“Uno le veía un exceso de confianza”

El intendente deslizó que muchos vecinos sospechaban de las actitudes del sujeto. Y que la detención no los sorprendió.

16 ABR 2014 - 23:00 | Actualizado

Luego de la detención de un docente de Dolavon acusado por acoso sexual a una alumna de 15 años, el intendente de esa localidad, Martín Bortagaray, deslizó que “uno lo que sabe es lo que se enteró por intermedio de la Policía y lo que se sabe en la comunidad”. Ante FM Tiempo 91.5 de Trelew, los calificó como “hechos muy preocupantes, muy graves, porque es en un establecimiento con chicos de 12 a 20 años, donde hay una influencia de las personas que educan que es muy fuerte”.

-¿Qué se hablaba de esta persona?

-Uno escucha rumores que a veces son ciertos y a veces no, que hacen a la vida de las personas. Yo tengo una llegada muy fuerte hacia el ambiente joven, donde se cuentan cosas de comportamientos que no son propios de un docente. Pero uno nunca iba a presuponer este tipo de cuestiones, no lo puedo imaginar, no ha pasado por la cabeza de uno. Uno veía situaciones que hacían dudar de que estuviera a cargo de un establecimiento educativo.

-¿Qué tipo de comportamiento?

-Diferentes actitudes que son difíciles de explicar, y que hacen a personas diferentes, que a uno no le generan demasiada confianza. Sin que la comunidad lo supiera, cuando trascendió que se trataba de un allanamiento a un docente, la mayoría desconfiaba de él. Tenía una cierta desconfianza sobre las actitudes de este docente. Y esto que digo yo lo decían muchas más personas.

-¿Usted pudo hablar con él?

-Sí, unas cuatro o cinco veces. Lo conocía, pero no más que eso. Y fue docente en la William Morris. Estaba insertado en la comunidad educativa. Uno veía actitudes que no le simpatizan pero que no significa que sean malas. Que hace desconfiar de las personas, al menos para tener cargos directivos, llevar adelante una escuela.

-¿Hace cuántos años que está en la zona?

-Desde hace unos seis años.

-¿Sabe si tiene familia?

-No, sé que está separado desde no hace mucho tiempo, pero no sé nada más.

-Muchas personas no se sorprendieron por su detención…

-Mucha gente no se sorprendió.

-¿Sorprendió lo hallado en su domicilio?

-Algunas cosas se rumoreaba que hacía, pero eran rumores. Y uno toma cuidados. Pero esto no es sólo el “grooming”. Se conocen, se ven, es una relación profesor-alumno, y eso hace que tengan contacto y una influencia. Esto tiene una doble presión hacia los menores más allá de los contactos a través de las redes sociales.

-¿Se sabía que él recibía a alumnos en su domicilio?

-Estaba en 28 de Julio así que desconocía eso. Simplemente uno veía actitudes de exceso de confianza con los alumnos, actitudes en una fiesta que no son propias para un profesor. No puedo hablar más que eso, porque si no entro en el chusmerío de barrio. Pero uno ha observado después de comentarios y quejas de alumnos y de padres que hacían al comportamiento del docente.

-¿Cambió el trato y la confianza entre alumnos y docentes?

-Puede ser diferente a lo de nuestros abuelos, pero hay una línea que debemos mantener todos los que estamos a cargo. Ese principio tiene que ser muy fuerte. Uno va a recibir educación, formación y valores. Conducta, responsabilidad, trabajo, orden, solidaridad, integración. Uno puede tener algún otro tipo de confianza, de charlar, de hacer chistes, pero hay actitudes que cruzan la raya. Hay líneas que no se deben cruzar ni siquiera por quedar simpático.

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16 ABR 2014 - 23:00

Luego de la detención de un docente de Dolavon acusado por acoso sexual a una alumna de 15 años, el intendente de esa localidad, Martín Bortagaray, deslizó que “uno lo que sabe es lo que se enteró por intermedio de la Policía y lo que se sabe en la comunidad”. Ante FM Tiempo 91.5 de Trelew, los calificó como “hechos muy preocupantes, muy graves, porque es en un establecimiento con chicos de 12 a 20 años, donde hay una influencia de las personas que educan que es muy fuerte”.

-¿Qué se hablaba de esta persona?

-Uno escucha rumores que a veces son ciertos y a veces no, que hacen a la vida de las personas. Yo tengo una llegada muy fuerte hacia el ambiente joven, donde se cuentan cosas de comportamientos que no son propios de un docente. Pero uno nunca iba a presuponer este tipo de cuestiones, no lo puedo imaginar, no ha pasado por la cabeza de uno. Uno veía situaciones que hacían dudar de que estuviera a cargo de un establecimiento educativo.

-¿Qué tipo de comportamiento?

-Diferentes actitudes que son difíciles de explicar, y que hacen a personas diferentes, que a uno no le generan demasiada confianza. Sin que la comunidad lo supiera, cuando trascendió que se trataba de un allanamiento a un docente, la mayoría desconfiaba de él. Tenía una cierta desconfianza sobre las actitudes de este docente. Y esto que digo yo lo decían muchas más personas.

-¿Usted pudo hablar con él?

-Sí, unas cuatro o cinco veces. Lo conocía, pero no más que eso. Y fue docente en la William Morris. Estaba insertado en la comunidad educativa. Uno veía actitudes que no le simpatizan pero que no significa que sean malas. Que hace desconfiar de las personas, al menos para tener cargos directivos, llevar adelante una escuela.

-¿Hace cuántos años que está en la zona?

-Desde hace unos seis años.

-¿Sabe si tiene familia?

-No, sé que está separado desde no hace mucho tiempo, pero no sé nada más.

-Muchas personas no se sorprendieron por su detención…

-Mucha gente no se sorprendió.

-¿Sorprendió lo hallado en su domicilio?

-Algunas cosas se rumoreaba que hacía, pero eran rumores. Y uno toma cuidados. Pero esto no es sólo el “grooming”. Se conocen, se ven, es una relación profesor-alumno, y eso hace que tengan contacto y una influencia. Esto tiene una doble presión hacia los menores más allá de los contactos a través de las redes sociales.

-¿Se sabía que él recibía a alumnos en su domicilio?

-Estaba en 28 de Julio así que desconocía eso. Simplemente uno veía actitudes de exceso de confianza con los alumnos, actitudes en una fiesta que no son propias para un profesor. No puedo hablar más que eso, porque si no entro en el chusmerío de barrio. Pero uno ha observado después de comentarios y quejas de alumnos y de padres que hacían al comportamiento del docente.

-¿Cambió el trato y la confianza entre alumnos y docentes?

-Puede ser diferente a lo de nuestros abuelos, pero hay una línea que debemos mantener todos los que estamos a cargo. Ese principio tiene que ser muy fuerte. Uno va a recibir educación, formación y valores. Conducta, responsabilidad, trabajo, orden, solidaridad, integración. Uno puede tener algún otro tipo de confianza, de charlar, de hacer chistes, pero hay actitudes que cruzan la raya. Hay líneas que no se deben cruzar ni siquiera por quedar simpático.


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