El capitán que rescató a su colega muerto lo recordó como "excelente persona"

El capitán de barco Rodolfo Muñoz, quien rescató del mar el cadáver de su colega Salvador Taliercio tras la desaparición del pesquero Rigel en Chubut, lo recordó hoy como "una excelente persona" y un "profesional intachable".

12 JUN 2018 - 23:05 | Actualizado

Asimismo, lamentó la muerte de su colega en medio de un "temporal terrible" como el del viernes en el Mar Argentino e instó a los empresarios a "hacer barcos nuevos urgente".

Muñoz, capitán del barco José Américo, quien conocía a Taliercio desde niño relató a Télam su estupor porque fue el encargado de reconocer su cuerpo cuando fue recuperado del mar el último sábado, a unos 200 kilómetros al sudeste de la localidad chubutense de Rawson.

"A mí, directamente me destruyó encontrarlo. Me mató verlo y reconocerlo, me puso muy mal. Pero yo tenía que buscarlo. Lo reconocí inmediatamente, cuando lo estaban subiendo con la grúa", señaló Muñoz en el marco cuarto día del operativo de búsqueda del buque siniestrado y ocho tripulantes.

Muñoz definió a Taliercio como "una excelente persona, muy amable, un profesional y un capitán intachable".

Tras recordarlo por su sobrenombre, señaló que "Toti no era bueno: era recontra bueno. No he visto dos tipos que tengan la bondad y la sinceridad que tenía él. Te daba todo lo que podía. Siempre con una sonrisa en la cara. Y aparte era un tipo muy querido en el ambiente, de familia de pescadores, muy responsable".

Muñoz aseguró que trabajó con Taliercio "cuando estaba en otro barco, y era un tipo con mucha experiencia, lo que pasa es que el temporal fue terrible".

El José Américo, un buque congelador de 47 metros de largo, navegaba a unos 130 kilómetros al sur de la última posición del Rigel cuando se reportó la emergencia en medio de un mar embravecido.

"Estaba muy feo. Me quedé capeando el temporal y después arranqué para Mar del Plata. Y cuando pasó esto, nos sumamos a la búsqueda. Pudimos llegar a eso de las 10 de la mañana del sábado a la zona", explicó.

Relató además que cerca de las 13.45 de ese día, otro pesquero en el área de búsqueda comunicó el hallazgo del cuerpo flotando entre canastos, cajones, frutas y maderas, pero ante la imposibilidad de rescatarlo avisó al José Américo, que navegaba a unos 300 metros.

"Como yo tengo más capacidad de maniobra, le digo `bueno, dejame a mí`. Tiraron un salvavidas circular, paré, esperé que el viento me arrimara al cuerpo y lo enganchamos", detalló.

El encargado de enlazar el cuerpo fue un marinero equipado con un traje antiexposición, y luego el capitán del Rigel fue retirado del agua con una grúa.

"Cuando lo terminé de levantar eran las 14. Estaba en remera y sin pantalones, seguramente porque se salen en el agua por el peso. Lo mismo me acuerdo que pasó con los muchachos del Repunte", recordó Muñoz, quien un año atrás comandaba el María Liliana, buque que rescató vivo a uno de los 12 tripulantes de ese pesquero hundido.

La hipótesis de este capitán es que el temporal "no les dio tiempo absolutamente a nada" a los marineros del Rigel.

"A Toty lo debe haber despedido el barco. Porque no se halló ningún otro cuerpo. Buscamos la balsa por todos lados y no había nada. Se debe haber dado vuelta y a él lo despidió", estimó el experto marino.

Y, agregó: "Fue una fatalidad porque él era un tipo responsable. Tiene dos varones adolescentes y una hija más chica. Yo lo conozco desde chiquitito, a él y al padre, Luis, que es vecino mio. Lo veía siempre que pasaba y nos poníamos a charlar. Lo he visto jugar en la pelopincho de chiquito".

En cuanto al estado del buque siniestrado, Muñoz dijo que Taliercio era "dueño del barco con el padre, y no va a salir con algo que no está en condiciones, no se va a suicidar, lo que pasa es que fue terrible el estado del mar".

"Y lo que hay que decir además de ahora en adelante es que hay que hacer barcos nuevos urgente. No podés salir con un barco de ese tipo a un mar que está salvaje", advirtió.

En ese marco, ejemplificó: "Te doy un plazo de cinco años, te doy crédito y hagan barcos nuevos. Son barcos de 60 años, 50 años, y tienen sus falencias. ¿Cómo hace España? Te agarra y dice `señores el barco tiene 25 años, no puede navegar más`. En Europa después no te dejan navegar seas pesquero, velero o lo que sea".

"No puede ser: los colectivos y los taxis acá tienen vencimiento, pero hay barcos de 70 años y los dejan salir, y es una locura", alertó el capitán del José Américo.

