“Lole” Gajardo condujo a Germinal hacia la final
Germinal lo hizo, clasificó a la final del torneo Clausura de la Liga del Valle dejando en el camino a Deportivo Roca, su clásico rival, por la vía de los penales.
El partido disputado en la cancha de tierra de La Ribera terminó igualado 1 a 1 con goles de Juan Lorenzo y Fernando Chacano. En la definición desde los doce pasos, el “Verde” contó con el enormísimo Américo Gajardo, que contuvo dos remates y acabó dándole el triunfo a Germinal.
El partido fue duro, friccionado, sin claridad, sin peligro en las áreas, con expulsados, golpes, digno de una cancha que insulta el buen fútbol. En ese potrero de piedras y arcilla, las emociones aparecieron sobre el final del partido.
asta ese entonces, la jugada más clara de todo el trámite la había tenido Rodrigo Linares con un giro espléndido y un remate que buscaba el ángulo pero que Cristian Méndez desvió al córner con una volada espectacular.
A los 44 minutos, Lorenzo ejecutó un tiro libre volcado sobre la derecha en tres cuartos de cancha. El envío buscaba alguna cabeza, pero la pelota sorprendió a Méndez en el primer palo y se le escabulló entre las piernas.
Ninguno de los dos equipos había hecho méritos para ganar en el tiempo regular, por eso el gol de Germinal cayó mal en el público presente de Roca. Pero la “V Azulada”, con la cabeza en alto, fue al frente para intentar al menos inquietar el arco custodiado por “Lole” Gajardo.
El árbitro adicionó 5 minutos. Vencido ese tiempo, al borde del pitazo final, un pelotazo dudoso acabó en penal sancionado a favor de Roca. Ante la incredulidad de la parcialidad germinalista, Fernando Chacano ejecutó el penal con precisión para poner el 1 a 1 y llevar la historia a los penales.
El penal de Chacano fue clave: si bien Gajardo no pudo atajarlo, sí le adivinó el palo. Por eso en la serie de penales, con Chacano como primer pateador en Roca, Gajardo sabía que tenía una chance. Y se lo atajó. Luego contuvo también el penal de Iralde.
En Germinal convirtieron Pérez, Lorenzo y Gómez. Linares estrelló su tiro en el travesaño. Después del segundo penal atajado de Gajardo, el capitán Darío Pellejero se hizo cargo de la pelota más caliente. El uruguayo no dudó: la mandó al fondo de la red y desató el festejo verde en suelo capitalino.
El partido disputado en la cancha de tierra de La Ribera terminó igualado 1 a 1 con goles de Juan Lorenzo y Fernando Chacano. En la definición desde los doce pasos, el “Verde” contó con el enormísimo Américo Gajardo, que contuvo dos remates y acabó dándole el triunfo a Germinal.
El partido fue duro, friccionado, sin claridad, sin peligro en las áreas, con expulsados, golpes, digno de una cancha que insulta el buen fútbol. En ese potrero de piedras y arcilla, las emociones aparecieron sobre el final del partido.
asta ese entonces, la jugada más clara de todo el trámite la había tenido Rodrigo Linares con un giro espléndido y un remate que buscaba el ángulo pero que Cristian Méndez desvió al córner con una volada espectacular.
A los 44 minutos, Lorenzo ejecutó un tiro libre volcado sobre la derecha en tres cuartos de cancha. El envío buscaba alguna cabeza, pero la pelota sorprendió a Méndez en el primer palo y se le escabulló entre las piernas.
Ninguno de los dos equipos había hecho méritos para ganar en el tiempo regular, por eso el gol de Germinal cayó mal en el público presente de Roca. Pero la “V Azulada”, con la cabeza en alto, fue al frente para intentar al menos inquietar el arco custodiado por “Lole” Gajardo.
El árbitro adicionó 5 minutos. Vencido ese tiempo, al borde del pitazo final, un pelotazo dudoso acabó en penal sancionado a favor de Roca. Ante la incredulidad de la parcialidad germinalista, Fernando Chacano ejecutó el penal con precisión para poner el 1 a 1 y llevar la historia a los penales.
El penal de Chacano fue clave: si bien Gajardo no pudo atajarlo, sí le adivinó el palo. Por eso en la serie de penales, con Chacano como primer pateador en Roca, Gajardo sabía que tenía una chance. Y se lo atajó. Luego contuvo también el penal de Iralde.
En Germinal convirtieron Pérez, Lorenzo y Gómez. Linares estrelló su tiro en el travesaño. Después del segundo penal atajado de Gajardo, el capitán Darío Pellejero se hizo cargo de la pelota más caliente. El uruguayo no dudó: la mandó al fondo de la red y desató el festejo verde en suelo capitalino.