Puerto Madryn: bolsas y polémica

Aparecieron sobre restos protegidos que están en el sector conocido como “Curva del Indio”.

26 FEB 2014 - 21:52 | Actualizado

El paisaje intermareal de Puerto Madryn, en especial de la zona conocida como “la curva del Indio” otorga a los vecinos y visitantes imágenes únicas de su litoral costero.

En ese lugar se encuentran desde hace más de un siglo y medio los restos de una embarcación que habría encallado años antes de la llegada de los primeros colonos galeses y para cuya preservación se ha colocado una protección con bolsas rellenas de suelo-cemento de cuya existencia no muchos saben.

Vecinos de Madryn que desconocían la presencia de restos arqueológicos en el lugar se acercaron a Jornada en las últimas horas con imágenes de las bolsas que fueron colocadas hace pocos meses, algunas de las cuales habrían perdido parte de su contenido y están desparramadas a pocos metros del lugar donde están los restos.

Lo que se puede observar es la parte más expuesta de la protección física permanente de los restos del naufragio conocido como Bahía Galenses 2 (BG2), que se encuentran en la zona intermareal de la playa ubicada en la denominada Curva del Indio. Esa protección se colocó para impedir el avance del deterioro de los restos del naufragio y consta de una defensa de 60 centímetros de altura que se confeccionó con bolsas de arpillera plástica rellenas con suelo-cemento (una mezcla de limo, arena y cemento) que según la explicación de quienes participaron en el proyecto tiene como la particularidad de que se endurece en contacto con el agua.

Cuando se realizó el operativo se informó que las bolsas de arpillera plástica se degradan con el tiempo debido a la radiación solar, pero el relleno mantiene sus propiedades mecánicas por muchos años.

El objetivo en su momento de colocar esa defensa fue brindar protección adecuada de los restos arqueológicos al imitar las condiciones ambientales previas a su desenterramiento (manteniendo la humedad, evitando la erosión).

También se buscó ofrecer protección adecuada contra posibles accidentes de los bañistas y paseantes que circulan por el lugar y se indicó que con el tiempo las bolsas se cubrirán de organismos bentónicos.

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26 FEB 2014 - 21:52

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En ese lugar se encuentran desde hace más de un siglo y medio los restos de una embarcación que habría encallado años antes de la llegada de los primeros colonos galeses y para cuya preservación se ha colocado una protección con bolsas rellenas de suelo-cemento de cuya existencia no muchos saben.

Vecinos de Madryn que desconocían la presencia de restos arqueológicos en el lugar se acercaron a Jornada en las últimas horas con imágenes de las bolsas que fueron colocadas hace pocos meses, algunas de las cuales habrían perdido parte de su contenido y están desparramadas a pocos metros del lugar donde están los restos.

Lo que se puede observar es la parte más expuesta de la protección física permanente de los restos del naufragio conocido como Bahía Galenses 2 (BG2), que se encuentran en la zona intermareal de la playa ubicada en la denominada Curva del Indio. Esa protección se colocó para impedir el avance del deterioro de los restos del naufragio y consta de una defensa de 60 centímetros de altura que se confeccionó con bolsas de arpillera plástica rellenas con suelo-cemento (una mezcla de limo, arena y cemento) que según la explicación de quienes participaron en el proyecto tiene como la particularidad de que se endurece en contacto con el agua.

Cuando se realizó el operativo se informó que las bolsas de arpillera plástica se degradan con el tiempo debido a la radiación solar, pero el relleno mantiene sus propiedades mecánicas por muchos años.

El objetivo en su momento de colocar esa defensa fue brindar protección adecuada de los restos arqueológicos al imitar las condiciones ambientales previas a su desenterramiento (manteniendo la humedad, evitando la erosión).

También se buscó ofrecer protección adecuada contra posibles accidentes de los bañistas y paseantes que circulan por el lugar y se indicó que con el tiempo las bolsas se cubrirán de organismos bentónicos.


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