Conarpesa pidió el concurso de acreedores y el municipio admitió que no puede hacer mucho

Las noticias que rodean a la planta pesquera Conarpesa siguen profundizando la desazón y preocupación de los trabajadores y de toda una comunidad, que ha observado atónita la sucesión de conflictos desatados en el sector a lo largo del último año. La semana finalizó con la confirmación que el directorio de la firma presentó en un Juzgado de Capital Federal la documentación para solicitar la apertura del concurso de acreedores.
El hecho sucedió en la mañana del viernes y marca un nuevo capítulo en una semana tumultuosa, que incluyó el envío de 115 telegramas de despido a los trabajadores de la planta de los sectores de producción y de mantenimiento. A lo largo de la jornada del viernes fueron incesantes los rumores sobre la convocatoria a la conciliación obligatoria por parte de la Secretaría de Trabajo provincial.

Rechazo gremial

Desde el Sindicato de Trabajadores de la Alimentación se enviaron las cartas documento rechazando la decisión empresarial de prescindir de los servicios de los hombres y mujeres, además de plantear los términos del artículo 247 para disponer una liquidación del 50 por ciento.
A la espera de una solución estructural, en el parque pesquero continuó la toma pacífica de la planta mientras se conocían las noticias provenientes de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires sobre el concurso de acreedores que la firma solicitó.
Las autoridades de la firma Conarpesa han atribuido al permanente estado de conflicto que se vive con los marineros el cual “imposibilita la obtención de materia prima”, situación que esgrime en los telegramas remitidos a cada uno de los asalariados.
A lo largo del viernes se concretaron una serie de reuniones de características informales entre los dirigentes sindicales y representantes de la firma pesquera aunque no permitió avanzar en ninguna solución en concreto. Desde la empresa se mantienen firmes en su postura original mientras que los trabajadores buscan saber qué ocurrirá con la planta porque la propia firma realizó la presentación formal solicitando la apertura del concurso de acreedores.
Por la tarde los trabajadores concurrieron a la entidad sindical para cumplir con la formalidad de dejar constancia del rechazo del telegrama de despido que envió la planta pesquera al grueso del personal de línea de producción y de mantenimiento. La idea de las partes es poder continuar dialogando para acercar posturas e intentar destrabar el conflicto originado a mediados de la última semana.

Versión Sastre

De este modo, la cuestión pesquera volvió a instalarse con fuerza en el escenario político y social de Puerto Madryn. Las sucesivas decisiones del directorio de la planta Conarpesa que se inició con el despido de 115 trabajadores, todos de su línea de producción, sumado a la presentación del concurso de acreedores marcaron el termómetro de la situación que se está viviendo y que genera nubarrones en el futuro inmediato.
Ante la confirmación de lo sucedido, sólo profundizó la angustia y desazón de los hombres y mujeres del sector. El intendente Ricardo Sastre planteó la preocupación por estas acciones que se conocieron en la última semana.
“Hay que ver cuál fue la situación que llevó a detonar en esta presentación”, dijo Sastre, quien aclaró que “esperemos que una convocatoria de acreedores sea y permita acomodar los números desde lo económico y financiero”. Más allá de estas cuestiones específicas las autoridades municipales están observando con mucha atención lo que vaya a suceder con las fuentes laborales que están en juego y cuál será el desenlace de las gestiones encaradas entre el gremio y la patronal.
“Estamos bregando para que se puedan recuperar los puestos de trabajo que han sido dejados vacantes en las últimas horas”, dijo el jefe comunal, quien confirmó que “estaba al tanto de esta situación porque nos hemos comunicado en las últimas horas”.
Desde su rol de mandatario municipal reconoció que la preocupación pasa por lograr una interacción entre las partes aunque remarcó que “tenemos muy pocas herramientas como para tomar decisiones importantes”. Más allá de estas cuestiones todo se mantiene bajo un cerrado hermetismo con la intención de poder revertir la situación y garantizar la continuidad operativa de Conarpesa en el parque pesquero de Puerto Madryn. #