El inconveniente está en la Dirección de Tierras Fiscales. Pero la responsable del área les ha comunicado que “no trabaja fuera del municipio”. El sábado a las 3.30 se cayó el techo de una casa precaria, y “fueron a mi casa los vecinos de malhumor, y hasta intentaron agredirme, cuando la responsabilidad es del Estado. Los presidentes de barrios hacemos hasta donde podemos”.
Cuando unos jóvenes decidieron construir la casita se les dijo que no se podía en ese sitio, y lo hicieron igual. Ahora se cayó el techo, y le exigieron a él chapas y tirantes. “El sábado a la mañana la llamé a la secretaria de Desarrollo Social, Ingrid Iglesias, para una ayuda, y me contestó que hable con la subsecretaria de Gobierno, Evelin Austin, pero no se puede hacer nada porque son tierras fiscales”, afirmó Sepúlveda.
El año pasado se mudó a 25 familias que estaban en riesgo al pie de un cerro en el barrio, por la caída de rocas. Las llevaron al plan de 61 viviendas en barrio Badén. El compromiso firmado era derribar las casas que quedaban, y así se cumplió, excepto una, usurpada. El riesgo sigue y se espera en algún momento que el IPV erradique a 6 familias más, aunque mucha gente arraigada en el sector no se quiere ir. Otro gran problema es la alta desocupación. La mayoría de los vecinos se dedican a la construcción, y no hay obra pública ni changas. En la zona rige la veda invernal.#
El inconveniente está en la Dirección de Tierras Fiscales. Pero la responsable del área les ha comunicado que “no trabaja fuera del municipio”. El sábado a las 3.30 se cayó el techo de una casa precaria, y “fueron a mi casa los vecinos de malhumor, y hasta intentaron agredirme, cuando la responsabilidad es del Estado. Los presidentes de barrios hacemos hasta donde podemos”.
Cuando unos jóvenes decidieron construir la casita se les dijo que no se podía en ese sitio, y lo hicieron igual. Ahora se cayó el techo, y le exigieron a él chapas y tirantes. “El sábado a la mañana la llamé a la secretaria de Desarrollo Social, Ingrid Iglesias, para una ayuda, y me contestó que hable con la subsecretaria de Gobierno, Evelin Austin, pero no se puede hacer nada porque son tierras fiscales”, afirmó Sepúlveda.
El año pasado se mudó a 25 familias que estaban en riesgo al pie de un cerro en el barrio, por la caída de rocas. Las llevaron al plan de 61 viviendas en barrio Badén. El compromiso firmado era derribar las casas que quedaban, y así se cumplió, excepto una, usurpada. El riesgo sigue y se espera en algún momento que el IPV erradique a 6 familias más, aunque mucha gente arraigada en el sector no se quiere ir. Otro gran problema es la alta desocupación. La mayoría de los vecinos se dedican a la construcción, y no hay obra pública ni changas. En la zona rige la veda invernal.#