La increíble historia de una mujer de Trelew que vive un infierno en España

Se llama Rita Signorotto. Se enamoró de un empresario de pesca español y se fue a vivir con él a Galicia. Pero su matrimonio se derrumbó por las agresiones sexuales de su marido que está involucrado en un resonante caso de trata de blancas.

05 FEB 2011 - 22:04 | Actualizado

De la tranquilidad económica y la vida social activa en Trelew, en el corazón de la Patagonia, al infierno más profundo en O Vicedo, un pueblo perdido de Galicia, en España. Así podrían resumirse los últimos diez años de Rita Angelina Signorotto, una mujer que se fue hace una década de su terruño para instalarse junto al “amor de su vida”, un empresario español que vino a Chubut a invertir en el negocio pesquero a finales de los años ‘90 y terminó convirtiéndose en el alcalde de su pueblo.<br /><br />Hoy, seis años después de haber llegado a España, a Rita se le vino el mundo abajo: su matrimonio terminó de la peor manera, víctima de los golpes de su marido. Y por si fuera poco, involucrada, de manera involuntaria, en una resonante causa de prostitución y trata de blancas que conmueve a España –“Operación Carioca” (ver aparte)- que salpica a policías, funcionarios oficiales, empresarios y políticos del Partido Popular (PP) de Galicia. Entre ellos, a su ex amor, Jesús Novo Martínez, más conocido como “Suso”, alcalde de O Vicedo, un pequeño poblado de menos de tres mil habitantes. <br /><br />A través del teléfono, Rita habla con Jornada y llora. Mucho. Sin embargo, lucha contra su congoja y relata que los que está viviendo desde hace más de un año es peor que el infierno mismo: “Estoy viviendo un calvario sin fin, víctima de las agresiones sexuales de ‘Suso’ y de las presiones mafiosas de sus amigos, y testigo de una causa de la que no sé mucho, pero en la que tuve que estar dos días tirada en un juzgado, respondiendo miles de preguntas sobre una red de prostitución de la que yo no sé nada, aunque todos dicen que ‘Suso’ está metido hasta el cuadril”, cuenta.<br /><br />Signorotto llegó a un juzgado gallego por las agresiones de su marido pero terminó involucrada en la causa de trata de blancas porque su ex marido es uno de los principales sospechados, aunque sigue libre y ejerciendo su cargo de alcalde de O Vicedo, protegido por el influyente Partido Popular, que representa a lo más granado de la derecha española.<br /><br />Rita perdió peso –“ando con apenas 35 kilos a cuestas”, dice-, cabello y dignidad. Pero no toda. Su situación judicial es confusa y no sabe si puede o no salir de España: “Es extraño, pero no lo sé. Declaré en la causa de la Operación Carioca y me dijeron que me quedara en la casa de una mujer que ha cobijado por cinco días. Pero nadie más me llamó, en el juzgado nadie me atiende, la denuncia por agresiones física contra mi ex marido no avanza porque él es un poderoso y nadie me cree, y encima la prensa miente.”