El Rigel zarpó el martes 5 de junio de Mar del Plata para la pesca de langostinos en el sur, con una tripulación de ocho hombres al mando de Taliercio, y permanece desaparecido desde el viernes.

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12 JUN 2018 - 23:05

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Muñoz, capitán del barco José Américo, quien conocía a Taliercio desde niño relató a Télam su estupor porque fue el encargado de reconocer su cuerpo cuando fue recuperado del mar el último sábado, a unos 200 kilómetros al sudeste de la localidad chubutense de Rawson.

"A mí, directamente me destruyó encontrarlo. Me mató verlo y reconocerlo, me puso muy mal. Pero yo tenía que buscarlo. Lo reconocí inmediatamente, cuando lo estaban subiendo con la grúa", señaló Muñoz en el marco cuarto día del operativo de búsqueda del buque siniestrado y ocho tripulantes.

Muñoz definió a Taliercio como "una excelente persona, muy amable, un profesional y un capitán intachable".

Tras recordarlo por su sobrenombre, señaló que "Toti no era bueno: era recontra bueno. No he visto dos tipos que tengan la bondad y la sinceridad que tenía él. Te daba todo lo que podía. Siempre con una sonrisa en la cara. Y aparte era un tipo muy querido en el ambiente, de familia de pescadores, muy responsable".

Muñoz aseguró que trabajó con Taliercio "cuando estaba en otro barco, y era un tipo con mucha experiencia, lo que pasa es que el temporal fue terrible".

El José Américo, un buque congelador de 47 metros de largo, navegaba a unos 130 kilómetros al sur de la última posición del Rigel cuando se reportó la emergencia en medio de un mar embravecido.

"Estaba muy feo. Me quedé capeando el temporal y después arranqué para Mar del Plata. Y cuando pasó esto, nos sumamos a la búsqueda. Pudimos llegar a eso de las 10 de la mañana del sábado a la zona", explicó.

Relató además que cerca de las 13.45 de ese día, otro pesquero en el área de búsqueda comunicó el hallazgo del cuerpo flotando entre canastos, cajones, frutas y maderas, pero ante la imposibilidad de rescatarlo avisó al José Américo, que navegaba a unos 300 metros.

"Como yo tengo más capacidad de maniobra, le digo `bueno, dejame a mí`. Tiraron un salvavidas circular, paré, esperé que el viento me arrimara al cuerpo y lo enganchamos", detalló.

El encargado de enlazar el cuerpo fue un marinero equipado con un traje antiexposición, y luego el capitán del Rigel fue retirado del agua con una grúa.

"Cuando lo terminé de levantar eran las 14. Estaba en remera y sin pantalones, seguramente porque se salen en el agua por el peso. Lo mismo me acuerdo que pasó con los muchachos del Repunte", recordó Muñoz, quien un año atrás comandaba el María Liliana, buque que rescató vivo a uno de los 12 tripulantes de ese pesquero hundido.

La hipótesis de este capitán es que el temporal "no les dio tiempo absolutamente a nada" a los marineros del Rigel.

"A Toty lo debe haber despedido el barco. Porque no se halló ningún otro cuerpo. Buscamos la balsa por todos lados y no había nada. Se debe haber dado vuelta y a él lo despidió", estimó el experto marino.

Y, agregó: "Fue una fatalidad porque él era un tipo responsable. Tiene dos varones adolescentes y una hija más chica. Yo lo conozco desde chiquitito, a él y al padre, Luis, que es vecino mio. Lo veía siempre que pasaba y nos poníamos a charlar. Lo he visto jugar en la pelopincho de chiquito".

En cuanto al estado del buque siniestrado, Muñoz dijo que Taliercio era "dueño del barco con el padre, y no va a salir con algo que no está en condiciones, no se va a suicidar, lo que pasa es que fue terrible el estado del mar".

"Y lo que hay que decir además de ahora en adelante es que hay que hacer barcos nuevos urgente. No podés salir con un barco de ese tipo a un mar que está salvaje", advirtió.

En ese marco, ejemplificó: "Te doy un plazo de cinco años, te doy crédito y hagan barcos nuevos. Son barcos de 60 años, 50 años, y tienen sus falencias. ¿Cómo hace España? Te agarra y dice `señores el barco tiene 25 años, no puede navegar más`. En Europa después no te dejan navegar seas pesquero, velero o lo que sea".

"No puede ser: los colectivos y los taxis acá tienen vencimiento, pero hay barcos de 70 años y los dejan salir, y es una locura", alertó el capitán del José Américo.

El Rigel zarpó el martes 5 de junio de Mar del Plata para la pesca de langostinos en el sur, con una tripulación de ocho hombres al mando de Taliercio, y permanece desaparecido desde el viernes.


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