Unidad: “Es difícil hablar de resultados favorables cuando hay damnificados”

Es difícil o no se puede hablar de pocos o muchos resultados positivos o de estadísticas favorables en cuanto a la resolución de los delitos, cuando hay una persona damnificada”. Esa fue la reflexión del jefe de la Unidad Regional Trelew de la Policía provincial, comisario mayor Felipe González, al ser consultado sobre si los delitos subieron o bajaron en el transcurso de este año con la actuación de la fuerza en la jurisdicción que él comanda.

Acompañado de su segundo, comisario mayor Ariel González y del jefe operativo de la Unidad, comisario Marcelo Silva, el alto jefe policial aseveró no obstante que “para prevenir y lograr resultados favorables en la lucha contra del delito, sea del que fuera, es fundamental la colaboración del vecino”.

En ese sentido, González agregó que “la denuncia del mismo vecino, con compromiso ciudadano o la colaboración de este como en el caso de los hechos de dominio público sucedido en chacras de Treorcky (durante la semana hubo allanamientos, secuestros y personas sospechadas de cometer diversos robos y hurtos), son claves para que nuestra labor sea más eficiente y afortunadamente estamos logrando que las personas, civiles en estos casos, colaboren para que juntos lleguemos al mismo objetivo que es el de evitar hechos que violen la intimidad o los bienes de ellos mismos o de quienes viven al lado”.

El tema del trabajo en conjunto no se pasó por alto, ya que el titular de la Unidad Regional remarcó que “es bueno, para nosotros en particular y la sociedad en general, que fuerzas federales como la Gendarmería o la Policía Federal estén trabajando codo a codo con nosotros, ya sea en los operativos de saturación como en otro tipo de procedimientos, en algunos casos más complejos. Tanto ellos como nosotros aportamos logística, personal, conocimiento de campo y todo tipo de elementos para una mayor y mejor seguridad. A ello hay que sumarle la tarea que desempeñan –también junto a nosotros- de la Dirección de Tránsito y de la Guardia Urbana municipal y de Habilitaciones en temas más localesinherentes al decomiso tanto de bebidas alcohólicas como productos cárnicos y que tiene que ver –esto último- a un delito tan grave como común: el abigeato y del Servicio de Protección de los Menores en otra problemática en la que intervenimos”.

“A todo esto –añadió- contamos con el apoyo permanente del jefe de Policía, comisario general Miguel Gómez y el ministro de Gobierno, Federico Massoni, quienes además siempre nos acompañan con su presencia física en cuanto procedimiento hacemos”.

Precisamente la actuación en el lugar y su presencia física de los jefes policiales es considerada medular para quienes conducen la seguridad de una de las unidades operativas más importantes de la provincia. “Nosotros tratamos de estar en todos los sitios donde se nos precisa. Poniendo la cara y dando las explicaciones pertinentes y las posibles soluciones ante un diagnóstico que planteamos” –apuntaron tanto Felipe como Ariel González- y esa política emanada desde la Jefatura de Policía la implementamos paso a paso”.

Sin embargo y más allá que en las estadísticas el índice de los delitos en términos generales ha decaído en algo más del 10%, ninguno de los funcionarios policiales desconoce la difícil situación que padecen aquellas personas que sufren un delito. “Más que nada los de robos y hurtos, que son los quete tocan tu intimidad. Por eso, no se puede hablar de pocos o muchos resultados positivos o de estadísticas favorables en cuanto a la resolución de los delitos, cuando hay una persona damnificada por aquellos que lo cometen. Y allí tendremos que estar nosotros, los policías, con nuestras luces y sombras, para tratar de contenerlas, darle una explicación y brindarle una eventual solución”.