<br /><br />Signorotto se refiere a las confusas versiones publicadas por medios muy importantes de España, como el diario La Voz de Galicia y la influyente revista Interviú, que han contado la “doble vida” del alcalde de O Vicedo y su “amante” argentina como parte de una trama que la deja muy mal parada, casi como si se tratara de la vida de otra de las prostitutas involucradas en la “Operación Carioca”.<br /><br />Rita conoció a Novo Martínez cuando este gallego llegó a Rawson para instalar la pesquera Patagonian Celeiro (Ver aparte). Un socio chubutense de “Suso”, estaba casado con una prima de Rita. Así fue que se conocieron, enamoraron y trabajaron juntos en la pesquera Celeiro.<br /><br />En el 2004, la empresa cerró abruptamente sus puertas, los barcos se vendieron a empresarios españoles con negocios en Rawson y “Suso” viajó a España. Rita tuvo que poner la cara y algún dinero para pagar deudas: “Me fui como una criminal”, dice hoy, debiendo abandonar la administración de campos de la familia y un edificio, que era a lo que se dedicaba en Trelew. Además de su agitada vida social en el club Patoruzú, en donde una hija de su primer matrimonio jugaba al hockey.<br /><br />El año pasado, Rita comenzó a ver cómo naufragaba su matrimonio. Habían sido muchos años de amor pero también de lujurias extremas. Ella misma admite en la entrevista con Jornada que Novo Martínez la indujo a prácticas sexuales con personas ajenas a la pareja. “A ‘Suso’ le gustaba esa forma y yo no pude resistirme porque lo amaba”, asegura.<br /><br />En su bloghttp://lahisotriaofiicial-aquirita.blogspot.com-así, con el error de tipeo al querer registrarlo como “la historia oficial”-), Rita cuenta infinidad de anécdotas que pintan la particular relación íntima que mantenía con “Suso”. En especial, cuando la mandaba a contratar a una prostituta para hacer un ménage à trois: “ <br /><br />Rita ata cabos. La afición de su marido por las prostitutas y las actuales sospechas de integrar una red internacional de trata de blancas la hacen recordar que antes de irse a vivir a España, durante una fiesta en un campo en la zona de Camarones, “empezaron a aparecer chicas cubanas y dominicanas, y muchos empezamos a preguntarnos de dónde salían. Después me enteré que le habían pagado a un muchacho en Rawson para que se case con una de ellas, una cubana, para que pueda salir de su país e irse a España. Once años después me enteré que esa chica estaba involucrada en un caso de prostitución”, detalla Rita.<br /><br />Actualmente, Rita vive recluida en una casa de un pequeño pueblo en la costa lucense, alejada de “Suso” y las presiones políticas que intentan desacreditarla, injuriarla y vincularla con el mundo de la prostitución y las drogas. <br /><br />Del otro lado del teléfono vuelve a llorar. Desconsolada. “Hace dos meses que casi me mato cuando vino a visitarme mi hija. Pensamos que un auto nos seguía y, al escapar, tuvimos un serio accidente. Por suerte no sufrimos heridas, pero el auto quedó destruido. Y en Navidad, la pasé sola, llorando bajo la lluvia…Por favor que alguien me ayude. Quiero limpiar mi honor, no quiero irme de España como una delincuente”, suplica Rita.#

