariano Mayer, secretario de Emprendedores y Pymes del Ministerio de Producción.

"Estamos viviendo un cambio de sistema económico donde el desafío es integrarnos al mundo y reacomodar el sistema impositivo y laboral", agregó Rappallini, quien indicó sobre la evolución en el marco de la ley que se hace necesario el desarrollo de un sector de pymes "sustentables" apoyadas en políticas públicas.

"No conozco país que no haya desarrollado grandes sectores de pymes si no hay una política activa por parte del estado para que el sector crezca", opinó.

Mariano Mayer recordó que el ahorro en impuestos para las pymes alcanzó los $ 6.000 millones y que la financiación del IVA, por un monto de $ 5.000 millones, ayudó a "mejorar la caja" de las pymes.

Por otro lado, el crédito alcanzó, en el mismo período, los $ 13.000 millones, en préstamos otorgados por el Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE).

Respecto a los reclamos planteados por los industriales sobre una ley que consideraron "con buenas intenciones", el eje del debate se centró en las dificultados que aún persisten a pesar de la sanción de la ley.

El secretario Pymi de la UIA reconoció que las microindustrias del sector están atravesando aún un momento difícil, aunque ponderó el reconocimiento por parte del gobierno de que "hay que seguir cambiando" lo que definió como "la gran burocracia" del sistema.

Dentro de las trabas y dificultades burocráticas, Rappallini se refirió a las dificultades para realizar los diferentes trámites ante los organismos del estado y pidió "agilizarlos" para que las pymes "se focalicen en desarrollar toda su potencialidad".

Además del aspecto burocrático, los costos laborales fueron otro punto considerado por la UIA como un "inconveniente" que atraviesa el sector, además de la demora en la obtención de financiamiento a largo plazo.

"Para poder generar una pyme sustentable y competitiva se tienen que invertir entre US$ 120.000 y US$ 200.000 para generar un puesto de trabajo. Esto requiere un esfuerzo muy grande, por lo que necesitamos políticas crediticias, fiscales y educativas articuladas, que sean duraderas en el tiempo", indicó.

Destacó también la vocación industrial argentina recordando que "hace algunos años, cualquier persona que quería evolucionar pensaba en tener una pequeña fábrica. Esos valores hay que volver a recuperarlos en un momento que la clase media empieza a soñar con tener una fábrica, quizás hoy con otra mirada, pero lo importante es que la clase media empieza a soñar con ser industrial".


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