Para Mundo Marino, el caso de la orca Kshamenk está cerrado

La empresa que opera el parque acuático en San Clemente del Tuyú considera “resuelto y cerrado” el tratamiento del pedido de liberación del animal que hizo Chubut. Y plantea que, según los expertos, la liberación del cetáceo no es una opción viable.

28 MAR 2013 - 0:51 | Actualizado

Las autoridades del parque acuático que funciona en San Clemente del Tuyú no han respondido a las consultas telefónicas realizadas esta semana desde Jornada y FM Tiempo de Puerto Madryn para saber su opinión sobre el proyecto que impulsará el gobierno de Chubut para lograr la liberación de la Orca, que se encuentra en cautiverio desde el año 1992.

Jornada tuvo acceso a distintas consultas que se han realizado con anterioridad y la respuesta de la empresa es que el tema ya fue tratado “tanto por las autoridades Nacionales como Provinciales de nuestro país, por varios años desde el 2001, y ya ha sido resuelto y cerrado”.

Ante consultas por escrito que se efectuaron hace un tiempo, la empresa respondió que “en el año 2005 la Secretaría de Desarrollo y Ambiente Sustentable y la Fundación Vida Silvestre convocaron a un equipo internacional de evaluación integrado por los expertos más importantes del mundo en el tema, conformado porJoseph Geraci, V.M.D, PhD,David Huff, D.V.M y Lance Barrett-Lennard, PhD”, quienes emitieron un dictamen sobre los escenarios que podrían plantearse para Kshamenk a futuro.

En esa misma comunicación el acuario indica que “Mundo Marino siempre ha tomado y tomará las decisiones que sean más seguras para la salud y bienestar de los animales que se encuentran bajo su cuidado”.

Opinión de expertos

El trabajo realizado en el año 2005 tiene como título “Evaluación del Estado Actual y Recomendaciones Relativas al Futuro de la Orca Kshamenk” y es firmado por Joseph Geraci, David Huff, y Lance Barrett-Lennard. Los especialistas inician su escrito diciendo que “de todas las opciones analizadas, opinamos que las dos que mejor parecen servir a los intereses de Kshamenk son su permanencia en su actual morada o su traslado a Six Flags”, que es un parque similar a Mundo Marino, pero ubicado en México.

Los integrantes de este grupo de especialistas consideran que “la liberación no configura una opción viable; un cerco conllevaría riesgos sanitarios, ecológicos y económicos inaceptables y la eutanasia no resulta ser una opción aplicable para el caso de Kshamenk” y agregan que de acuerdo a su opinión, “su permanencia en Mundo Marino es la opción viable que presenta el menor riesgo. Suponiendo que se mantengan las mismas condiciones de calidad de la institución, el mismo personal y administración, todo apunta a creer que la orca continuaría viviendo con un buen estado de salud”.

Los investigadores indican en su escrito que “es comprensible que se haya generado un gran debate acerca de las ventajas que implicaría la convivencia de Kshamenk con otras orcas” y opinan que “es imposible saber qué rol hubiera ocupado Kshamenk en su grupo de haber sobrevivido en su hábitat natural. En cambio, como el ejemplar ha estado en Mundo Marino la mayor parte de su vida, la cuestión radica en resolver qué constituiría un marco social aceptable para el futuro de Kshamenk. En el medio silvestre, las orcas acostumbran a permanecer con su familia durante la mayor parte o la totalidad de sus vidas, y el apareamiento tiene lugar durante asociaciones temporarias entre grupos de familias”.

Geraci, Huff y Barett-Lennard dicen en su informe que “no existen razones para creer que el apareamiento suele suceder entre individuos que pasan su vida en el mismo grupo ni que los machos participan en el cuidado de sus propias crías. Debido al alto grado de sociabilidad de las orcas, consideramos que sería inhumano hacerlo vivir en soledad” y explican que “Kshamenk ha forjado un estrecho vínculo con el delfín nariz de botella, Floppy, y con sus entrenadores. Su aspecto, salud, nivel de energía, apetito, interacciones y comportamientos no indican privación social alguna”.

Por último, en su informe, los especialistas expresan que si se considera “su actual marco social es aceptable, que no necesariamente estaría mejor con otras orcas, y que su permanencia en Mundo Marino eliminaría cualquier riesgo de traslado y aclimatación a un nuevo medio”.