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05 FEB 2011 - 22:04

De la tranquilidad económica y la vida social activa en Trelew, en el corazón de la Patagonia, al infierno más profundo en O Vicedo, un pueblo perdido de Galicia, en España. Así podrían resumirse los últimos diez años de Rita Angelina Signorotto, una mujer que se fue hace una década de su terruño para instalarse junto al “amor de su vida”, un empresario español que vino a Chubut a invertir en el negocio pesquero a finales de los años ‘90 y terminó convirtiéndose en el alcalde de su pueblo.<br /><br />Hoy, seis años después de haber llegado a España, a Rita se le vino el mundo abajo: su matrimonio terminó de la peor manera, víctima de los golpes de su marido. Y por si fuera poco, involucrada, de manera involuntaria, en una resonante causa de prostitución y trata de blancas que conmueve a España –“Operación Carioca” (ver aparte)- que salpica a policías, funcionarios oficiales, empresarios y políticos del Partido Popular (PP) de Galicia. Entre ellos, a su ex amor, Jesús Novo Martínez, más conocido como “Suso”, alcalde de O Vicedo, un pequeño poblado de menos de tres mil habitantes. <br /><br />A través del teléfono, Rita habla con Jornada y llora. Mucho. Sin embargo, lucha contra su congoja y relata que los que está viviendo desde hace más de un año es peor que el infierno mismo: “Estoy viviendo un calvario sin fin, víctima de las agresiones sexuales de ‘Suso’ y de las presiones mafiosas de sus amigos, y testigo de una causa de la que no sé mucho, pero en la que tuve que estar dos días tirada en un juzgado, respondiendo miles de preguntas sobre una red de prostitución de la que yo no sé nada, aunque todos dicen que ‘Suso’ está metido hasta el cuadril”, cuenta.<br /><br />Signorotto llegó a un juzgado gallego por las agresiones de su marido pero terminó involucrada en la causa de trata de blancas porque su ex marido es uno de los principales sospechados, aunque sigue libre y ejerciendo su cargo de alcalde de O Vicedo, protegido por el influyente Partido Popular, que representa a lo más granado de la derecha española.<br /><br />Rita perdió peso –“ando con apenas 35 kilos a cuestas”, dice-, cabello y dignidad. Pero no toda. Su situación judicial es confusa y no sabe si puede o no salir de España: “Es extraño, pero no lo sé. Declaré en la causa de la Operación Carioca y me dijeron que me quedara en la casa de una mujer que ha cobijado por cinco días. Pero nadie más me llamó, en el juzgado nadie me atiende, la denuncia por agresiones física contra mi ex marido no avanza porque él es un poderoso y nadie me cree, y encima la prensa miente.”<br /><br />Signorotto se refiere a las confusas versiones publicadas por medios muy importantes de España, como el diario La Voz de Galicia y la influyente revista Interviú, que han contado la “doble vida” del alcalde de O Vicedo y su “amante” argentina como parte de una trama que la deja muy mal parada, casi como si se tratara de la vida de otra de las prostitutas involucradas en la “Operación Carioca”.<br /><br />Rita conoció a Novo Martínez cuando este gallego llegó a Rawson para instalar la pesquera Patagonian Celeiro (Ver aparte). Un socio chubutense de “Suso”, estaba casado con una prima de Rita. Así fue que se conocieron, enamoraron y trabajaron juntos en la pesquera Celeiro.<br /><br />En el 2004, la empresa cerró abruptamente sus puertas, los barcos se vendieron a empresarios españoles con negocios en Rawson y “Suso” viajó a España. Rita tuvo que poner la cara y algún dinero para pagar deudas: “Me fui como una criminal”, dice hoy, debiendo abandonar la administración de campos de la familia y un edificio, que era a lo que se dedicaba en Trelew. Además de su agitada vida social en el club Patoruzú, en donde una hija de su primer matrimonio jugaba al hockey.<br /><br />El año pasado, Rita comenzó a ver cómo naufragaba su matrimonio. Habían sido muchos años de amor pero también de lujurias extremas. Ella misma admite en la entrevista con Jornada que Novo Martínez la indujo a prácticas sexuales con personas ajenas a la pareja. “A ‘Suso’ le gustaba esa forma y yo no pude resistirme porque lo amaba”, asegura.<br /><br />En su bloghttp://lahisotriaofiicial-aquirita.blogspot.com-así, con el error de tipeo al querer registrarlo como “la historia oficial”-), Rita cuenta infinidad de anécdotas que pintan la particular relación íntima que mantenía con “Suso”. En especial, cuando la mandaba a contratar a una prostituta para hacer un ménage à trois: “ <br /><br />Rita ata cabos. La afición de su marido por las prostitutas y las actuales sospechas de integrar una red internacional de trata de blancas la hacen recordar que antes de irse a vivir a España, durante una fiesta en un campo en la zona de Camarones, “empezaron a aparecer chicas cubanas y dominicanas, y muchos empezamos a preguntarnos de dónde salían. Después me enteré que le habían pagado a un muchacho en Rawson para que se case con una de ellas, una cubana, para que pueda salir de su país e irse a España. Once años después me enteré que esa chica estaba involucrada en un caso de prostitución”, detalla Rita.<br /><br />Actualmente, Rita vive recluida en una casa de un pequeño pueblo en la costa lucense, alejada de “Suso” y las presiones políticas que intentan desacreditarla, injuriarla y vincularla con el mundo de la prostitución y las drogas. <br /><br />Del otro lado del teléfono vuelve a llorar. Desconsolada. “Hace dos meses que casi me mato cuando vino a visitarme mi hija. Pensamos que un auto nos seguía y, al escapar, tuvimos un serio accidente. Por suerte no sufrimos heridas, pero el auto quedó destruido. Y en Navidad, la pasé sola, llorando bajo la lluvia…Por favor que alguien me ayude. Quiero limpiar mi honor, no quiero irme de España como una delincuente”, suplica Rita.#


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