"Estaba lúcida y fatigada por tanto caminar. Ella dijo que hacía mucho frío", indicó el comisario general y jefe de la Policía de Misiones, Manuel Céspedes, en declaraciones a la prensa.
La Policía intervino a partir de la denuncia de familiares de la niña, donde señalaron que se encontraba vendiendo choclos junto a otra pequeña de siete, entre el barrio Cainguás y la zona de Línea 45, cuando un hombre se les acercó, primero con la excusa de la compra del cereal, aunque luego procuró llevárselas por la fuerza.
Mientras la mayor de las nenas logró escapar, la menor, llamada Antonela Nahiara, fue secuestrada por el hombre, según indicaron voceros de la Policía local.
Una vez que los familiares realizaron la denuncia del caso se inició un rastrillaje con importante despliegue policial por varios puntos de esa localidad que tiene unos 6.000 habitantes y está situada en el centro geográfico de la provincia.
En tanto, en primer lugar se detuvo a un joven de 22 años, sospechoso de haber participado en el secuestro, pero luego fue liberado, y posteriormente se detuvo a otro de 27 años sobre el que existirían indicios sobre su responsabilidad en el secuestro.
Entre otras pruebas, trascendió que se habría hallado una remera perteneciente al sospechoso en el lugar en el que fue vista por última vez la niña.
La búsqueda, que incluyó una extensa zona rural, siguió toda la noche, hasta que en la mañana de este martes se encontró el pantalón que usaba Antonela y una de sus ojotas.
Poco después, la nena fue hallada desnuda y llorando, mientras caminaba por una calle de tierra situada a unos cuatro kilómetros del lugar en el que se había sido raptada, por lo que de inmediato policías la llevaron a un hospital de la zona.
La niña presentaba algunas escoriaciones, pero no tenía lesiones de consideración.
En tanto el detenido fue puesto a disposición de la Justicia en el marco de la causa por privación ilegítima de la libertad y delito contra la integridad sexual.
"Estaba lúcida y fatigada por tanto caminar. Ella dijo que hacía mucho frío", indicó el comisario general y jefe de la Policía de Misiones, Manuel Céspedes, en declaraciones a la prensa.
La Policía intervino a partir de la denuncia de familiares de la niña, donde señalaron que se encontraba vendiendo choclos junto a otra pequeña de siete, entre el barrio Cainguás y la zona de Línea 45, cuando un hombre se les acercó, primero con la excusa de la compra del cereal, aunque luego procuró llevárselas por la fuerza.
Mientras la mayor de las nenas logró escapar, la menor, llamada Antonela Nahiara, fue secuestrada por el hombre, según indicaron voceros de la Policía local.
Una vez que los familiares realizaron la denuncia del caso se inició un rastrillaje con importante despliegue policial por varios puntos de esa localidad que tiene unos 6.000 habitantes y está situada en el centro geográfico de la provincia.
En tanto, en primer lugar se detuvo a un joven de 22 años, sospechoso de haber participado en el secuestro, pero luego fue liberado, y posteriormente se detuvo a otro de 27 años sobre el que existirían indicios sobre su responsabilidad en el secuestro.
Entre otras pruebas, trascendió que se habría hallado una remera perteneciente al sospechoso en el lugar en el que fue vista por última vez la niña.
La búsqueda, que incluyó una extensa zona rural, siguió toda la noche, hasta que en la mañana de este martes se encontró el pantalón que usaba Antonela y una de sus ojotas.
Poco después, la nena fue hallada desnuda y llorando, mientras caminaba por una calle de tierra situada a unos cuatro kilómetros del lugar en el que se había sido raptada, por lo que de inmediato policías la llevaron a un hospital de la zona.
La niña presentaba algunas escoriaciones, pero no tenía lesiones de consideración.
En tanto el detenido fue puesto a disposición de la Justicia en el marco de la causa por privación ilegítima de la libertad y delito contra la integridad sexual.