Provincia quiere liberarla

La Secretaría de Turismo y Áreas Protegidas de Chubut estudia alternativas para liberar a la orca Kshamenk, que está actualmente cautiva en un oceanario de la provincia de Buenos Aires, y devolverla a las aguas del Atlántico Sur. Esta iniciativa surgió a partir de una inquietud del guardafauna Roberto Bubas, quien desde hace más de 20 años se desempeña en el Área Natural Protegida Península Valdés.

“La idea es poder liberar a la orca cautiva y devolverla al mar. Es una propuesta significativa para Chubut, una provincia que históricamente ha trabajado por la conservación de los mamíferos marinos y ha liderado en materia jurídica por la libertad de estos animales”, sostuvo el secretario de Turismo de la provincia, Carlos Zonza Nigro.

Debe recordarse que en el año 2000 la Legislatura del Chubut sancionó la Ley 4.507, que prohíbe la captura de mamíferos marinos en las costas de la provincia. En la norma se establece que ante un varamiento de cualquier mamífero marino, el mismo podrá ser retenido con el único objetivo de salvaguardar su vida, efectuarle curaciones o restablecerle los signos vitales pero una vez logrado eso deberá ser puesto nuevamente en libertad, devuelto a su hábitat natural y en el lugar más próximo de aquel donde fuera localizado.

En el caso de la orca Kshamenk, capturada en 1992, se trata de un animal que ha superado sus expectativas de vida en cautiverio, de aproximadamente 10 años.

“A nosotros nos entusiasma muchísimo esta idea de Roberto (Bubas), que sabemos que tiene un cariño especial hacia las orcas. Pero también sabemos que la posibilidad de liberar a Kshamenk involucra un proceso muy complejo, que debe ser tomado con la seriedad que merece porque está en juego el bienestar de un animal que ya ha sufrido mucho en cautiverio. Por eso estamos consultando a los máximos expertos”, detalló Zonza Nigro.

El titular de la cartera turística provincial mencionó que “hace un mes comenzamos a analizar y evaluar la factibilidad de la propuesta. Coordinamos una reunión en Buenos Aires con autoridades de la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación a la que asistieron, por parte de la Secretaría de Turismo y Áreas Protegidas de Chubut, la directora de Asesoría Legal, la directora Técnica y el guardafauna Roberto Bubas”.

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28 MAR 2013 - 0:51

Las autoridades del parque acuático que funciona en San Clemente del Tuyú no han respondido a las consultas telefónicas realizadas esta semana desde Jornada y FM Tiempo de Puerto Madryn para saber su opinión sobre el proyecto que impulsará el gobierno de Chubut para lograr la liberación de la Orca, que se encuentra en cautiverio desde el año 1992.

Jornada tuvo acceso a distintas consultas que se han realizado con anterioridad y la respuesta de la empresa es que el tema ya fue tratado “tanto por las autoridades Nacionales como Provinciales de nuestro país, por varios años desde el 2001, y ya ha sido resuelto y cerrado”.

Ante consultas por escrito que se efectuaron hace un tiempo, la empresa respondió que “en el año 2005 la Secretaría de Desarrollo y Ambiente Sustentable y la Fundación Vida Silvestre convocaron a un equipo internacional de evaluación integrado por los expertos más importantes del mundo en el tema, conformado porJoseph Geraci, V.M.D, PhD,David Huff, D.V.M y Lance Barrett-Lennard, PhD”, quienes emitieron un dictamen sobre los escenarios que podrían plantearse para Kshamenk a futuro.

En esa misma comunicación el acuario indica que “Mundo Marino siempre ha tomado y tomará las decisiones que sean más seguras para la salud y bienestar de los animales que se encuentran bajo su cuidado”.

Opinión de expertos

El trabajo realizado en el año 2005 tiene como título “Evaluación del Estado Actual y Recomendaciones Relativas al Futuro de la Orca Kshamenk” y es firmado por Joseph Geraci, David Huff, y Lance Barrett-Lennard. Los especialistas inician su escrito diciendo que “de todas las opciones analizadas, opinamos que las dos que mejor parecen servir a los intereses de Kshamenk son su permanencia en su actual morada o su traslado a Six Flags”, que es un parque similar a Mundo Marino, pero ubicado en México.

