Dirigentes del Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Alimentación, junto con trabajadores de Consermar, le respondieron al empresario Javier Ortiz, que criticó al secretario general de ese gremio, Luis Núñez. José Luis Morales y Daniel Meza afirmaron “él como empresario que dice que es tan serio, no tendría que tener la gente en negro, en primer lugar”.
Los dirigentes del STIA narraron los hechos que derivaron en el despido de un grupo de trabajadores que pidieron su regularización y la aplicación del convenio colectivo de trabajo. Morales, secretario gremial de STIA, denunció que “el que está en falta es Ortiz; tuvimos varias audiencias y él se manifestó en una sola y después no se presentó a ninguna más; se borró del mapa y no tenemos ninguna novedad sobre ese tema; es todo mentira”.
Defendió a Núñez al indicar que “no es como dice él, que Núñez está cerrando empresas: cierran porque son muy mal administradas por sus propios dueños; las empresas las manejan los empresarios; no el Sindicato ni los trabajadores”. El secretario Gremial denunció que el empresario “no tiene gente en blanco, son todas mentiras; tiene 78 trabajadores que no están registrados en ningún lado”.
“Lo notificaron porque le hicieron una inspección y encontraron como 25 trabajadores no registrados hace como 60 días y no se ha hecho presente para regularizar ese personal que tenía en negro”.
Por su parte, los trabajadores también criticaron al titular de Consermar. Y recordaron que el conflicto se originó cuando solicitaron mejores condiciones laborales. “Lo único que pedimos es que se nos blanquee, que se nos regularice nuestra situación; en ningún momento, como están diciendo, queremos que cierre la empresa; lo desmentimos, pero que sean reincorporadas los 37 despedidos”, afirmaron.
Además narraron que “en las inspecciones que hacían en la empresa a nosotros nos escondían adentro de las cámaras para que no nos vean; no tiene ningún papel que justifique que estamos blanqueados; problemáticas con aportes de obra social y personal trabajando de forma irregular desde hace uno, siete o diez años”.
Dirigentes del Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Alimentación, junto con trabajadores de Consermar, le respondieron al empresario Javier Ortiz, que criticó al secretario general de ese gremio, Luis Núñez. José Luis Morales y Daniel Meza afirmaron “él como empresario que dice que es tan serio, no tendría que tener la gente en negro, en primer lugar”.
Los dirigentes del STIA narraron los hechos que derivaron en el despido de un grupo de trabajadores que pidieron su regularización y la aplicación del convenio colectivo de trabajo. Morales, secretario gremial de STIA, denunció que “el que está en falta es Ortiz; tuvimos varias audiencias y él se manifestó en una sola y después no se presentó a ninguna más; se borró del mapa y no tenemos ninguna novedad sobre ese tema; es todo mentira”.
Defendió a Núñez al indicar que “no es como dice él, que Núñez está cerrando empresas: cierran porque son muy mal administradas por sus propios dueños; las empresas las manejan los empresarios; no el Sindicato ni los trabajadores”. El secretario Gremial denunció que el empresario “no tiene gente en blanco, son todas mentiras; tiene 78 trabajadores que no están registrados en ningún lado”.
“Lo notificaron porque le hicieron una inspección y encontraron como 25 trabajadores no registrados hace como 60 días y no se ha hecho presente para regularizar ese personal que tenía en negro”.
Por su parte, los trabajadores también criticaron al titular de Consermar. Y recordaron que el conflicto se originó cuando solicitaron mejores condiciones laborales. “Lo único que pedimos es que se nos blanquee, que se nos regularice nuestra situación; en ningún momento, como están diciendo, queremos que cierre la empresa; lo desmentimos, pero que sean reincorporadas los 37 despedidos”, afirmaron.
Además narraron que “en las inspecciones que hacían en la empresa a nosotros nos escondían adentro de las cámaras para que no nos vean; no tiene ningún papel que justifique que estamos blanqueados; problemáticas con aportes de obra social y personal trabajando de forma irregular desde hace uno, siete o diez años”.