El gobernador de Río Negro y un sigiloso viaje a Holanda por un reactor nuclear
Alberto Weretilneck integra una comitiva con directivos de la empresa Invap. Prevén cerrar un contrato de 350 a 400 millones de euros. La empresa estatal se asoció a una firma holandesa.
El gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck, viajó a Holanda con una delegación de la empresa Invap por el proceso final para la construcción de un reactor nuclear de investigación y producción de radioisótopos Pallas, con un costo de 350 a 400 millones de euros. El agosto pasado, el Invap -con socios holandeses- formalizó su oferta licitatoria, compulsando con empresas francesa Tecnicatom y la surcoreana Kaeri.
En 2009, la sociedad rionegrina ya se había adjudicado esa construcción pero, luego, el gobierno holandés suspendió esa operación por la crisis económica mundial. En marzo se volvió a relicitar y el Invap se presentó, con expectativas para quedarse con su ejecución. Desde un principio, la conducción del Invap -que representan Héctor Otheguy y Horacio Osuna- otorgaron un componente central al respaldo institucional y político al proyecto entonces se sucedieron notas y acompamientos de Nación y la provincia.
En marzo pasado, el presidente Mauricio Macri visitó Holanda y, entre otros objetivos, se focalizó en ese contrato nuclear. Se preveía sumar a Weretilneck en esa comitiva pero, luego, se lo reemplazó por el conocido viaje a China de mayo para el anuncio de la central nuclear. Ahora, sorpresivamente, la partida de Weretilneck a Holanda no tuvo ninguna difusión. Trascendió recién ayer cuando el rionegrino ya había aterrizado en Amsterdan. No existió gacetilla gubernamental. Algunas fuentes justificaban esa llamativa reserva en pedidos de las autoridades holandesas mientras otras negaban enfaticamente que no se sumaría a la comitiva del presidente Macri en Davos.
El mandatario provincial estaría de regreso en la provincia en el fin de semana. El Invap pretende que el contrato holandés signifique mayor actividad después del freno del desarrollo satelital. En ocasión de la oferta, Weretilneck explicaba que esa propuesta “se enmarca en esta acción, como las construcciones de satélites para Estados Unidos y Malasia. La idea es no sólo producir tecnología para la Argentina, sino también para el extranjero, lo cual sí garantiza el empleo y la inserción internacional”.
(Fuente: Diario Río Negro)
El gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck, viajó a Holanda con una delegación de la empresa Invap por el proceso final para la construcción de un reactor nuclear de investigación y producción de radioisótopos Pallas, con un costo de 350 a 400 millones de euros. El agosto pasado, el Invap -con socios holandeses- formalizó su oferta licitatoria, compulsando con empresas francesa Tecnicatom y la surcoreana Kaeri.
En 2009, la sociedad rionegrina ya se había adjudicado esa construcción pero, luego, el gobierno holandés suspendió esa operación por la crisis económica mundial. En marzo se volvió a relicitar y el Invap se presentó, con expectativas para quedarse con su ejecución. Desde un principio, la conducción del Invap -que representan Héctor Otheguy y Horacio Osuna- otorgaron un componente central al respaldo institucional y político al proyecto entonces se sucedieron notas y acompamientos de Nación y la provincia.
En marzo pasado, el presidente Mauricio Macri visitó Holanda y, entre otros objetivos, se focalizó en ese contrato nuclear. Se preveía sumar a Weretilneck en esa comitiva pero, luego, se lo reemplazó por el conocido viaje a China de mayo para el anuncio de la central nuclear. Ahora, sorpresivamente, la partida de Weretilneck a Holanda no tuvo ninguna difusión. Trascendió recién ayer cuando el rionegrino ya había aterrizado en Amsterdan. No existió gacetilla gubernamental. Algunas fuentes justificaban esa llamativa reserva en pedidos de las autoridades holandesas mientras otras negaban enfaticamente que no se sumaría a la comitiva del presidente Macri en Davos.
El mandatario provincial estaría de regreso en la provincia en el fin de semana. El Invap pretende que el contrato holandés signifique mayor actividad después del freno del desarrollo satelital. En ocasión de la oferta, Weretilneck explicaba que esa propuesta “se enmarca en esta acción, como las construcciones de satélites para Estados Unidos y Malasia. La idea es no sólo producir tecnología para la Argentina, sino también para el extranjero, lo cual sí garantiza el empleo y la inserción internacional”.
(Fuente: Diario Río Negro)