Los integrantes de este grupo de especialistas consideran que “la liberación no configura una opción viable; un cerco conllevaría riesgos sanitarios, ecológicos y económicos inaceptables y la eutanasia no resulta ser una opción aplicable para el caso de Kshamenk” y agregan que de acuerdo a su opinión, “su permanencia en Mundo Marino es la opción viable que presenta el menor riesgo. Suponiendo que se mantengan las mismas condiciones de calidad de la institución, el mismo personal y administración, todo apunta a creer que la orca continuaría viviendo con un buen estado de salud”.

Los investigadores indican en su escrito que “es comprensible que se haya generado un gran debate acerca de las ventajas que implicaría la convivencia de Kshamenk con otras orcas” y opinan que “es imposible saber qué rol hubiera ocupado Kshamenk en su grupo de haber sobrevivido en su hábitat natural. En cambio, como el ejemplar ha estado en Mundo Marino la mayor parte de su vida, la cuestión radica en resolver qué constituiría un marco social aceptable para el futuro de Kshamenk. En el medio silvestre, las orcas acostumbran a permanecer con su familia durante la mayor parte o la totalidad de sus vidas, y el apareamiento tiene lugar durante asociaciones temporarias entre grupos de familias”.

Geraci, Huff y Barett-Lennard dicen en su informe que “no existen razones para creer que el apareamiento suele suceder entre individuos que pasan su vida en el mismo grupo ni que los machos participan en el cuidado de sus propias crías. Debido al alto grado de sociabilidad de las orcas, consideramos que sería inhumano hacerlo vivir en soledad” y explican que “Kshamenk ha forjado un estrecho vínculo con el delfín nariz de botella, Floppy, y con sus entrenadores. Su aspecto, salud, nivel de energía, apetito, interacciones y comportamientos no indican privación social alguna”.

Por último, en su informe, los especialistas expresan que si se considera “su actual marco social es aceptable, que no necesariamente estaría mejor con otras orcas, y que su permanencia en Mundo Marino eliminaría cualquier riesgo de traslado y aclimatación a un nuevo medio”.

Provincia quiere liberarla

La Secretaría de Turismo y Áreas Protegidas de Chubut estudia alternativas para liberar a la orca Kshamenk, que está actualmente cautiva en un oceanario de la provincia de Buenos Aires, y devolverla a las aguas del Atlántico Sur. Esta iniciativa surgió a partir de una inquietud del guardafauna Roberto Bubas, quien desde hace más de 20 años se desempeña en el Área Natural Protegida Península Valdés.

“La idea es poder liberar a la orca cautiva y devolverla al mar. Es una propuesta significativa para Chubut, una provincia que históricamente ha trabajado por la conservación de los mamíferos marinos y ha liderado en materia jurídica por la libertad de estos animales”, sostuvo el secretario de Turismo de la provincia, Carlos Zonza Nigro.

Debe recordarse que en el año 2000 la Legislatura del Chubut sancionó la Ley 4.507, que prohíbe la captura de mamíferos marinos en las costas de la provincia. En la norma se establece que ante un varamiento de cualquier mamífero marino, el mismo podrá ser retenido con el único objetivo de salvaguardar su vida, efectuarle curaciones o restablecerle los signos vitales pero una vez logrado eso deberá ser puesto nuevamente en libertad, devuelto a su hábitat natural y en el lugar más próximo de aquel donde fuera localizado.

En el caso de la orca Kshamenk, capturada en 1992, se trata de un animal que ha superado sus expectativas de vida en cautiverio, de aproximadamente 10 años.

“A nosotros nos entusiasma muchísimo esta idea de Roberto (Bubas), que sabemos que tiene un cariño especial hacia las orcas. Pero también sabemos que la posibilidad de liberar a Kshamenk involucra un proceso muy complejo, que debe ser tomado con la seriedad que merece porque está en juego el bienestar de un animal que ya ha sufrido mucho en cautiverio. Por eso estamos consultando a los máximos expertos”, detalló Zonza Nigro.

El titular de la cartera turística provincial mencionó que “hace un mes comenzamos a analizar y evaluar la factibilidad de la propuesta. Coordinamos una reunión en Buenos Aires con autoridades de la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación a la que asistieron, por parte de la Secretaría de Turismo y Áreas Protegidas de Chubut, la directora de Asesoría Legal, la directora Técnica y el guardafauna Roberto Bubas”.


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