Cordillera: otra vez las llamas fuera de control

El fuego ya arrasó con más de 150 hectáreas en la zona de Corcovado. El siniestro comenzó el miércoles y hay preocupación por los cascos de las estancias.

Desde el aire se pudo corroborar cómo el frente avanzaba hacia la zona rural de la ladera sur del Corcovado.
01 DIC 2017 - 21:19 | Actualizado

Un descontrolado incendio sigue causando estragos desde el miércoles en Corcovado y hasta anoche ya eran más de 150 las hectáreas quemadas. Los mecanismos del Estado para aplacar el avance de las llamas no resultaron al cabo de tres días de calor e incertidumbre. Seguían llegando hombres y mujeres de distintos puntos de la región para ayudar a los brigadistas locales.  Bomberos de la zona trabajaban con herramientas manuales, equipos de agua y el apoyo de una autobomba  para controlar focos activos, extinguir puntos calientes y hacer cortafuegos. Se centraron en la cabeza, el flanco derecho y la cola del incendio.
El Gobierno nacional ayer enviaba recursos para intentar aplacar el fuego.
Por otro lado, el equipo realiza tareas de limpieza de los accesos al foco secundario ubicado al Sur del Cañadón Arroyo Poncho Moro para que sea posible acercar al personal con móviles. Se prevé el ingreso de maquinaria pesada de Vialidad Nacional para facilitar la tarea.
En las estancias de Poncho Moro y de la familia Sambueza había gran tensión ya que el foco podría afectar sus construcciones. Como agravante, se esperan tormentas eléctricas en la zona montañosa del centro norte chubutense.
Ayer trabajaban desde las líneas cortafuego alrededor del lodge Poncho Moro para enfriar puntos calientes. En forma complementaria, 2 aviones cisterna provistos por el Servicio Nacional de Manejo del Fuego continúan haciendo lanzamientos con la asistencia de una autobomba del SPMF al momento de recargar las aeronaves en el aeropuerto de Esquel.
Por la tarde ingresaban a la zona del incendio 2 cuadrillas de la Brigada del Servicio Nacional de Manejo del Fuego para prestar colaboración a los 64 combatientes de Chubut, con el apoyo de una autobomba forestal.  
Colaboran con la tarea personal de apoyo técnico, logístico y administrativo del SPMF y la Subsecretaría de Bosques e Incendios, el Servicio Nacional de Manejo del Fuego, el Servicio Meteorológico Nacional, la Dirección General de Defensa Civil de Chubut, el municipio de Corcovado, la Administración de Vialidad Provincial, el Ministerio de Educación, la escuela Corcovado Sur, Bomberos Voluntarios ANAC y pobladores de la zona.
Pronóstico adverso

De acuerdo con el pronóstico meteorológico, ayer la temperatura alcanzaría los 27°, y el viento -de dirección variable- los 20 kilómetros por hora A partir de la tarde-noche se esperabann fenómenos de inestabilidad en la zona del incendio, con probabilidad de lluvias aisladas. Asimismo, ráfagas que podrían provocar el comportamiento errático del fuego y una alta velocidad de propagación.
Todas estas condiciones climáticas son normales en Chubut. Evaluaban si los recursos del Estado, a sabiendas de que el clima es severo, alcanzarían para estar preparados. Hace cuatro años que este escenario se repite en Chubut. Se apunta a la rudeza del clima y a turistas desprevenidos.#

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Desde el aire se pudo corroborar cómo el frente avanzaba hacia la zona rural de la ladera sur del Corcovado.
01 DIC 2017 - 21:19

Un descontrolado incendio sigue causando estragos desde el miércoles en Corcovado y hasta anoche ya eran más de 150 las hectáreas quemadas. Los mecanismos del Estado para aplacar el avance de las llamas no resultaron al cabo de tres días de calor e incertidumbre. Seguían llegando hombres y mujeres de distintos puntos de la región para ayudar a los brigadistas locales.  Bomberos de la zona trabajaban con herramientas manuales, equipos de agua y el apoyo de una autobomba  para controlar focos activos, extinguir puntos calientes y hacer cortafuegos. Se centraron en la cabeza, el flanco derecho y la cola del incendio.
El Gobierno nacional ayer enviaba recursos para intentar aplacar el fuego.
Por otro lado, el equipo realiza tareas de limpieza de los accesos al foco secundario ubicado al Sur del Cañadón Arroyo Poncho Moro para que sea posible acercar al personal con móviles. Se prevé el ingreso de maquinaria pesada de Vialidad Nacional para facilitar la tarea.
En las estancias de Poncho Moro y de la familia Sambueza había gran tensión ya que el foco podría afectar sus construcciones. Como agravante, se esperan tormentas eléctricas en la zona montañosa del centro norte chubutense.
Ayer trabajaban desde las líneas cortafuego alrededor del lodge Poncho Moro para enfriar puntos calientes. En forma complementaria, 2 aviones cisterna provistos por el Servicio Nacional de Manejo del Fuego continúan haciendo lanzamientos con la asistencia de una autobomba del SPMF al momento de recargar las aeronaves en el aeropuerto de Esquel.
Por la tarde ingresaban a la zona del incendio 2 cuadrillas de la Brigada del Servicio Nacional de Manejo del Fuego para prestar colaboración a los 64 combatientes de Chubut, con el apoyo de una autobomba forestal.  
Colaboran con la tarea personal de apoyo técnico, logístico y administrativo del SPMF y la Subsecretaría de Bosques e Incendios, el Servicio Nacional de Manejo del Fuego, el Servicio Meteorológico Nacional, la Dirección General de Defensa Civil de Chubut, el municipio de Corcovado, la Administración de Vialidad Provincial, el Ministerio de Educación, la escuela Corcovado Sur, Bomberos Voluntarios ANAC y pobladores de la zona.
Pronóstico adverso

De acuerdo con el pronóstico meteorológico, ayer la temperatura alcanzaría los 27°, y el viento -de dirección variable- los 20 kilómetros por hora A partir de la tarde-noche se esperabann fenómenos de inestabilidad en la zona del incendio, con probabilidad de lluvias aisladas. Asimismo, ráfagas que podrían provocar el comportamiento errático del fuego y una alta velocidad de propagación.
Todas estas condiciones climáticas son normales en Chubut. Evaluaban si los recursos del Estado, a sabiendas de que el clima es severo, alcanzarían para estar preparados. Hace cuatro años que este escenario se repite en Chubut. Se apunta a la rudeza del clima y a turistas desprevenidos.#


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