El hecho ocurrió el martes a la noche en una casa ubicada en la calle Lezana Norte 916, en el barrio Luz y Fuerza, zona norte de Trelew, en momentos en que Loncón se disponía a dormir.
En esas circunstancias dos personas con los rostros cubiertos hombres irrumpieron en la morada y sorprendieron a la víctima y a la mujer que se encontraba con él en su domicilio.
Según el testimonio que Loncón dio a la policía uno de los sujetos portaba un revolver y el otro un cuchillo. Ambos lo amenazaron para que les diera el dinero ya que al parecer contaban con el dato de que la víctima había realizado una transacción comercial horas antes.
Tras encerrarlo en un baño e intimidarlos con las armas, revolvieron la casa hasta que se dieron a la fuga con un botín que rondaría los $ 100 mil, de los cuales gran parte eran de la venta de un automóvil y el resto de gestiones por la tarea del vecino en el centro de jubilados.
Una vez que los delincuentes se fueron del lugar, la víctima llamó a la policía para dar cuenta de lo sucedido. Si bien no fue hubo personas heridas, se debió convocar a una ambulancia ya que la víctima se encontraba en estado de shock.
El hecho ocurrió el martes a la noche en una casa ubicada en la calle Lezana Norte 916, en el barrio Luz y Fuerza, zona norte de Trelew, en momentos en que Loncón se disponía a dormir.
En esas circunstancias dos personas con los rostros cubiertos hombres irrumpieron en la morada y sorprendieron a la víctima y a la mujer que se encontraba con él en su domicilio.
Según el testimonio que Loncón dio a la policía uno de los sujetos portaba un revolver y el otro un cuchillo. Ambos lo amenazaron para que les diera el dinero ya que al parecer contaban con el dato de que la víctima había realizado una transacción comercial horas antes.
Tras encerrarlo en un baño e intimidarlos con las armas, revolvieron la casa hasta que se dieron a la fuga con un botín que rondaría los $ 100 mil, de los cuales gran parte eran de la venta de un automóvil y el resto de gestiones por la tarea del vecino en el centro de jubilados.
Una vez que los delincuentes se fueron del lugar, la víctima llamó a la policía para dar cuenta de lo sucedido. Si bien no fue hubo personas heridas, se debió convocar a una ambulancia ya que la víctima se encontraba en estado de shock.